JUAN SALDARRIAGA
Después de 76 días de deliberaciones, el gobierno peruano dio a conocer el informe final de la comisión multisectorial encargada de proponer medidas para masificar el gas natural.
El documento de 274 páginas - consensuado por seis ministerios y por Perú-Petro - centra su atención en evaluar los mecanismos para aumentar las reservas probadas de gas natural, estimadas en 9,6 trillones de pies cúbicos (TCF), y en desarrollar la infraestructura necesaria para masificar su uso en el sur y centro del país.
Es decir, en las regiones de Puno, Apurímac, Arequipa, Moquegua, Ayacucho, Ucayali, Pasco, Junín, Tacna y Cusco, región que concentra las mayores reservas de gas natural del país, pero que, increíblemente, no lo emplea aún en sus hogares.
Desde ese punto de vista, la comisión aboga de manera especial por el relanzamiento del gasoducto surperuano (GSP) - hoy rebautizado como STGAS - empleando la traza original por cuanto “generaría un menor tiempo en su desarrollo y ejecución”.
La comisión calcula que la construcción del proyecto podría ser retomada de manera efectiva en el segundo semestre del 2023 con miras a ponerlo en funcionamiento por tramos, empezando en Cusco (2023), continuando con Apurímac y Puno (2025) y siguiendo con Arequipa, Moquegua y Tacna (2026), hasta su operación final en 2028 o 2029.
Para cumplir con este cronograma, la comisión aboga por reutilizar los bienes (tubos) del gasoducto sur peruano (GSP), abandonados por Odebrecht en Cusco.
“De acuerdo con el benchmarking realizado por el Minem, si no se usaran los bienes del proyecto GSP, la construcción se ampliaría en tres años más. (Por eso) el Minem deberá efectuar las acciones correspondientes para la utilización de los bienes de la antigua concesión”, explica.
Adicionalmente, la comisión sugiere que el Ejecutivo y/o el Congreso se comprometan, promulgando una normativa que declare de interés nacional el SITGAS, e implementando una comisión independiente para realizar el seguimiento a los avances en la ejecución del proyecto.
RESERVAS DE GAS NATURAL
Dado que el SITGAS necesitará reservas adicionales de gas para su buen funcionamiento, la comisión propone también que Perú-Petro y el Minem efectúen las acciones necesarias para asegurar los volúmenes de gas natural requeridos.
En tal sentido, recomienda hacer lo posible para reclasificar los recursos contingentes del lote 58 (2,3 TCF), de CNPC, a la categoría de reservas.
También, renegociar los contratos de exportación de los lotes 56 (Pluspetrol) y 57 (Repsol), los cuales vencen en 2028, de tal manera que puedan ser empleados en el SITGAS cuando éste entre en funcionamiento por esas mismas fechas.
Y que el Minem vea la forma de “hacer viable la actividad de exploración, desarrollo y producción en la cuenca Madre de Dios”, donde hay recursos prospectivos de 18 TCF.
Del mismo modo, aconseja que Perú-Petro negocie nuevamente con los contratistas de los lotes 88 (Pluspetrol) y 56, “compromisos de exploración, incluyendo perforación de nuevos pozos exploratorios”, que conlleven al incremento de sus reservas.
En el caso de la masificación del gas natural en Ayacucho, Huancavelica y Junín, la comisión propone tender ramales que partirían del ducto de TGP. Mientras que para Ucayali aconseja aprovechar la infraestructura existente (construida en su momento por Aguaytía Energy).
La comisión multisectorial estuvo presidida por la PCM e integrada por representantes de los ministerios de Energía y Minas, Economía y Finanzas, Comercio Exterior y Turismo, Justicia y Derechos Humanos, Relaciones Exteriores, así como el presidente de Perú-Petro.