El GNK parece ser una apuesta intereante para revertir la crisis energética de Argentina, en eso coinciden Transportadora de Gas del Sur (TGS), Transportadora de Gas del Norte (TGN), Tenaris y Tecpetrol.

El presidente Alberto Fernández lanzó hace unas semanas la licitación para la compra de tuberías para la construcción del gasoducto troncal desde la formación Vaca Muerta, la cuarta reserva de petróleo no convencional del mundo y la segunda de gas, que se encuentra en la provincia de Neuquén.

Oscar Sardi, presidente ejecutivo de TGS, destacó que la obra, que en una primara etapa tendrá capacidad para inyectar al sistema 22 millones de metros cúbicos, resultará en un importante ahorro fiscal.

"Esta primera etapa es de gran contribución a la balanza comercial de Argentina por la magnitud de sustitución de importaciones y también por el potencial de exportación en verano a los países vecinos", sostuvo Sardi en una presentación en la exposición Argentina Oil & Gas.

Revertir el déficit energético es clave para Argentina, que cerró un acuerdo de deuda por US$ 44.500 millones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que incluye objetivos para reducir un profundo déficit fiscal y reponer las agotadas reservas de divisas del banco central.

El aumento que registró la producción de gas en Vaca Muerta, producto de un plan de promoción que lanzó el gobierno, hizo saturar la capacidad de transporte, por lo que la obra será clave para aprovechar los recursos naturales nacionales.

El país registró un déficit en su balanza energética de más de US$ 1.600 millones en 2021 y se podría profundizar a unos US$ 5.000 millones en 2022, según estimó la consultora Ecolatina, debido al incremento de los precios generados por la invasión de Rusia a Ucrania.

Daniel Ridelener, presidente ejecutivo de TGN destacó que la construcción del nuevo gasoducto también permitirá abastecer a nuevas industrias.

"No estamos hablando solamente de nueva infraestructura de transporte. Estamos hablando de nuevas industrias que podrían ser abastecidas, hablamos de reducir importaciones, aumentar exportaciones y, por ende, mejorar la balanza comercial de Argentina en un momento en que es relevante para el país mejorar la balanza comercial", explicó Ridelener en la exposición.

"Estamos hablando de una motorización de inversiones muy grande en toda la cadena gasífera. Es absolutamente necesario y conveniente esta nueva infraestructura de transporte que se está encarando", completó.

Diego Freire gerente de Negocios de Líquidos de Transportadora Gas del Sur (TGS), expuso en el panel "Transporte, tratamiento y almacenamiento de gas" de la Jornada de Gas Natural de la AOG 2020 y destacó que “está claro el potencial que tiene Vaca Muerta. Pero estamos con dificultades para abastecer con la producción local a la demanda del país debido a restricciones que existen hoy en el transporte de gas".

"El GNK  ampliará la capacidad de transporte de Vaca Muerta y va a permitir poner en valor la producción incremental de gas. Esto se va a transformar en ahorro de divisas porque vamos a poder reducir importaciones de gas desde Bolivia y de GNL”, indicó.  El proyecto permitirá ampliar la capacidad de transporte en una primera etapa en 22 millones de metros cúbicos diarios (MMm3/d) y, en una segunda etapa,  hasta los 39 MMm3/d.

“El nuevo gasoducto en carpeta coronará este repunte. Hay que superar las asignaturas pendientes en materia de infraestructura para promover la oportunidad que significa el desarrollo de la cadena de gas y potenciar a la industria. Somos un país con un acervo petrolero fuerte y federal, podemos generar empleo y kow how de calidad para exportarle al mundo”, afirmó Javier Martínez Álvarez, presidente de Tenaris para el Cono Sur,

Ricardo Markous, CEO de Tecpetrol, la petrolera del Grupo Techint,  remarcó que Vaca Muerta permitirá reemplazar el gas de Bolivia y el gas natural licuado (GNL) importado, además de ofrecer la chance de instalar nuevas plantas de fertilizantes a partir de precios competitivos. “La estimación de recursos de Vaca Muerta habla de al menos 200 trillones de pies cúbicos (TCF, por sus siglas en inglés). Como país consumimos 2 TCF anuales, por lo que tenemos consumo para 100 años”

Tanto Álvarez como Markous coincidieron que el gasoducto (el proyecto Néstor Kirchner que está en etapa de licitación) es el gran desafío inmediato. “La producción de Vaca Muerta es viable, competitiva y abundante. Hay cuellos de botella de infraestructura”, indicó Martínez Alvarez.