El cobre operó a la baja al comienzo de la semana, ya que los temores de que China, el principal consumidor, tome medidas para frenar cualquier aumento adicional en los precios de los metales industriales reforzaron la noción de que los fundamentos superan a los precios. 

El cobre a tres meses en la Bolsa de Metales de Londres (LME) cedía un 0,2% a US$ 9.980 la tonelada. Los precios han bajado casi un 8 % desde que llegaron a los US$ 10.747,50 en mayo y en la última semana han cotizado entre los 9.800 y 10.000 dólares.

Si bien, se está viviendo una nueva apertura en las economías debido al acelerado proceso de vacunación en algunas zonas del mundo, ahora el mercado está adoptando una visión más sobria de los fundamentos.

Algunas autoridades chinas tomarán medidas energéticas contra la especulación en los mercados de materias primas, pues las pistas sobre la demanda china de metales básicos llegarán esta semana con los datos de producción industrial de mayo. El consenso es de una posible ralentización de la actividad.

China planea liberar reservas estatales de metales no ferrosos, cobre, aluminio y zinc en un programa que durará hasta fines de 2021, dijeron el proveedor de datos Shanghai Metal Exchange Market y analistas chinos.

Además

+ Un sindicato que representaba a los trabajadores en huelga de la mina de níquel de Vale en Sudbury, Canadá, recomendó que sus miembros rechazaran la última oferta de la empresa brasileña.

+ El aluminio de la LME cayó un 1,3% a US$ 2.460,50 la tonelada a las 0340 GMT, el níquel bajó un 2,8% a US$  17.970 la tonelada y el estaño cayó un 2,2% a US$ 30.950 la tonelada.

+ El aluminio ShFE disminuyó un 0,2% a 18.790 yuanes la tonelada, el níquel perdió un 1,5% a 131.570 yuanes la tonelada y el estaño cayó un 2,2% a 205.300 yuanes la tonelada.