La producción de petróleo creció 6,8 por ciento en 2021 (+6,5 por ciento en volumen absoluto porque 2020 fue año bisiesto) después de alcanzar los 513,2 miles de barriles diarios. El nivel de actividad registrado el año pasado superó en 0,9 por ciento al registro de 2019 dentro de una progresión de menor a mayor.

Este buen desempeño se extendió en los primeros meses de 2022. De hecho, en febrero se alcanzó el mayor volumen mensual desde diciembre de 2011, según datos preliminares, con 561 mil barriles diarios (+14 por ciento interanual).

La producción de gas natural concluyó el 2021 con un crecimiento de 0,7 por ciento (2020 fue bisiesto) al alcanzar los 124,1 miles de metros cúbicos diarios. El volumen extraído el año pasado se ubicó un 8,2 por ciento por debajo del registro de 2019.

En el primes mes de 2022 la producción avanzó un 12 por ciento interanual para sostener su buen momento y dicha tendencia habría continuado en febrero con un alza de 11,1 por ciento interanual, según datos preliminares.

El impulso procedente de la demanda de combustibles volvió a explicar el alza del petróleo procesado en las refinerías. El consumo aparente creció 13,4 por ciento en 2021, mientras que el stock de crudo se ubicó en los 1368 miles de m3 al concluir diciembre de 2021 (equivale al 4,6 por ciento de la producción).

PRODUCCIÓN DE GAS NATURAL CONCLUYÓ 2021 CON UN CRECIMIENTO DE 0,7%
La inyección de gas al sistema de transporte registró un aumento de 4 por ciento interanual en el cuarto trimestre del año pasado (+1,1 por ciento vsIV-2019) y acumuló un alza de 5,5 por ciento en 2021.

Mientras tanto, el consumo de los usuarios finales creció 4,2 por ciento interanual en el cuarto trimestre de 2021 (+3,9 por ciento vs IV-2019) para cerrar el 2021 con un incremento de 7,6 por ciento, (en ambas cifras sin considerar a las destilerías por cambios en la forma de medición).

Según datos provisorios del ENARGAS, el gas inyectado al sistema crecería en el orden del 5 por ciento interanual en enero y al 1,5 por ciento interanual en febrero para extender el sendero de crecimiento.

Las exportaciones de energía treparon a los US$ 5.215 millones en 2021 y evidenciaron un alza de 45,1 por ciento interanual (+US$  1.621 millones vs 2020). La paulatina suba de los precios medios de exportación a lo largo del año pasado (cerraron +64,2 por ciento en 2021), siguiendo a las cotizaciones internacionales, permitió más que compensar un desempeño negativo de los volúmenes comercializados al exterior (-14,9 por ciento en 2021).

Las importaciones de bienes energéticos totalizaron unos US$ 5.844 millones en 2021, lo que implicó un crecimiento de 121,4 por ciento interanual (i.a). Los volúmenes adquiridos aumentaron 68,1 por ciento i.a., mientras que los precios medios lo hicieron un 26,1 por ciento i.a.

El gas natural (licuado o gaseoso) y el gasoil explicaron un 74 por ciento del incremento general. En enero de 2022 advertimos una morigeración temporal en el alza de las importaciones.

Para Alejandro Ovando, Director de IES Consultores “la escalada de los precios internacionales anticipa un invierno complicado, mientras que la producción de gas y petróleo seguirá en alza en 2022”.

En enero de 2022 el barril de petróleo operó en los US$ 59,2 (+17,9 por ciento i.a.) en el mercado interno y en los US$ 78,1 (+48,6 por ciento i.a.) en el mercado externo. Cabe destacar que los guarismos mencionados son muy convenientes para incentivar la extracción de crudo (convencional y no convencional) siendo que el breakeven ronda los US$ 35 y US$ 45.

Transcurridas las audiencias públicas del gas la autoridad competente, el ENARGAS, autorizó un incremento, vigente a partir de marzo, de 60 por ciento para la remuneración de las transportadoras y de 36 por ciento para el componente fijo de la tarifa del segmento de distribución (el variable por consumo sube 19 por ciento).

Las exportaciones de energía suman U$S 5.215 millones en 2021 y crecieron 45,1%

Estos guarismos tendrían un impacto final en la factura de los usuarios finales del 20 por ciento para los hogares y de 15 por ciento para los comercios pyme

PERSPECTIVAS
La producción de petróleo seguiría en el sendero de crecimiento en los próximos meses.

Despejado el panorama con el FMI y con una situación sanitaria controlada son pocos los argumentos en contra de un normal desarrollo de las inversiones previstas en Vaca Muerta para apuntalar la producción de crudo (se prevé una inyección de US$ 5.000 millones en 2022 la mayoría destinados a explotación de petróleo).

La producción de gas crecería en un escenario desafiante. Los buenos números de la producción en los primeros meses de 2022 son alentadores de cara al corto plazo. El volumen de gas extraído podría asimilarse a los registros de 2019 en los próximos meses de acuerdo a un panorama delicado para asegurar el suministro a medida que bajan las temperaturas.

En ese sentido, consideramos que los precios en el mercado spot deberían lentamente ir en alza para favorecer un mayor bombeo de las empresas.