La guerra de Rusia en Ucrania sumó dificultades al ya demorado cumplimiento de las metas de los DOS en el tema energético, Europa cambia de estrategia.
ANAHÍ ABELEDO
La invasión de Ucrania ha revelado realidades incómodas para las metas de la transición energética globales. No solo la guerra puso en evidencia la dependencia energética de algunos países europeos del gas ruso, sino que hace revisar otras posibles dependencias y dar giros estratégicos en los conceptos ambientalistas. Por un lado, las renovables ganan espacio para reemplazar al gas ruso, pero por otro se quema carbón para la emergencia. "Cuando nos encontramos a mitad del camino entre la adopción de la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible y su cumplimiento, la región paneuropea está en camino de lograr solo 26 de las 169 metas de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) para este año", asegura el informe de la CEPE 2022 sobre el progreso de los ODS publicado el viernes último en Ginebra. El sarcasmo de la OPEP al cuestionar la política sinuosa de Occidente: "Ahora somos superhéroes".
El uso de combustibles fósiles, como el carbón que es el más contaminante, ya no recibe la misma condena en Europa. Pero también se comienza a hablar oficialmente del riesgo de caer en otra dependencia al consumir baterías originarias de China, sus minerales y tecnología.
Del mismo modo, la emergencia exhibe los altos costos que insume la transición y la necesidad de barajar y dar de nuevo, de esto sabe Boris Johnson que en estos días anuncia la postergación de su plan de energías renovables.
En sintonía la Comisión Europea afirmó que la región debe hacer un gran esfuerzo por acelerar el progreso si quiere alcanzar los objetivos. Acercarse a las metas exige algunas concesiones, como la revisión del uso de la energía nuclear.
Mientras tanto, los grandes exportadores de petróleo, OPEP, encontraron la gran oportunidad para reivindicar su actividad en un mundo que busca alejarse cada vez más de las energías fósiles.
Instalaciones de gas en Nesvizh, cerca de Minsk
DIAGNÓSTICO: LAS METAS 2030
"El informe del año pasado debía ser una llamada de atención para que la región acelerara las medidas colectivas. Pero hoy, un año después, nuestro informe muestra que los avances han sido demasiado lentos: donde necesitábamos acelerar el progreso en 57 metas, ahora ha aumentado a 64; mientras que el año pasado teníamos nueve metas para las que necesitábamos invertir la tendencia, ahora tenemos 15", comentó la secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para Europa (CEPE), Olga Algayerova.
"Con los efectos negativos de la pandemia de COVID-19 que todavía no se reflejan plenamente en los datos disponibles, y los efectos de la guerra en Ucrania aún por evaluar, el riesgo de que la región fracase en la Agenda 2030 nunca ha sido tan alto", advirtió.
"Además, el 40% de las 169 metas no pueden ser medidas adecuadamente por las estadísticas oficiales. Esto es un recordatorio urgente de que estadísticas precisas y fiables no solo son la base de un buen análisis técnico, sino que son el fundamento de la elaboración de políticas basadas en hechos a todos los niveles", concluyó.
La región ha avanzado mucho en el acceso a servicios básicos como el agua potable (meta 6.1) y la energía (meta 7.1). Para garantizar la disponibilidad y sostenibilidad del agua y el saneamiento, la región debe acelerar los avances en materia de saneamiento (meta 6.2), calidad del agua (meta 6.3), eficiencia en el uso del agua (meta 6.4) y en cooperación internacional y gestión nacional de los recursos hídricos (meta 6.5).
La mayoría de los países han aumentado el uso de las energías renovables (meta 7.2) y han mejorado la eficiencia energética (meta 7.3), pero es necesario acelerar el ritmo para alcanzar los objetivos de 2030. Los avances en la reducción de las subvenciones a combustibles fósilesse han ralentizado (meta 12.c) y, a pesar de las perspectivas positivas anteriores, la región ya no está en vías de alcanzar el objetivo.
Las perspectivas son positivas en cuanto a la contaminación marina (14.1) y la conservación (meta 14.5) y una pesca más regulada (meta 14.6). La región necesita actuar urgentemente para invertir las tendencias en torno a la deforestación (meta 15.5), la biodiversidad (meta 15.2), el turismo sostenible (meta 12.b) y las políticas de cambio climático (meta 13.2).
Las emisiones de gases de efecto invernadero en las economías en transición de la región siguen aumentando; entre los países desarrollados, las emisiones están disminuyendo, pero no lo suficientemente rápido como para cumplir los objetivos de 2030 (meta 13.2). En otras áreas críticas como la generación y el tratamiento de residuos, el uso sostenible de los recursos naturales y la conservación de los ecosistemas, la región debe acelerar el progreso.
BORIS RECALCULA
Boris Johnson se enfrenta a otro retraso humillante en su estrategia energética. Se esperaba que el primer ministro revelara los planes para reforzar los suministros del Reino Unido en los próximos días, después de retrasar la fecha.
Un enfrentamiento entre Boris Johnson y Rishi Sunak sobre la expansión de la energía nuclear está detrás del último retraso en la estrategia de seguridad energética del gobierno, tan esperada desde hace mucho tiempo. El primer ministro está presionando para que se construyan entre seis y siete nuevas centrales nucleares grandes de un tamaño similar a Hinkley Point C para 2050, ya que busca reducir drásticamente la dependencia del país del petróleo y el gas.
Pero las propuestas están siendo fuertemente resistidas por el Tesoro, con el canciller preocupado de que la gran inversión en energía nuclear no proporcione al contribuyente una buena relación calidad-precio.
Sin embargo, se dice que el canciller se resiste a cualquier nuevo compromiso de gasto importante, insistiendo en que cada ‘libra marginal’ debería destinarse a recortes de impuestos.
Es posible que el anuncio no suceda ahora a fines de mes, la línea de tiempo más reciente dada por Downing Street, y el 4 de abril parece lo más probable, según el Financial Times.
El OBR destacó que los británicos se enfrentan a la mayor caída en el ingreso real disponible registrado este año.
El primer ministro prometió una nueva estrategia energética en medio del caos de la invasión rusa de Ucrania, advirtiendo que Occidente debe «destetarse» de los suministros de gas y petróleo de Moscú.
Ha insistido en que las energías renovables, las plantas nucleares más pequeñas y la explotación de las propias reservas de petróleo y gas del Reino Unido en el Mar del Norte desempeñarán un papel clave.
Se cree que Johnson quiere que la energía nuclear proporcione el 25 por ciento de la electricidad del Reino Unido para 2050.
Se espera que el gobierno asuma una participación del 20 por ciento en el desarrollo de la planta nuclear Sizewell C en Suffolk como parte de la campaña, y el grupo energético chino CGN se retirará del proyecto. Ha surgido que las familias que viven cerca de plantas de energía nuclear y parques eólicos terrestres podrían obtener facturas más bajas como parte de la estrategia.
El secretario de Educación, Nadhim Zahawi, respaldó un descuento al señalar que las reglas de planificación se flexibilizarán en el plan.
Actualmente, en Inglaterra, los parques eólicos terrestres deben contar con el respaldo prácticamente unánime de los lugareños para obtener el visto bueno, aunque los obstáculos son mucho menores en otras partes del Reino Unido.
Sin embargo, hay que redactar un nuevo paquete de apoyo, mientras lucha por controlar la montaña de deuda de 2,3 billones de libras esterlinas del Reino Unido y el aumento de los pagos de intereses.
Una fuente de Whitehall dijo: ‘Necesitamos generar energía más barata y limpia en el Reino Unido para ser independientes de la energía.
Pero es probable que el tema sea controvertido con las bases conservadoras, muchas de las cuales no quieren que se rescinda la capacidad de los residentes locales para oponerse a los parques eólicos. Johnson no está dispuesto a aportar una libra más.
Boris Johnson en el eólico marino de Moray al este de Aberdeenshire.
UE EN REVERSA
Bélgica dio un giro respecto a la resistencia a utilizar energía nuclear y prolongó la producción de sus plantas por una década. Otra vez, la realidad se impone y el francés Emmanuel Macrón va quedando menos aislado en su prédica de hacer resurgir la energía nuclear.
Ayer se concretó el giro de los ecologistas que gobiernan en coalición con otros cinco partidos. El timonazo fue tildado de "espectacular: los dirigentes de Groen (neerlandófono) y Ecolo (francófono) han aceptado bajo presión prolongar diez años la vida de dos reactores del país, Doel 4 y Tihange 3, relanzando así el interminable culebrón del "fin de la energía nuclear belga", informa Mediapart.
Generadores vapor en nucleares en Francia
La vicepresidenta de España, Teresa Ribera, explicó en una mesa que reunió a ministros de Medio Ambiente y Clima de la UE en Bruselas que "cambia el modo en que debemos afrontar el paquete Fit for 55”, porque “no sólo debe ser eficaz sino socialmente aceptable” (el objetivo del paquete Fit for 55 es reducir las emisiones UE2030 un 55% con respecto a las emisiones UE1990), reproduce el diario El País.
Ribera resumió así las tres líneas maestras de su propuesta climática-energética: es necesario recortar la dependencia de los combustibles fósiles; es necesario impulsar la electrificación, "desacoplando el precio del gas y el del carbón del de la electricidad" (algo que hasta ayer era tabú);
“Los ciudadanos sienten la necesidad de avanzar en la agenda verde, pero al mismo tiempo están preocupados por las distorsiones en el mercado energético”. Apuntó que era necesario "reducir la volatilidad del mercado ETS para permitir a las instalaciones planificar sus inversiones y la compra de derechos de emisión".
Muy importante fue su referencia a futuras dependencias posibles, ya que llamó a "reaprovechar las materias primas críticas contenidas en estos dispositivos [las baterías], por razones ambientales, de eficiencia económica y de dependencia del exterior. No podemos pasar de depender de terceros países para el suministro de hidrocarburos a hacerlo para el abastecimiento de litio, níquel, cobalto o grafito”.
ACUERDO EE.UU Y U.E
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, anunciaron el viernes un grupo de trabajo conjunto en un esfuerzo por alejar a Europa de su dependencia del petróleo y el gas rusos.
El panel, presidido por representantes de la Casa Blanca y la Comisión Europea, tendrá como objetivo encontrar suministros alternativos de gas natural licuado y reducir la demanda general de gas natural.
Estados Unidos trabajará para suministrar a Europa al menos 15.000 millones de metros cúbicos de gas natural licuado en 2022, en asociación con otras naciones, dijo la Casa Blanca.
Biden y Scholz, una cumbre crítica (Olivier Matthys / Associated Press)
Aunque el plan podría requerir levantar nuevas instalaciones para la importación del gas natural licuado, busca también la reducción de la dependencia de los combustibles fósiles en el largo plazo a través de la eficiencia energética y las fuentes alternativas, según la Casa Blanca.
DILEMA EN EE.UU.
EE.UU. también se debate entre la ecología y la necesidad de abaratar los costos de la energía. El gobierno de Estados Unidos presiona a la industria petrolera local a producir más tras el embargo a las exportaciones rusas de crudo, pero no deja de buscar promover la transición hacia energías limpias.
La metáfora no cayó bien al lobby petrolero, que critica la política energética y ambiental de Joe Biden desde hace meses, mucho antes de la invasión rusa de Ucrania, que provocó una nueva disparada de precios del crudo.
"La administración Biden continúa acusando a todo el mundo salvo a sí misma por el aumento de los precios de la gasolina", protestó Phil Flynn, analista del mercado petrolero de Price Futures Group.
"Le echaron la culpa a los problemas de la cadena de suministros y ahora, alegremente, responsabilizan a Putin", comentó este experto. Lo que no consideran es levantar la anulación del oleoducto Keystone y las moratorias de perforaciones en tierras federales", enfatizó.
MÉXICO Y FRACASO
Para cumplir con sus compromisos ambientales nacionales e internacionales, México requiere de inversiones de 38 mil millones de dólares en generación, transmisión y distribución eléctrica. Otro compromiso que no se cumplirá en tiempo y forma.
Durante la inauguración de la 10ª edición de la Expo México WindPower, celebrada ayer, Leopoldo Rodríguez Olivé, presidente de la Asociación Mexicana de Energía Eólica (AMDEE), reiteró que el país no podrá cumplir con sus compromisos derivados del Acuerdo de París y los establecidos en la Ley de Transición Energética y la Ley General de Cambio Climático de aprobarse la reforma eléctrica que promueve el gobierno mexicano.
“Para alcanzar los objetivos del Acuerdo de París y sus propias metas plasmadas en la Ley de Transición Energética y la Ley General de Cambio Climático de 35 por ciento de la generación eléctrica a partir de fuentes limpias, [México] debería hoy añadir nueve mil 500 megawatts de nueva capacidad con nuevas inversiones tanto de CFE, como de las empresas privadas”, dijo en su discurso refiriéndose a la meta acordada para el año 2024.
“Para 2030 la situación es más crítica”, agregó el representante de la industria eólica en el país al asegurar que, de acuerdo con los planes y programas de la actual administración, solo se podrán agregar mil 300 megawatts con la repotenciación de las hidroeléctricas, la construcción de una central solar en el estado de Sonora y algo de energía geotérmica.
LATAM: NO SE PUEDE
Adelantándose al informe, la vicesecretaria general de la ONU, Amina Mohammed, advirtió hace dos semanas de forma enfática que América Latina y el Caribe no están hoy en el camino de alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible para 2030.
Las declaraciones de la alta funcionaria fueron en la quinta reunión del Foro de los Países de América Latina y el Caribe sobre el Desarrollo Sostenible, convocada anualmente por la Comisión Económica de Naciones Unidas para América Latina y el Caribe, Cepal, y que sesionó en Costa Rica en marzo.
Mohammed destacó que Latinoamérica tiene grandes desafíos estructurales: desigualdades extremas, baja productividad, alto nivel de endeudamiento, desempleo y alta informalidad, que se profundizan con graves consecuencias para las mujeres, los jóvenes y las poblaciones más vulnerables del continente.
"SUPERHÉROES",EL SARCASMO PETROLERO
El ministro de Energía de Emiratos Árabes Unidos, Suhail al-Mazrouei, dijo que los productores de petróleo que se sintieron marginados en la conferencia climática COP26 el año pasado, ahora están siendo tratados como superhéroes tras el estallido de la guerra en Ucrania. “Y así no es como funciona”, recalcó a la agencia AP.
Mazrouei: No es posible predicar renovables y pedir aumentos de producción durante una crisis.
El funcionario aseguró este lunes 28 de marzo que “estamos en un entorno en el que todos dicen: aumente su producción, traiga más recursos… pero si vamos a las instituciones financieras, todavía dudan en financiar muchos proyectos de petróleo y gas”.
Mazrouei sugirió que no era posible predicar las bondades de las energías renovables y luego pedir aumentos de producción durante una crisis.
“Están diciendo: 'Necesitamos que incrementen la producción solo por unos pocos años y después de eso, muchas gracias', como si fuera un grifo que se abre y luego se puede cerrar" agregó, durante una conferencia de la industria en Dubái.
Para que Rusia deje de exportar petróleo al mundo se necesitarían, al menos, siete millones de barriles por día provenientes de otras fuentes.