JUAN RAYO E IVÁN CERDA
Para el Instituto de Ingenieros de Minas de Chile, el desarrollo de la actividad minera es compatible con la protección ambiental. Las operaciones mineras se diseñan, construyen y desarrollan con altos estándares de ingeniería, y sus potenciales efectos se pueden predecir para tomar las medidas que corresponda.
Consideramos, por lo tanto, desacertada la idea de restringir el desarrollo de proyectos mineros en los términos que señala el proyecto de Ley de Glaciares, y más aún respecto de operaciones que actualmente aportan recursos importantes para la sustentabilidad económica y social del país.
Se encuentra en trámite constitucional el proyecto de ley que persigue la protección de glaciares. Para esto, el proyecto procura la prohibición de actividades que puedan afectarlos, señalando entre ellas la exploración y explotación minera, e incluyendo aquellas que se desarrollen en el ambiente periglacial y permafrost. La iniciativa agrega que las actividades que afecten o puedan afectar glaciares, deberán cesar y requerir de las autoridades competentes las autorizaciones que procedan conforme a la ley.
El derretimiento de glaciares es un hecho que está ocurriendo en todo el planeta, independientemente de la presencia humana que exista en su entorno. Ocurre en glaciares de montaña, pero también en lugares donde la actividad humana es prácticamente inexistente, como en el caso de los casquetes polares.
El proyecto de ley equivoca el foco en su intención de proteger los glaciares. El derretimiento de glaciares ocurre como consecuencia del cambio climático, lo que está asociado a la emisión de gases con efecto invernadero. En esta materia el país está haciendo lo que corresponde, potenciando el aprovechamiento de las energías renovables para disminuir el uso de combustibles fósiles. La minería contribuye a este esfuerzo con sus diversos productos metálicos y no metálicos, aportando además a proyectos de eficiencia energética y de electromovilidad.
En Chile, algunas de las faenas mineras más importantes se realizan en torno a glaciares, las que operan después de haber obtenido el correspondiente permiso ambiental. La normativa vigente establece que en el evento que un proyecto se localice en o próximo a glaciares, debe ingresar al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental mediante un Estudio de Impacto Ambiental. De esta manera, existe actualmente la instancia técnica competente para decidir en esta materia.
Para el Instituto de Ingenieros de Minas de Chile, el desarrollo de la actividad minera es compatible con la protección ambiental. Las operaciones mineras se diseñan, construyen y desarrollan con altos estándares de ingeniería, y sus potenciales efectos se pueden predecir para tomar las medidas que corresponda. Consideramos, por lo tanto, desacertada la idea de restringir el desarrollo de proyectos mineros en los términos que señala el proyecto de ley aludido, y más aún respecto de operaciones que actualmente aportan recursos importantes para la sustentabilidad económica y social del país.