El barril de Brent del mar del Norte para entrega en agosto se ubicó en US$39,57 en Londres, con ganancia de 3,3% por encima del cierre del lunes.
En Nueva York en tanto, el barril de WTI para entrega en julio subió 3,9% a US$36,81.
El lunes el petróleo terminó dispar aunque con poca variación.
El crudo subió "porque la atención de los inversores se concentra en la reducción de la producción", consideró Al Stanton, de RBC.
Entre otros recortes figuran los decididos por la Opep y sus países aliados en la Opep+. Su reunión debería tener lugar esta semana, según Stanton, aunque el cartel tiene marcados en su calendario los días 9 y 10 de junio.
"El entusiasmo" domina el mercado, confirmó Bjornar Tonhaugen, de Rystad Energy, "gracias a rumores según los cuales los países de la Opep+ discutirán pronto una prolongación de los recortes luego de junio".
El volumen de recorte debería reducirse a unos 7,7 millones de barriles diarios desde julio a diciembre, pero el mercado apuesta a que eso no ocurra y que por tres meses la producción actual se mantenga, informó Dinero.com
La demanda de petróleo por parte de China se ha recuperado a niveles de más del 90% de los observados antes de que la pandemia de coronavirus golpeara a principios de este año, un repunte sorprendentemente vigoroso que podría reflejarse en otros lugares en el tercer trimestre a medida que más países salen de los confinamientos.
Si bien China —el segundo mayor consumidor de petróleo del mundo— es la excepción por ahora, la reducción de las restricciones a los viajes y los paquetes de estímulo destinados a resucitar las economías podrían acelerar la demanda mundial de petróleo en la segunda mitad de 2020, según ejecutivos de la industria.
"La rápida reanudación de la demanda de petróleo de China, a un 90% de los niveles anteriores a la crisis del petróleo a finales de abril y en aumento, es una señal positiva para la economía mundial", dijo Jim Burkhard, vicepresidente y jefe de mercados de petróleo de IHS Markit.
Las cuarentenas generalizadas para contener la propagación del virus tuvieron un peaje especialmente duro en los mercados petroleros, borrando aproximadamente el 70% de los precios globales a mediados de abril y llevando a enormes acumulaciones de inventarios de petróleo y combustible en todo el mundo.
"Si se tiene en cuenta que la demanda de petróleo en China —el primer país afectado por el virus— había disminuido en más del 40% en febrero, el grado en que se está recuperando ofrece motivos para cierto optimismo sobre las tendencias económicas y de recuperación de la demanda en otros mercados como Europa y Norteamérica", dijo Burkhard.
Los precios de referencia del petróleo también se han recuperado con la relajación de los confinamientos: los futuros del Brent han subido un 50% y los futuros del crudo de EEUU más del 90% desde el 1 de mayo.
Aunque los analistas del petróleo coinciden en que la demanda de China está repuntando, las estimaciones difieren en cuanto al grado y la duración.
Wood Mackenzie prevé que el consumo de petróleo de China en el segundo semestre crecerá un 2,3% hasta alcanzar los 13,6 millones de barriles por día (bpd) con respecto al mismo período del año pasado, impulsado por el aumento del transporte y el uso industrial.
"Para el tercer trimestre, la demanda de gasolina de China habría sobrepasado a la del mismo período del año pasado en un 3%, hasta 3,5 millones de bpd", dijo la consultora, mientras que el consumo de diésel podría crecer en un 1,2%, hasta 3,4 millones de bpd, en el mismo período.
En contraste, la Agencia Internacional de Energía (AIE) dijo en su informe de mayo que la demanda de China caerá un 5% interanual, hasta 13,2 millones de bpd, en el segundo semestre.
Con todo, hay un fuerte consenso en que se espera que tanto el uso de gasolina como de diésel se acelere a medida que más personas y empresas aumentan los desplazamientos.
"China ha liderado el camino de la recuperación de la demanda hasta ahora. Después, otros países como Corea del Sur, Australia y Vietnam, donde los casos (del virus) están mayormente bajo control, experimentarán una mejora en la demanda de petróleo", dijo el analista de FGE Sri Paravaikkarasu.
Kostantsa Rangelova, analista de JBC Energy, dijo que la demanda total de productos refinados de Asia podría aumentar a 34,3 millones de bpd en el segundo semestre, frente a los 31,6 millones de bpd de los primeros seis meses, pero aun así serán unos 1,5 millones de bpd menos que en el mismo período de hace un año, principalmente debido a la disminución de la demanda de combustible para aviones.
En India, el consumidor de petróleo número 3 del mundo, las refinerías estatales aumentaron la producción en mayo, ya que las ventas de combustible se recuperaron antes de que se levantara el confinamiento en junio.
En Japón, el cuarto mayor usuario de petróleo, se prevé que la demanda de gasolina se contraiga en un 10% entre octubre y diciembre, pero se producirá una notable recuperación respecto de la contracción del 27% observada entre abril y junio, según la refinadora Cosmo Energy Holdings.
En Estados Unidos —mayor productor y consumidor de petróleo del mundo— se espera que la demanda de combustible para carreteras aumente a 10,6 millones de barriles diarios en el segundo semestre, según Rystad Energy, un 22% más que en el primero.
Sin embargo, el consumo de gasolina seguirá siendo un 5% menor que en 2019 debido al aumento del desempleo, la caída de las rentas y el aumento del número de personas que trabajan desde casa, según Per Magnus Nysveen, analista de Rystad.
El incremento de viajes por carretera este verano podría dar a la demanda un impulso significativo a corto plazo, sin embargo, según Patrick De Haan, de la consultora estadounidense GasBuddy.
"Dependiendo de esta demanda de los consumidores, si más personas viajan, las refinerías están bien posicionadas y acudirán a satisfacer el aumento de la demanda, y eso puede ser un salvavidas para ellos este verano", añadió.
Aun así, algunas refinerías estadounidenses dudan si aumentar drásticamente la producción, y se muestran cautelosas con la demanda de gasolina mientras observan que los inventarios de destilados siguen creciendo.
Jason Gabelman, analista de refino de Cowen Research, prevé que pasarán dos años antes de que los márgenes de refino se recuperen, en paralelo a la recuperación de Estados Unidos tras el impacto de la pandemia y de las cuarentenas.
Ejecutivos del sector petrolero también se muestran precavidos ante posibles nuevos descensos de la demanda de petróleo, ya que los países han reducido drásticamente las previsiones de crecimiento económico y las poblaciones están alterando sus hábitos de viaje.
"Por ahora, no sabemos si la demanda de gasolina y combustible para aviones volverá a los niveles anteriores a la pandemia", dijo el presidente Tsutomu Sugimori en una conferencia el 20 de mayo, añadiendo que era difícil predecir cómo cambiaría el estilo de vida de los consumidores, analizó Reuters.
La gente puede preferir seguir trabajando desde casa y salir lo menos posible para evitar infectarse, añadió