Con el estudio final de la demanda detallada por el gas natural y la ingeniería de detalle del trazo ya se puede estructurar el proyecto a ser licitado, según Jaime Gálvez
El Sistema Integrado de Transporte de Gas Zona Sur del País (SIT-Gas), también conocido gasoducto del sur (y que reemplazará al cuestionado Gasoducto Sur Peruano – GSP), quedará en manos del nuevo Gobierno . ¿En qué situación se encuentra?
El ministro saliente de Energía y Minas, Jaime Gálvez, detalló a Gestión que el SIT-Gas ya tiene un estudio de Mott MacDonald, con el cual se confirma un trazo muy similar al original (por la sierra), que resulta rentable privada y socialmente, pero se complementa con algunos ramales para que lleguen a algunas ciudades importantes. Además, señaló, se certificó -con otra consultora- las reservas de gas natural para los 30 años de horizonte de tiempo que tendría el gasoducto.
Lo que falta ahora -afirmó Gálvez- es el estudio final de la demanda detallada por el gas natural y la ingeniería de detalle del trazo, “que puede usar la ingeniería que tenía el proyecto anterior, pero igual necesita completarse con el nuevo trazo”. “Con ambos temas resueltos, ya se puede estructurar el proyecto a ser licitado”, remarcó.
“Se dejará los términos de referencia para el estudio detallado sobre la demanda de gas y sobre la ingeniería final del ducto. Ya le corresponde al próximo Gobierno licitar ese estudio final y después decidir qué camino seguir: un esquema Gobierno a Gobierno (G2G) o privatización por ProInversión”, agregó.
De hecho, indicó que hay varias opciones bajo las cuales licitar el proyecto SIT-Gas: por ejemplo, licitarlo a través de ProInversión, como se hizo en el caso anterior del GSP; o hacerlo vía G2G “y que tiene la ventaja de ser mucho más rápido, y una vez construido, quizás licitar la operación y mantenimiento, o encargarla a Petroperú”.
El Gobierno saliente se inclina más por la opción de hacerlo mediante el esquema G2G, “pero todavía hay alguna esperanza de que el estudio de demanda nos dé la posibilidad de que sea autofinanciado, que sería el escenario ideal para un proyecto como este”, dijo.
Temas pendientes
El otro tema pendiente es qué se hará con los tubos que se compraron para el GSP y que el Estado (Osinergmin) los tiene en custodia.
Gálvez consideró que lo mejor en esta controversia es manejarla por cuerdas separadas respecto al proyecto y formular una cláusula, ya sea si sale por ProInversión o por la opción G2G, que establezca que, en caso de que el arbitraje al que ha sido sometido el Perú determine que los tubos son del Gobierno peruano, entonces el que se adjudique la obra los tenga que usar.
En el caso de que los tubos queden en manos del antiguo consorcio, entonces ya queda en libertad del que gane la licitación de comprarles los tubos a ese consorcio.
Uso del ducto
Las conversaciones con las empresas que podrían proveer el gas (para el gasoducto del Sur) todavía no se han iniciado.
Masificación del gas pendiente
La masificación del gas natural en siete regiones del centro-sur se paró y el Ministerio de Energía y Minas (Minem) dijo que iba a evaluar si lo hacían directamente con el fondo FISE.
Al respecto, el ministro Jaime Gálvez informó que después de haberse sacado varias veces a licitación este proyecto y no haberse podido, entonces eso faculta al Estado, en el marco de la Constitución y sin cambios, poder ejecutar el proyecto directamente.
“Vamos a dejar la propuesta de que el proyecto de masificación del gas a siete regiones se ejecute directamente con los fondos FISE”, precisó.