RAÚL POZA MARTÍN

Arabia Saudí responde al petróleo y el aumento de impuestos con 13.800 millones de dólares para el sector privado. Riad sufrió un descenso histórico en sus arcas por el hundimiento de los precios del crudo, por este motivo triplicó el IVA, del 5% al 15%, y suspendió el programa de inversiones ‘Visión 2030’.

El reino mostró gran preocupación por el impacto económico que el Covid-19 dejaba en las empresas nacionales. No solo en las relacionadas con el oro negro, sino también las compañías del resto de sectores afectadas por el confinamiento de la población.

El resultado. A la vez que comunicó el aumento de IVA y el freno en las inversiones, Riad aseguró que no dejaría de lado a sus empresas.

+ 13.800 millones de dólares son los inyectados desde el 14 de marzo a través de cuatro programas destinados a empresas que para combatir los efectos económicos del Covid-19 en sus cuentas.

+ Con los programas las empresas aplazaron pagos, obtuvieron financiación o refinanciaron la ya concedida.

+ Estuvo focalizada para para micro, pequeñas y medianas empresas con el objetivo de que el sector privado pueda “crecer durante el próximo periodo” y mantener el empleo”, según una nota del banco central saudí.

El sentimiento de Riad sobre la evolución económica es más positivo. Recientemente, el presidente y consejero delegado de Aramco, Amin Nasser, dio por concluida la crisis del petróleo al considerar que lo peor “ya pasó” y mostrar “mucho optimismo” para el segundo semestre.

Nasser se agarró al incremento de la demanda para lanzar estas afirmaciones en la conferencia virtual CERAWeek Conversations: “En abril vimos un incremento de demanda de entre 75 y 85 millones de barriles diarios y actualmente la vemos en 90 millones. Soy muy optimista de cara a la segunda mitad de año”.