«La idea de Genneia es seguir haciendo inversiones en la provincia en la medida que aparezcan oportunidades», dijo a EL CHUBUT el CEO de la compañía, Walter Lanosa. Con una vasta experiencia en el sector energético, asumió en su momento el desafío de volver al país desde Europa y acompañar el crecimiento de una empresa decidida al desarrollo de las renovables y que el viernes cumplió 8 años. Y puso en valor que es la misma empresa que, «cada vez que apareció una oportunidad, estuvimos presentes, y es que Chubut tiene mucho para desarrollar». 

Esta compañía que posee más del 30% de la capacidad instalada en energía eólica en la Argentina, es la número uno del sector. Y con varios parques en la provincia, avanza con más inversiones y proyecta seguir creciendo, evidenciando que vino a Chubut para quedarse. 

«Genneia ha tenido vínculos históricos con Chubut, y gracias al desarrollo eólico ha tenido una oportunidad enorme, ya que pudo aprovechar lo que la provincia tiene y ese recurso lo pone entre los mejores del mundo», destacó Lanosa. En la actualidad la compañía tiene, de los 610 megas instalados, más de 430 operando desde Chubut. «Pero además estamos invirtiendo en Chubut Norte ll, lll y lV otros 160 megas», precisó el directivo de la firma.

Y todo esto en el contexto actual de la pandemia del coronavirus, «pero seguimos poniendo el pecho y creemos sin duda que la obra va a estar realizada mucho antes de fin de año», anunció.

Esto llevará a que puedan alcanzar una cifra muy buena de generación para cualquier empresa, alcanzando casi los 800 megas de energía renovable entre todos sus parques del país, «de los cuales prácticamente 600 megas van a estar desarrollándose en la provincia del Chubut». 

Cabe recordar que en los últimos tres años, la construcción de los parques de Genneia y ampliaciones de sus estaciones transformadoras, implicando la demanda de 3 mil puestos de empleo, con un 95% de aporte local. 

REINVERTIR UTILIDADES

Desde su concepción, Genneia «no ha hecho otra cosa que reinvertir sus utilidades en nuevas instalaciones, en los últimos tiempos, en lo que es la generación de renovables», dijo Lanosa en la entrevista concedida a EL CHUBUT. Por eso habló de un ADN de la compañía que la lleva a «reinvertir en trabajos en el país lo que ha podido ganar». 

Eso tiene que ver a su vez con una idea de «acompañar el crecimiento del país aportando la energía que necesita», y si es limpia mejor. 

ENERGIA LIMPIA Y COMPETITIVA EN EL MERCADO

«Hoy la energía que producimos es equivalente al comsumo de 800 mil hogares», dijo el CEO de Genneia graficando el alcance actual del aporte que hace la firma para la Argentina. Aunque claro, se produce para alimentar la distribución a hogares en todo el país, posicinando a Chubut como motor fuerte de ese aporte nacional. 

Pero además, hay un trabajo de mejoramiento en la producción energética respecto al ambiente. Este tipo de energía limpia, como lo explicó Lanosa, «significa reducción de emisiones de dióxido de carbono; hablamos de más de un millón de toneladas». Dicho de otro modo, «estás eliminando el consumo aproximadamente de 400 mil vehículos anual». 

«Uno de los vectores de la inversión de Genneia fue no solamente entregar energía limpia, sino que fuera competitiva», apuntó Lanosa, contraponiendo a la creencia de que la generación de energía limpia es costosa y necesita de subsidios. 

Aunque en la génsis de esa industria en la Argentina los costos erán más elevados, «hoy no es verdad» que requiera de asistencia y «puede competir con las energías convencionales», afirmó convencido de ellos el directivo de Genneia. Incluso fue más allá al sostener que «es parte del menú que cualquier país del mundo debería adoptar para favorecer al medio ambiente». 

Lo graficó con el crecimiento de un niño que necesita apoyo para crecer, pero que «una vez que alcanza cierto nivel de madurez tiene que empezar a moverse por sus propios medios». Y «la energía renovable está para transitar eso; hay un trabajo que hacer para demostrar que somos capaces de competir con cualquier otra alternativa». 

Por su experiencia europea pero teniendo bajo su órbita el mercado de Africa, Lanosa está convencido que vivir en países emergentes nos permite imaginar que la tecnología viene para pegar «saltos tecnológicos». Y de este modo «eliminar etapas intermedias que otros países vivieron y nosotros podemos aprovechar para invertir de mejor manera las necesidades que tenemos que satisfacer». 

Por eso, si la energía eólica en un principio necesitó de cierto apoyo estatal, «hoy está madura para competir y generar un precio que le permita al país tener energía saludable, pero a su vez eficiente y económica».