Una herramienta cada vez más presente en diferentes sectores de nuestros país. Sin embargo, uno de ellos es el que tendría más desarrollada esta tecnología
MARCIA URQUIZO BALBOA
Actualmente, la inteligencia artificial (IA) ha aparecido para agilizar ciertas labores y actividades que antes se habrían hecho de forma manual. Muchos sectores han comenzado a implementarla y obtener grandes beneficios de ella. Uno de ellos, y el más importante, es la minería, la cual ha tenido el mayor desarrollo en el uso de esta tecnología en Perú.
Existen muchos tipos de inteligencia artificial, cada una está orientada a una función distinta. Desde las que están incorporadas en los robots, hasta las que se utilizan en los filtros de algunas redes sociales para reconocer un rostro, todas ellas son IAs. Es por ello, que resulta complejo definir o trazar los límites de esta tecnología.
Cesár Beltrán, encargado del laboratorio de Inteligencia Artificial en la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP), señala en una entrevista que esta herramienta se puede entender como “un conjunto de algoritmos y tecnologías que intentan simular el comportamiento humano, y potenciarlo. Cuando se logra esta simulación, las máquinas ya han logrado obtener lo que se llama Inteligencia Artificial”
Bajo este concepto, las funciones de esta tecnología pueden adaptarse a diversos sectores (tal cuál las habilidades de una persona). Sin embargo, en nuestro país uno de ellos es el que más lo tiene implementado entre sus labores.
INTELIGENCIA ARTIFICIAL (IA) EN LA MINERÍA
En la actualidad, relacionar la minería como una actividad meramente extractiva ha quedado en el pasado. Gracias a las tecnologías que se han ido adecuando a las necesidades del sector, se han logrado obtener operaciones más seguras, sustentables y a menor costo frente a los trabajos mineros más complejos, remotos o profundos.
La inteligencia artificial ha convertido a la minería en minería inteligente, ya que el uso de información, datos, máquinas autónomas predictivas y tecnologías avanzadas permiten una mayor productividad, mejor seguridad y una reducción en costos operativos durante el procesamiento.
Al respecto, el ingeniero Reynaldo Mayorca, responsable de los proyectos y servicios de automatización de ABB en Perú, indica que “la Inteligencia Artificial aplicada a los datos en la minería puede reducir entre 50% y 70% de las paradas imprevistas generadas por fallas potenciales. La tecnología ayuda a predecir alguna falla específica en algún punto de la planta de procesamiento y que puede generar grandes daños económicos”.
Es decir que, al aplicar esta herramienta en mayor medida dentro del sector, se adelantan los riesgos, y se almacena gran cantidad de datos para analizar comportamientos. De esta forma, los resultados son más óptimos y toman menos tiempo en darse.
Otro de los beneficios, y el más notable, está muy ligado con la reducción de gases de efecto invernadero ya que genera un aumento en la eficiencia energética de los equipos. Al reducir la emisión de gases, el uso de la IAs presentan beneficios directos en el medioambiente y vuelve más sostenible el sector.
De acuerdo al ingeniero Mayorca, en cuanto a la estandarización de esta tecnología en todo el sector, comenta que “para implementar la inteligencia artificial se debe, como primer paso, contextualizar la información, es decir se debe organizar los datos de cada proceso para desplegar algoritmos especializados de inteligencia artificial”.
A nivel general, ya se está avanzando en la adopción de tecnologías mineras inteligentes. Ya existe una amplia gama de sistemas y productos disponibles que proporcionan ahorros significativos, mayor eficiencia y mejoras en la seguridad. Esta nueva situación debe verse como una ventaja para la minería, en comparación a otros ámbitos que aún no emplean o no tienen desarrollada esta herramienta.
¿POR QUÉ ES LA MÁS PRESENTE EN EL SECTOR?
Si bien una de las razones por las que esta tecnología tiene mayor presencia en la minería es por sus múltiples beneficios, lo cierto es que la accesibilidad a los equipos y programas también tiene mucho que ver.
“La minería tiene mayor acceso a esta tecnología principalmente porque sus ingresos pueden costearla. Obviamente este es un hecho positivo, ya que han obtenido avances en sus procesos. Este sector es un ejemplo de cómo se pueden escalar si se adaptan las inteligencias a las labores humanas. Así es como se ve el futuro de nuestras industrias”, indica Cesár Beltrán, de la PUCP.
Las apuestas por establecer soluciones tecnológicas han sido las que cementaron la incursión de herramientas inteligentes. Mientras más proyectos nacionales se presenten con esta tecnología, mayores serán los avances.
“La minería ha sido el primer paso, pero no podemos estancarnos ni depender del desarrollo internacional. Tanto el equipo, los softwares y los especialistas se deben formar en nuestro país, así se conoce el contexto de los proyectos. Bajo este panorama, se puede construir sectores más inteligentes”, finaliza Beltrán.