El servicio, bajo el alero de la firma Spacex, ya está siendo probado con algunos clientes en Estados Unidos y Canadá, y la compañía inició los trámites para llegar a Sudamérica: Argentina y Chile son los países escogidos.
El plan de Spacex es detallado en un documento de la Subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel), que recoge una solicitud elevada por la filial Tibro SPA (Orbit al revés) para instalar 7 estaciones satelitales terrestres en el centro el sur de Chile. La idea es que desde estos lugares, se establezca conexión con la constelación de Starlink.
Desde la Subtel, indicaron que han tenido conversaciones con la compañía de Elon Musk "para operar tecnología satelital, principalmente en zonas rurales o extremas con baja conectividad". El organismo agregó que próximamente la filial de Starlink "solicitará un permiso experimental para comenzar a realizar pruebas en el país".
Las ciudades
La ubicación de las estaciones, como se describe en la solicitud de Tibro, es la siguiente: Caldera, Coquimbo, Pudahuel, Talca, Puerto Saavedra, Puerto Montt y Punta Arenas.
La concesión de Servicio Público de Transmisión de Datos contaría con 30 años de vigencia y uno de los requisitos es que las estaciones se ubiquen fuera de zonas urbanas, sin interferir con otros servicios fijos o móviles.
El proyecto de Elon Musk, que este 2021 superó a Jeff Bezos como el hombre más rico del mundo, está a la espera de la publicación de los decretos que le permitan convertirse en un proveedor más de internet en Chile, con velocidades que compiten incluso con el 5G.
Argentina, entre las elegidas
La Nación
En su último lanzamiento, SpaceX alcanzó dos hitos en su carrera aeroespacial al completar más de 1000 satélites que conforman su red de Internet Starlink para zonas remotas. A su vez, la puesta en órbita fue realizado con un cohete reutilizable Falcon 9, cuyo propulsor ya fue empleado en ocho ocasiones.
Los pequeños satélites se han hecho célebres, entre otras cosas, por formar “trencitos” de estrellas en el cielo nocturno mientras se van acomodando en sus posiciones orbitales finales, y por las quejas que han generado en el mundo de la astronomía.
Con un servicio de Internet satelital limitado en algunas regiones de Norteamérica, la compañía liderada por Elon Musk planea ampliar su servicio de forma global, tanto en Europa como en América latina, donde ya cuenta con una autorización para comenzar sus operaciones en la Argentina.
De acuerdo a la información publicada en el Boletín Oficial, el Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM) autorizó a la firma estadounidense a ofrecer sus servicios de conectividad en la Argentina, de acuerdo a la resolución 1291 publicada en diciembre pasado, a nombre de la empresa Tibro Netherlands. Más allá de ser una gestión administrativa más de una firma que planea operar en el país, la decisión de Starlink está reforzada por la expansión internacional, que amplía su cobertura de su conectividad satelital de Internet en zonas remotas de Reino Unido.
“Este mes planeamos ampliar la cobertura del programa Better than nothing Beta a usuarios de Reino Unido, con foco en zonas rurales y remotas donde no hay acceso a Internet por fibra o cable”, dijo Jessie Anderson, líder del área de Manufactura de SpaceX, citada por CNBC.
El servicio satelital de Starlink se encuentra en una etapa de desarrollo con un programa beta conocido como Better Than Nothing (mejor que nada) y requiere la compra de un kit de instalación de 500 dólares y un abono mensual de 99 dólares. La velocidad de conexión puede ser inestable y variar de 50 a 150 megabits por segundo, con una latencia de 20 a 40 milisegundos. A su vez, la compañía advierte que se pueden experimentar algunos cortes de servicio.