El diputado Carlos Coggiola explicó dos proyectos que presentó para evitar que la sequía se extienda y al mismo tiempo, provoque un golpe al suministro eléctrico
La falta de lluvias y nevadas en la zona cordillerana desató una crisis hídrica en gran parte de la Patagonia, generando que los gobiernos de Neuquén, Río Negro y Chubut decreten la “emergencia hídrica”.
Se trata de un fenómeno que viene acrecentándose desde hace por lo menos 13 años y que particularmente en este 2021, registró la peor sequía en 50 años. Por todo esto, diferentes actores y legisladores comenzaron a tratar al tema con mucha más atención.
En Neuquén, el diputado provincial Carlos Coggiola, del bloque del partido Democracia Cristiana presentó dos proyectos que tienen que ver con la emergencia hídrica que sufre su provincia y casi toda la región.
Uno para decretar una “Campaña de Prevención y Concientización sobre el uso racional del agua”, y otro para reactivar la Planta Industrial de Aguas Pesadas (PIAP) en Arroyito, como una alternativa energética.
“A esta crisis hídrica hay que resolverla desde un punto de vista integral y como una de las alternativas de creación de energía eléctrica es la energía nuclear, es indispensable que vuelva a funcionar la planta industrial de agua pesada que está acá en Arroyito, que no produce desde el 2017”, planteó Coggiola en diálogo con La Tecla Patagonia.
El legislador que responde al exgobernador Jorge Sobisch, consideró que –a este ritmo- no solo va haber una crisis con el agua, sino “también de energía eléctrica”.
“Va a haber una crisis hídrica de agua y también de energía eléctrica. Tenemos que abordarlo desde todos los puntos para que podamos frenar esto a tiempo”, advirtió el diputado.
Según los reportes de la autoridad interjuridiccional de Cuencas es una sequía que tiene 13 años y que sistemáticamente viene bajando el nivel de lluvias y nevadas en la zona de la cordillera. Si bien los gobiernos de la región están tomando cartas en el asunto, la gravedad del tema anuncia una sequía todavía más grande para el comienzo de la primavera y el verano.
“Lo que sucede en esta oportunidad es que se da en forma simultánea con la sequía de la cuenca que desemboca en el Río Paraná. Hoy tenemos una sequía general y estructural en todo el país”, explicó Coggiola, quien agregó que se deben “salir a buscar otras alternativas” para resolver el conflicto.
La iniciativa que presentó el diputado surge de la situación de emergencia hídrica que atraviesa la provincia y convoca para llevarlo adelante a la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC) y a organizaciones no gubernamentales ambientalistas.
El programa consiste en desarrollar acciones que generen responsabilidad en la comunidad sobre el uso del agua. Entre ellas, un plan de difusión masiva; un plan de acción en el ámbito local, con las municipalidades y Comisiones de Fomento; fomentar la participación ciudadana; e incorporar en el ámbito del Consejo Provincial de Educación un programa de concientización y uso eficiente del agua.
De igual modo, el proyecto hace referencia al estado de conservación de las instalaciones y para ello pide conocer las tareas y recursos que se destinan para su mantenimiento y la dotación de personal destinada a tal finalidad.