El precio del gas licuado experimentó un salto de 4,1% en agosto y empujó al IPC. En términos nominales ha subido 92% desde 2010 y, descontada la inflación, el alza es de 36%
DAVID NOGALES
La economía chilena registró en agosto una inflación de 0,4%, cifra que superó las expectativas del mercado. De acuerdo al informe del INE, la división Vivienda y servicios básicos fue la que empujó al IPC del mes de agosto y, dentro de ese avance, la mayor incidencia tuvo que ver con el gas.
En efecto, el precio del gas licuado experimentó un salto de 4,1%, el cual no es para nada aislado. Según el INE, el gas acumula un alza de 19,2% en 2021 y 21,2% en 12 meses.
Los precios a público registrados por el SERNAC confirman el fuerte repunte que ha tenido este hidrocarburo en los últimos años. En agosto, un balón de gas licuado catalítico de 5 kilos tenía un valor promedio de $ 11.082 en la Región Metropolitana, cifra considerablemente mayor a los de $ 5.770 que tenía en agosto de 2010. Se trata de un alza de $ 5.310 en una década, o de 92% en términos nominales. Sin embargo, al considerar la inflación, el incremento es de 36%.
¿Es cara esta fuente de energía? De acuerdo a GlobalPetrolPrice, el precio promedio del GLP en todo el mundo es de US$ 0,70 por litro al 6 de septiembre de este año y en Chile se calculó en US$ 0,68.
El precio más caro se encuentra en Suecia, donde supera los US$ 1,3 por kilo, mientras que la cara opuesta es Argelia con menos de US$ 0,06.
GlobalPetrolPrice explica que, como regla general, los países más ricos tienen precios más altos, mientras que los países más pobres y los países que producen y exportan gas natural tienen precios significativamente más bajos.
Las diferencias en los precios entre los países se deben a los diversos impuestos y subsidios para el hidrocarburo.
“Todos los países tienen acceso a los mismos precios del gas natural de los mercados internacionales, pero luego deciden imponer diferentes impuestos. Como resultado, el precio minorista del GLP es diferente”, explica la entidad.
La energía
Al margen de ello, hay que señalar que existe un alza generalizada en el precio de la energía, lo que se ha reflejado en la inflación de los países de la OCDE y de las grandes economías de Europa. Hace algunas semanas, por ejemplo, el precio del petróleo llegó a máximos de seis años, mientras que otros hidrocarburos como el gas natural se encuentran en máximos de varios años.
Según Bloomberg, esto se debe a que una enorme brecha en el suministro está avivando los mercados en todo el mundo.
Los futuros del gas en Europa han establecido récords todos los días de esta semana en medio de crecientes temores sobre una escasez durante el invierno, ya que Rusia, el principal proveedor, está limitando las exportaciones para reponer las reservas en casa.
Los contratos en Estados Unidos cotizan en su nivel más alto desde 2014, y la mayor parte de la producción del Golfo de México permanece cerrada tras el paso de un huracán.