"Auguraría que la inversión se vería muy afectada por décadas”, comentó Juan Carlos Guajardo
FELIPE ALCAÍNO/DUNA.cl
Héctor Soto y Arturo Fontaine conversaron con Juan Carlos Guajardo, doctor en economía, fundador de Plusmining y exdirector ejecutivo del Centro de Estudios del Cobre y la Minería (Cesco), sobre la contribución de la minería y el perfil chileno en este tema.
Respecto a la caída en la participación del país en el mercado de la minería del 36% al 28%, Guajardo manifestó que “Chile tuvo un boom de inversión extraordinario en la década de los 90 pero en los últimos años ha ido perdiendo fuerza, la producción chilena está estancada en 5,5%-5,7%, no ha crecido, pero eso no significa que no haya habido inversión o buenos proyectos”.
“Hay otros países que han estado avanzando raído como Perú o China”, también ha ralentizado el proceso las dificultades ambientales y con comunidades, que no estaba presente antes, “también nos hemos quedado rezagados en el descubrimiento de nuevos yacimientos”, agregó.
El experto comentó que “si uno quiere pensar en el desarrollo minero de largo plazo debe reformar el tema de la exploración minera y permitir una generación de inversión de riesgos apuntando a nuevos descubrimientos”.
Por otro lado, Arturo consultó sobre por qué se sigue exportando el mineral en vez de cables de cobre, qué pasa con las refinerías, por qué no hay valor agregado: “Es un mal negocio, el negocio de producir el mineral es el más rentable que tiene el país actualmente, hay una serie de complejidades que necesitamos avanzar”.
La mirada sobre el extractivismo
“Es una visión que va por el camino equivocado, es volver a llevar a al sector minero a algo que ya vivimos en Chile en décadas bastante pasadas, es una mirada hacia adentro donde nos alejamos de nuestras ventajas competitivas”, comentó.
“El camino es distinto, cuando se plantea la crítica al extractivismo se ignora que hay casos exitosos más afines a la realidad de Chile. En vez de pensar el desarrollo de la minería pensando en hacer cables o fundiciones, la industria de recursos naturales plantean desafíos tecnológicos, la necesidad de mantener la producción de estos yacimientos, resolver problemas ambientales o impactos con las comunidades”, sostuvo.
Proyecto del royalty
El representante también se refirió al proyecto de royalty minero: “Tal como esta planteado actualmente es bastante negativo para el desarrollo de la industria minera, porque plantea tasas muy altas. Son valores que dejarían la regulación chilena en minería muy lejos de cualquier otro país minero. La expectativa de que pudiéramos competir (…) auguraría que la inversión se vería muy afectada por décadas”.
Juan Carlos también comentó la influencia política que se vive en la región y cómo podría afectar: “La situación política en América Latina es el elefante en la habitación y podría generar una situación de precios más alta de manera permanente”.
Jobet y royalty minero: “Es importante que los inversores perciban que hay un acuerdo amplio de los actores políticos”
KAREN PEÑA/Diario Financiero
“La carga tributaria de Chile está en niveles razonables, en el rango de otras jurisdicciones relevantes de operación minera. Se puede perfeccionar, nuestra postura desde el gobierno ha sido siempre apertura a esta conversación, a tenerla dentro del marco de la institucionalidad, cosa que no necesariamente ocurrió en la Cámara. Pero siento honestamente que hemos encontrado en la comisión de Minería y Energía del Senado una buena disposición”.
Con estas palabras, el ministro de Energía y Minería, Juan Carlos Jobet, situó el momento clave que vive el proyecto de royalty minero. En un seminario, organizado -entre otros- por la Facultad de Economía y Negocios de la U. de Chile, la autoridad valoró que en la instancia hay un espíritu de tener una conversación respecto del futuro de la minería y que, en ese contexto, “tengamos una discusión informada, basada en buena evidencia y que logremos ojalá acuerdos amplios en este tema”.
Y fue enfático: “Las inversiones mineras son de largo plazo y es muy importante para atraer esa inversión que los inversores perciban que hay un acuerdo amplio de los actores políticos que permita prever que esas reglas van a ser estables en el tiempo para poder materializar los proyectos necesarios para aumentar la producción”.
Según Jobet, algunos creen que el tener el 23% de las reservas de cobre del mundo es garantía de que los inversores tendrán que venir necesariamente a Chile a explotar cobre y -según aseguró- “la mala noticia” es que hay países que con 15% de las reservas del mundo o menos pueden seguir aumentando su participación en la producción porque las reservas identificadas son muchísimo más altas que la producción anual del mundo.
Sostuvo que en la Cámara se saltó muy rápidamente a la acción pensando que una tasa de impuesto alta iba a traducirse automáticamente en más recaudación en circunstancias que esta discusión requiere mucho análisis diferenciando las industrias y los costos de las firmas. Y agregó que Chile sí tiene un royalty minero. “La discusión respecto de la carga tributaria de la minería no es una discusión de tasas, no es solamente del impuesto específico, es de la carga tributaria”, recalcó.
Por su parte, Jorge Pizarro, vicepresidente de la Cámara Alta, dijo compartir el criterio de que cualquier revisión de los tributos se tiene que hacer de manera más integral y “este debate que estamos teniendo en el Congreso tiene que ser mirando siempre que los tributos son funcionales al desarrollo integral de nuestro país; tiene que ser con todos los antecedentes a la vista y con un espíritu propositivo”.
Ahondando en la discusión, puntualizó que “cualquier norma que se establezca tiene que estar con un foco en que la industria minera tiene que aportar de manera local en las zonas donde están insertas y también al país”. Así, el senador indicó que los objetivos deberían ser avanzar hacia un desarrollo económico más sustentable en torno a las riquezas naturales y a partir de ahí crear colectivamente un valor social sostenible en el tiempo.
Sin embargo, alertó que hay otros desafíos a abordar de manera “urgente”. Entre ellos, indicó que es importante analizar una creación de un impuesto que levante recursos para ser asignados al desarrollo y adopción de tecnologías, impulsar la exploración y si las concesiones son usadas o no.
A lo que sumó que es fundamental fortalecer la institucionalidad minera. “Hoy Cochilco claramente es insuficiente en su rol y tiene que fortalecerse su capacidad técnica y, sobre todo, de supervisión, porque una de las discusiones que hay a propósito de los tributos es si se hace sobre la venta o la renta”, dijo, aludiendo a que una de las justificaciones que se dan para que se haga sobre las ventas es que no hay transparencia.
La propuesta que desplegará la oposición para tramitar el proyecto
Hasta el 4 de junio, los parlamentarios podían presentar sus propuestas como invitados a la comisión de Minería y Energía del Senado para abordar el polémico articulado. Sin embargo, mientras aún no se confirma si el gobierno impulsará una mesa técnica para apoyar el debate, los senadores de la oposición buscarán trabajar, de forma asociada, con la comisión de Futuro.
Considerando que esta última instancia -que es liderada por el senador Guido Girardi- tiene cerca de 500 personas trabajando en alrededor de 15 comisiones, una de ellas de minería verde, la idea es que a partir del funcionamiento de ésta se realice un seminario que podría durar dos días para tratar de convocar a los mejores expertos en la materia.
Pero no solo en el tema tributario en cuanto a identificar el mejor instrumento tributario, recalca Girardi al ser consultado, sino que también en "una visión más ecosistémica del desafío de la minería en Chile". Por ejemplo, en tópicos como las patentes de exploración y explotación.
El parlamentario y la senadora Yasna Provoste sería los encargados de proponerle a la comisión esta actividad en una próxima sesión. "Creo que la próxima semana vamos a tener ya un borrador, ya estamos trabajando en esto", asegura Girardi.