Precios entre un auto convencional y uno eléctrico podrían equipararse en el 2026. Empresas esperan incentivos del gobierno para producir y comercializar
DANIEL BEDOYA RAMOS
Comprar un auto eléctrico puede ser más difícil de lo se cree, si lo que se toma en cuenta son los precios, en especial si solo se busca entre las marcas más conocidas. Uno se puede encontrar con precios que tranquilamente están sobre los US$ 100.000 y, muy pocas veces, por debajo de los US$ 40.000.
Y si se compara con un vehículo convencional, el auto eléctrico puede resultar mucho más caro. ¿A qué se debe esta diferencia?
Primero hay que entender el contexto. El mundo aún vive los efectos de la pandemia de COVID-19, la guerra entre Rusia y Ucrania, y, según el informe del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), atravesamos un fuerte aumento mundial de la inflación que ha empujado a la pobreza a unos 71 millones de personas en solo tres meses.
Por otro lado, a fines de junio un informe de la empresa estadounidense AlixPartners señaló que el costo de la materia prima para la producción de vehículos eléctricos, como cobalto, níquel y litio, se duplicó en los últimos dos años, aumentado un 144 % desde marzo de 2020.
Es decir, no es una fácil situación. Pero para Miguel Inchaustegui, ex ministro de Energía y Minas, el elevado costo actual de los vehículos eléctricos se debe fundamentalmente a la tecnología y lo que sucede es algo similar a lo que pasó con la energía solar, hace algunos años.
“Es por la tecnología. Lo mismo ha pasado con la generación de energía a través de paneles solares y eólica. Hace 10 o 15 años el costo de implementar esa generación de energía era muy alto. Ahora la tecnología ha avanzado y el costo de tener paneles solares y energía eólica se ha reducido”, indicó.
¿Y QUÉ ES LO QUE LO MÁS COSTOSO EN EL AUTO ELÉCTRICO?
Milko Guerovich, gerente comercial de Modasa, indicó desde la experiencia de su empresa que el principal costo para producir un vehículo eléctrico es la batería de litio.
El fabricante peruano ha producido el primer bus eléctrico en el Perú, en alianza con la empresa Volkswagen, por ello conoce bien este proceso. “El principal costo aquí es la batería de litio, que esperamos que con la demanda los precios vayan bajando. Como no es una producción en masa, los costos son altos”, indicó a este Diario, durante la feria Electrotransporte 2022, que se realizó en la Universidad de Piura.
El vehículo de transporte urbano de Modasa estuvo en exhibición durante la feria, tiene una autonomía de 200 kilómetros y en carga rápida puede ser energizado en solo tres horas. Es bastante amplio y puede contar con aire acondicionado. Sin embargo su costo es de US$ 300.000, según detalló Guerovich, lo cual equivale al doble o un poco más que un bus a Diesel o a GNV.
¿RETRASO EN MASIFICACIÓN?
En nuestra región, Colombia lidera el cambio tecnológico con mayor adquisición de autos y buses eléctricos, seguido por Brasil, México, Chile. Sin embargo, estos precios elevados pueden significar un retraso en la masificación y el cambio por vehículos que no emiten CO2.
Para Andrés Vergara, CEO de Voltera, el hecho de que hayan aumentado el precio de algunas baterías y haya una escasez de microprocesadores, han incidido en el aumento del precio parcial de estos vehículos y “efectivamente retrasa un poco” la masificación.
Sin embargo, en comunicación desde Chile, destacó que también se debe considerar al incremento del combustible fósil como una oportunidad para considerar los beneficios de ahorro del auto eléctrico, además del avance tecnológico.
“Pero el avance de la tecnología de los vehículos eléctricos es tan rápido. Estamos viendo cómo cada año aumentan las autonomías de 10% a 20% al año. Va ser inevitable el cambio. Nuestra estimación en Voltera es que al 2025 vamos a tener paridad de precios entre vehículo de combustión interna y vehículos eléctricos. A más tardar en el 2026, si es que la situación se complejiza”, dijo el especialista.
Además, comentó la importancia de las empresas chinas que tienen una tarifas más económicas de vehículos eléctricos que pueden mejorar la oferta en el mercado. “Ellos tienen tal volumen y tal automatización en las plantas que logran producir vehículos de altísima calidad a precios muy competitivos”, explicó sobre la industria china, que compite con fabricantes europeos, estadounidenses y japoneses.
ALTERNATIVAS EN PERÚ
Para contrarrestar esta situación, el ex ministro Inchaustegui consideró que lo que se necesita es impulsar la investigación de otras alternativas tecnológicas, como el hidrógeno verde. Mientras tanto, en el Perú podría ayudar el gas natural como paso del combustible fósil a la energía eléctrica.
“Yo creo que el tema que podría ayudar a esta transición del combustible fósil a la energía eléctrica es el gas. Ese podría ser un primer paso para después generar, cuando ya esté más adelantado el tema del hidrógeno verde, cuando estén más adelantadas las innovaciones y costos de vehículos eléctricos se reduzca. El gas puede ayudar a esa transición”, dijo.
Además, recordó que también ayudaría que el gobierno reduzca el Impuesto Selectivo al Consumo y el IGV (Impuesto General a las ventas), para promover que las empresas sigan comercializando estas unidades.
En ese sentido, Guerovich añadió que es importante promover el financiamiento a largo plazo que requieren los buses de transporte público. “Un bus a Diesel se compra a 4 o 5 años de financiamiento, a plazos. Esto de acá (el bus eléctrico de Modasa) se tiene que dar de ocho a diez años”, dijo, no sin destacar que en el Perú existe una demanda, “pero para eso se necesita el apoyo del gobierno”. Así se podría llegar a los niveles de Chile, México o Colombia, donde tienen más de 500 buses en el transporte urbano.
Actualmente Modasa cuenta con tres unidades, pero no las está vendiendo pese a que tiene la capacidad para producir 50 buses mensuales. El gerente comercial contó que las empresas de transporte están interesadas, pero no pueden acceder. “Esperemos que el próximo año ya tengamos un tipo de soporte financiero, que es lo que buscan las empresas de transporte público para poder acceder a adquirir este tipo de unidades”, dijo a este Diario.
Visto todo este panorama, a pesar de los precios elevados actuales, será cuestión de tiempo para que los vehículos eléctricos predominen en el parque automotor peruano.