El presidente de la Confederación Empresaria de la República Argentina (CGERA), Marcelo Fernández, dijo que es necesario discutir la actividad minera por la gran cantidad de desocupados que tiene la Argentina y por la necesidad de que el país cuente con dólares para pagar su abultada deuda.
Fernández, propietario de la fábrica de cierres Lynsa, ubicada en La Tablada, Buenos Aires, afirmó que coincide con los sectores que piden la protección del medio ambiente, pero pidió coherencia, ya que muchos de los materiales que utilizan en su vida cotidiana, como los herrajes de sus casas e incluso los mismos cierres de los jeans “son de cobre o bronce”.
Fernández, ex diputado nacional por la provincia de Buenos Aires, afirmó en declaraciones a FM Tiempo de Trelew: “Nos quejamos de que las provincias son inviables, que tienen déficit fiscal y mucho empleo público. Pero según el estudio que hemos hecho, en el país tenemos solamente el 20% de los trabajadores en la industria: son 1,2 millones sobre 6,5 millones aproximadamente del sector privado. El 80% está en los servicios o en otros rubros”.
“Hay que hacer que seamos un país con desarrollo industrial, generador de riquezas, dándole valor a la materia prima. La industria tiene que ser argentina, porque es la única forma de ser un país fuerte e independiente”, afirmó.
En este contexto puso el ejemplo de la lana, que a pesar de producirse a nivel local, “si no se industrializa y se importan pulóveres, no se produce más lana, y los trabajadores desocupados tienen que irse de la provincia o recurrir al empleo público”.
“Esto hay que discutirlo con leyes en el Congreso. Una ley es una política de Estado”, insistió.
En este marco dijo que “se debe federalizar en serio la producción con incentivos impositivos, reformas tributarias y laborales para favorecer la industria y el trabajo”, y que “Argentina debe definir si quiere ser un país con industria o sin industria”.
En relación con la actividad minera y en alusión a la oposición de sectores, en particular en Chubut, Fernández indicó: “Yo quiero escuchar a los ambientalistas y quiero cuidar al medio ambiente. Ahora, me pregunto: los ambientalistas que no quieren la minería, ¿no tienen ningún metal en la casa? ¿Los herrajes son de plástico o de otro material?”.
Al agregar que seguramente la respuesta es afirmativa, Fernández explicó: “Esto quiere decir que tienen cobre y bronce en la casa. Entonces hay que ser coherentes. Porque si lo consumen y nosotros no lo explotamos generan trabajo en otro país, y acá tenemos gente que se está muriendo de hambre”.
“Seamos honestos con nosotros mismos”, reclamó. “Los respeto, porque sostienen su idea. Pero estoy seguro de que todos sus picaportes son de cobre o de bronce. Incluso los cierres de los jeans son de bronce”, añadió.
“Es cierto que hay que cuidar el medio ambiente. Lo sabemos todos. Controlemos el medio ambiente. Pero tenemos que discutir que nuestro país hermano de Chile tiene las mismas montañas que nosotros y da un valor agregado infernal a minerales”, sostuvo.
“Y nosotros -continuó- miramos para otro lado, cuando somos grandes consumidores de minerales. En Chile hay otras crisis, pero no están todos muertos o todos mal. Y se hace en otras partes del mundo”.
“Si no estamos preparados para los controles, habrá que prepararse”, dijo en este sentido. Y ejemplificó: “Yo mi empresa, en La Tablada, tiño. Y me obligaron, y es lo que corresponde, a poner una planta que me financió el banco para cuidar el medio ambiente”.
“Hay muchos temas para discutir, no solamente la minería. Pero no puede ser que no se discuta. Porque tenemos un montón de argentinos sin trabajo y necesitamos dólares para pagar la deuda impagable que tiene la Argentina”, finalizó.