JORGE ZARCO

El Banco Interamericano de Desarrollo da a conocer un amplio estudio en el que reúne esfuerzos de académicos e investigadores de instituciones como la Universidad del Pacífico del Perú, del Laboratorio de Investigación de Potencia y Energía Eléctrica, de la Universidad de Costa Rica, del Ministerio del Ambiente de la República del Perú, del 2050 Pathways Platform y del propio Banco Interamericano de Desarrollo, sobre procesos de descarbonización en diversos sectores de la dinámica económica del país Sudamericano.

En el sector de la energía que es una de las industrias que aportan mayores cantidades de Gases Efecto Invernadero (GEI), el documento establece: “Se estima un aumento de la participación de las Energías Renovables en el sistema eléctrico, que pasarían del 65 por ciento, valor estimado para 2020, a un 90 por ciento en 2050.

La electrificación de las distintas actividades eleva la capacidad instalada existente de 12,8 GW (46 por ciento de Energías Renovables) a casi 46 GW (85 por ciento de renovabilidad).

El escenario contempla un despliegue de las redes eléctricas inteligentes habilitadas con el almacenamiento de energía (principalmente por baterías que habilitan las Energías Renovables intermitentes), que aumenta con el tiempo y que podría habilitar la participación de los clientes en la provisión de servicios auxiliares y esquemas de respuesta a la demanda.

La Eficiencia Energética, otro de los temas ejes del documento del Banco Interamericano de Desarrollo, pronostica la reducción de hasta un 35 por ciento en el consumo de energía de los diferentes subsectores para 2050 con respecto al escenario base.

La participación del gas natural, el carbón y el petróleo para producir energía en el país disminuye en el tiempo y pasa del actual 84 por ciento a un 67 por ciento para el 2050.

Se considera que este alto porcentaje se utiliza en el sector industrial que no ha sido estudiado en detalle en este proyecto y para exportación de energía a la región, ya que se ha considerado que el resto de los países continúa consumiendo derivados de petróleo.

En el mediano plazo, establece el texto, se deberán revisar estos consumos y analizar el efecto de una reducción de su consumo aún mayor, producto de la descarbonización del consumo de energía en la industria y de los países vecinos.

El documento ya en circulación en línea es enfático: “El escenario de carbono-neutralidad evita un crecimiento desmedido de las emisiones anuales de GEI a 2050.

Estas suben en el corto plazo, pero a 2050 se logra una reducción de cinco MtCO 2e con respecto al valor estimado en 2020. Para 2050, la transformación de la matriz eléctrica y energética de Perú permite una reducción de casi 46 MtCO 2e de emisiones anuales de GEI con respecto a aquellas que resultarían en el escenario base. La descarbonización del sector energía en Perú brinda un beneficio neto de dos mil millones de dólares entre 2021 y 2050.”