La demanda de energía eléctrica de los primeros 10 meses de año cayó 1,6% y la de gas natural 5,6% respecto al 2019
ALEJANDRO EINSTOSS*
Al año que termina le faltó energía, pero no solo por el efecto de cuarentena y el Covid, sino porque la política energética estuvo ausente de la agenda de gestión del Gobierno de Alberto Fernández.
Sin programa y con un equipo de gestión que nunca llegó a “hacer pie”, el Gobierno arrancó su gestión repitiendo dogmas pasados y del periodo 2003-2015.
Emergencia económica permanente, congelamiento tarifario, y ruptura institucional, con la intervención de entes reguladores y ruptura de los acuerdos alcanzados en el marco de las revisiones tarifarias en 2017 y pendientes desde el año 2004. Recordemos que estas medidas fueron tomadas antes de la llegada de la pandemia, que terminó de distorsionar el escenario energético del 2020.
*Miembro del IAE