Acordaron mejoras en los módulos donde duermen los trabajadores y ahora todos tendrán baño privado
El parate en la actividad minera en el yacimiento Cerro Negro de Newmont concluyó luego de que el Ministerio de Trabajo de Santa Cruz llegara a un acuerdo con la firma y los gremios de los trabajadores.
En una reunión entre el secretario de Trabajo de Santa Cruz, Sergio Viotti, junto con Mathieu Vallart, de Oroplata SA., y otras autoridades de Newmont donde presentaron el plan de acción para dejar de utilizar los 2 módulos que tenían deficiencias.
"La empresa reubicó a los trabajadores que estaban en esos módulos a otros módulos habitacionales que cuentan con todas las normas de seguridad e higiene", confirmó Viotti a La Opinión Austral.
El funcionario de la cartera laboral señaló además que esos habitáculos, hasta que no se refaccionen no podrán ser utilizados. Indicó, además, que Newmont se comprometió a dejar de utilizar otros 6 módulos habitacionales que cuentan con un sólo baño para dos personas.
Con este acuerdo alcanzado tras la intervención del Gobierno de Santa Cruz, Cerro Negro quedó habilitada para poner en funcionamiento toda la actividad.
Los gremios fueron notificados del acuerdo y según se supo UOCRA y AOMA "están en una situación de absoluta tranquilidad".
La operadora Newmont Cerro Negro había suspendido este domingo sus operaciones ante un conflicto entre los gremios de la construcción y la minería.
La presencia del secretario fue clave para destrabar el incidente, al reunirse por separado con la parte empresarial y los trabajadores. Ambos se comprometieron a mantener la paz social.
Previo al acuerdo, en diálogo con LU12, el funcionario había confirmado que “independientemente de la conciliación obligatoria, decretamos el cese de actividades en ese yacimiento luego de constatar irregularidades relacionadas al origen del conflicto”.
Newmont anunció la suspensión preventiva de sus operaciones cercanas a la localidad de Perito Moreno. La decisión de la empresa fue como consecuencia de “disturbios y actos de vandalismo del personal de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (UOCRA)”.
Los trabajadores afiliados a ese gremio reclamaban el mantenimiento de módulos habitacionales. Sin embargo, el conflicto terminó con el comedor de la compañía tomado e impidió que el resto de los operarios pudiera acceder