RAJESH KUMAR SINGH Y DEBJIT CHAKRABORTY

Gautam Adani y Mukesh Ambani se están beneficiando de un aumento en los precios mundiales de las materias primas provocado por la invasión rusa de Ucrania, puliendo sus credenciales de combustibles fósiles incluso cuando los hombres más ricos de Asia empujan públicamente sus pivotes hacia una energía más verde.

Con los precios del carbón disparados a un récord, el conglomerado de Adani está expandiendo una mina controvertida en Australia para satisfacer la demanda. Reliance Industries de Ambani está comprando cargamentos de petróleo crudo en dificultades con descuentos para alimentar su complejo de refinación, el más grande del mundo. Reliance incluso aplazó un mantenimiento programado de la instalación para ayudar a producir más diésel y gasolina, cuyos márgenes se dispararon hasta tocar un máximo de tres años.

Los dos magnates indios están interviniendo en un momento en que muchos países desarrollados están luchando por fuentes alternativas de combustibles mientras intentan alejarse de los suministros rusos. 

Este mes, el G7 se comprometió a prohibir las importaciones de petróleo ruso. La interrupción también ha vuelto a centrar la atención en la necesidad de más carbón, el fósil más sucio que el mundo ha prometido eliminar gradualmente para reducir las emisiones.

Aunque Adani, de 59 años, y Ambani, de 65, han desvelado una inversión verde combinada de 142.000 millones de dólares durante las próximas décadas en un giro que los aleja del carbón y el petróleo, la base de sus imperios, también les resulta difícil acabar con los combustibles fósiles, a medida que el conflicto aviva la demanda. Se espera que la demanda mundial de carbón aumente a un nivel récord en 2022 y se mantenga allí hasta 2024, según la Agencia Internacional de Energía.

La guerra ha creado un viento de cola para las empresas basadas en combustibles fósiles en India, dijo Chakri Lokapriya, director gerente y director de inversiones de TCG Advisory Services en Bombay

“El daño colateral es que los combustibles fósiles seguirán desempeñando un papel vital durante los próximos 20 años o más”, dijo, y agregó que era tiempo suficiente para obtener beneficios de las inversiones basadas en el carbono.

Los representantes de Adani Group y Reliance Industries no respondieron a un correo electrónico solicitando comentarios.

El optimismo en los precios del carbón ayudó a la firma insignia Adani Enterprises a registrar un aumento del 30% en las ganancias durante los tres meses que terminaron en marzo, el más alto en seis trimestres, mientras que el aumento de los precios de los productos derivados del petróleo ayudó a Reliance, que registró una de sus mayores ganancias trimestrales.

Las acciones de Reliance y Adani Enterprises se dispararon un 19% y un 42% respectivamente entre el 24 de febrero, cuando comenzó la invasión, y finales de abril, antes de que una caída de las existencias a nivel mundial acabara con algunas de esas ganancias. 

Adani ha agregado alrededor de US$ 26.000 millones a su riqueza desde que comenzó la guerra, elevando su patrimonio neto a casi US$ 107.000 millones, según el Índice de multimillonarios de Bloomberg. La fortuna de Ambani aumentó en casi US$ 8.000 millones a US$ 92.400 millones.

No son solo estos dos multimillonarios indios los que se benefician del aumento de las materias primas. Otros incluyen a los magnates estadounidenses del petróleo y el gas Harold Hamm, Richard Kinder y Michael S. Smith, y Low Tuck Kwong de Indonesia, el jefe de la empresa minera de carbón PT Bayan Resources, quienes han visto aumentar su riqueza este año.

Casi el 60% de los ingresos de Reliance provienen de la refinación de petróleo y la petroquímica, el negocio principal fundado por el difunto padre de Ambani. Desde que lo heredó en 2002, Ambani ha estado reduciendo la dependencia del conglomerado de la refinación de petróleo al diversificarse hacia el comercio minorista, las telecomunicaciones y la tecnología.

India ha comprado millones de barriles de crudo de los Urales en el mercado spot desde finales de febrero, según datos recopilados por Bloomberg. Si bien los flujos de petróleo ruso hacia India no están sancionados, el país del sur de Asia ha dicho repetidamente que esos envíos son minúsculos en comparación con las compras de Europa y representan una pequeña fracción del consumo total del país. También brindan cierto alivio en un momento en que las presiones inflacionarias están aumentando. Los precios al consumidor de la India aumentaron más en ocho años en abril.

"Hemos minimizado el costo de la materia prima al obtener barriles de arbitraje", dijo a los periodistas el director financiero conjunto de Reliance, V. Srikanth, el 6 de mayo, sin proporcionar detalles. “Los impulsores generales de la demanda son muy prometedores”, dijo refiriéndose al fuerte repunte de la demanda de combustibles fósiles.

Las refinerías en India exportaron 3,37 millones de toneladas de diésel en marzo, el nivel más alto desde abril de 2020, cuando las ventas en el extranjero alcanzaron un récord de 3,4 millones de toneladas debido a que la demanda local se desplomó durante el confinamiento por la COVID-19, según datos del sitio web de Petroleum Planning and Analysis Cell. Las exportaciones de gasolina alcanzaron un máximo de cinco años de 1,6 millones de toneladas.

El carbón ha visto un regreso igualmente fuerte en los últimos meses. “La gente había comenzado a escribir el obituario del carbón hace dos o tres años, pero hoy, al parecer, los días del carbón aún no han terminado”, dijo Pramod Agrawal, presidente de la minera estatal Coal India Ltd. a los inversionistas este mes .

Para el empresario de primera generación Adani, el carbón es fundamental para su imperio. Ha invertido más de US$ 3.000 millones en minas de carbón en India, Australia e Indonesia. Su mina Carmichael en Queensland, que ha sido blanco de activistas ambientales, incluida Greta Thunberg, durante años, comenzó a enviar el combustible solo este año.

En una llamada de ganancias del 4 de mayo, Adani Enterprises dijo que planea aumentar la capacidad anual de la mina Carmichael a 15 millones de toneladas en el año hasta marzo de 2023, aproximadamente un 50% más de lo que aprobó su directorio para la primera fase del proyecto. Planea exportar hasta siete cargamentos capesize por mes, dijo el director Vinay Prakash en la llamada.

Se espera que la "situación geopolítica" mantenga fuertes los precios del carbón por ahora, pero "cualquiera puede adivinar" cuánto durará esto, dijo Prakash a los inversionistas.