SILVIA NAISHTAT
Nadie puede negar que YPF agro sorteó obstáculos e imprevistos para alcanzar sus metas. Desde los camiones cisternas que llegaban con el gasoil hasta la tranquera de los campos en 2001, a convertirse en una empresa de servicios para el campo, hubo permanencia en las políticas. La división nació como una costilla de la petrolera cuando pertenecía a la española Repsol en el 2001 al calor del argentino Marcos Capdepont, transformado hoy en el estratégico gerente del área de biocombustibles.
Concebida dentro de la petrolera como canal de venta en los 100 puntos de distribución de gasoil en el país, innovó con el canje de combustible por granos y amplió la canasta. Hoy es la novena exportadora con unas 570.000 toneladas en 2019, canjeó por el equivalente a 1,2 millones de toneladas de granos y arrima unos US$ 461 millones a las arcas de YPF. Nicolás Winschel, un ex Monsanto, es el director de la división.
Con la caída de Vicentin surgió un público entusiasta que observa en YPF agro la posibilidad de una empresa testigo en el comercio cerealero, un objetivo que requerirá nuevas acrobacias para llevarla más allá del límite de su capacidad. Pero en YPF la palabra testigo es reemplazada por la de empresa referente. Claro que hará falta más adrenalina y mucho capital de trabajo. Por lo pronto tendrá que prepararse para disputar con las otras exportadoras las entre 7 y 8 millones de toneladas que deja Vicentin en el mercado.
¿Habrá competencia feroz? ¿Mejorarán en esa pelea los precios al productor? “Hay lugar para todos”, deslizó un exportador quitando voltaje a la puja comercial. Y le puso fichas a la evolución de la compañía imaginando una mayor sinergia con otros productos como el protector de cultivos a granel que evita el uso de los bidones, buscando aprovechar la logística y capilaridad que ya tiene YPF. Deduce que podrían sumarle el biocombustible: YPF por su liderazgo, es el principal comprador del país.
Alberto Fernández y Gabriel Delgado
El ministro de Agricultura, Luis Basterra, apuesta en YPF agro a una robusta división de comercio exterior. De hecho, ya procesa parte de los granos que obtiene por canje en las plantas de la china Cofco. Carlos Iannizzotto, presidente de Coninagro, advierte que deberá adecuarse a los diferentes ciclos productivos y consolidar las tarjetas del campo que se utilizan en la compra de insumos
. Delgado, 45 años, economista y referente para casi todos los colores políticos, fanático del riego y con campo de 228 hectáreas en su natal Coronel Suárez en el que se dedica a la multiplicación de semillas, dijo en un acto improvisado en Olivos: “Nosotros, los que trabajamos en el sector agropecuario, entendemos y apoyamos mucho el proyecto de Vaca Muerta y creo que, ahora también, a YPF le toca tener la Vaca Viva”. ¿Realidad o ensoñación?