La firma global Ashurst, con sede en Londres, presentó Powering Change: Energy in Transition ,un análisis sobre el mercado Latinoamericano en Energías Renovables. Una óptica que, no obstante, el momento sanitario por el cual atraviesa el mundo, no deja de ser optimista por más de un motivo en la generación de energía limpia, haciendo énfasis en la generación fotovoltaica y eólica.
Brasil, México y Argentina países sobre los cuales versa su opinión editorial en esta ocasión.
Una vez más, agradecemos al Ashurst el que comparta con los lectores de pv-magazine su propuesta editorial.
“Se espera que América del Sur sea una región de crecimiento líder para la inversión mundial en Energías Renovables en los próximos cinco años.
El informe recopila las opiniones de más de dos mil líderes empresariales de todos los países del G20 sobre el cambiante mercado mundial de la energía, ya que busca satisfacer la creciente demanda de energía y de manera simultánea impulsar la descarbonización.
El informe muestra que casi una quinta parte de las personas encuestadas esperan invertir en Energías Renovables, Transición Energética y tecnologías de descarbonización en la región en los próximos cinco años.
Mientras tanto, los inversionistas de los países más desarrollados ya realizan altas inversiones en la región.
Un 66 por ciento de los encuestados en Brasil dicen que están invirtiendo en energía eólica, solar o ambas; 64 por ciento en Argentina invirtiendo en energía eólica terrestre; y 64 por ciento en México invirtiendo en energía solar.
Se espera que las Energías Renovables de todo tipo atraigan nuevas inversiones en la región, incluidas fuentes nacientes en la zona como la energía eólica marina y la biomasa.
Los ejecutivos de Argentina, Brasil y México tienen planes también para invertir en energía eólica marina; alrededor del 81 por ciento de los encuestados en Argentina mencionaron que están comprometidos o considerarían hacerlo en los próximos cinco años, la cifra en Brasil es del 70 por ciento.
Además, el 75 por ciento de los encuestados en los tres países se han comprometido a invertir o considerarían hacerlo en almacenamiento de baterías durante los próximos cinco años.
El 84 por ciento de los encuestados de estos tres países dijeron que invertir en la Transición Energética es esencial para su crecimiento estratégico.
Los encuestados en la región también creen que la implementación de proyectos de Energía Renovable es una parte clave de la Transición Energética: 44 por ciento en México y 42 por ciento en Brasil, que ubican a ambos países en los cinco principales países del mundo.
Junto con Latinoamérica, las economías en crecimiento en el sudeste de Asia y el norte de África se consideran mercados clave de destino de inversiones donde se espera un crecimiento significativo en las Energías Renovables a medida que los inversores y desarrolladores buscan satisfacer la demanda energética de las naciones en rápida industrialización.
Antony Skinner, Codirector Global de Energía y Servicios Públicos de Ashurst: “Los efectos del Cambio Climático ya no se pueden ignorar. Abordar sus impactos se ha convertido en una prioridad para empresas, gobiernos e individuos por igual. A medida que tiene lugar la Transición Energética con un énfasis creciente en la tecnología más limpia y renovable, el abastecimiento de energía y su uso están bajo un escrutinio más riguroso que nunca”.
“Algunas partes tienen la ventaja de ser los primeros en moverse, mientras que otras están dando sus primeros pasos tentativos en su contribución a una economía neutral en carbono. Con el inicio de Covid-19 y la fuerte reducción en los precios del petróleo, esto es claramente un período volátil e incierto para todos los mercados, especialmente la energía.
Sin embargo, los fundamentos del mercado y las perspectivas para la transición de energía limpia probablemente se mantendrán en gran medida sin cambios a largo plazo”.
“Este informe destaca las oportunidades globales a medida que la transición se acelera, y los inversionistas y la sociedad colocan creciente presión sobre las empresas y los gobiernos para que tomen medidas más asertivas “.
Andrés Arnaldos, socio de proyectos enfocados en América en Ashurst: “Con sus largas costas y sol y viento confiables, América del Sur ofrece oportunidades significativas para inversionistas y desarrolladores de Energía Renovable para capitalizar los florecientes mecanismos de subsidio de la región y flujos de ingresos potencialmente lucrativos”.
“El crecimiento potencial de la biomasa argentina es un testimonio de la economía rural en expansión de la región y su fuerte base industrial, mientras que ESG es un motor para el crecimiento bajo en carbono en Brasil a pesar del gobierno del presidente Bolsonaro sobre Cambio Climático”.
Más allá de América del Sur, la tendencia al alza en la inversión baja en carbono es consistente a nivel mundial. En todo el G20, el 94 por ciento de los encuestados esperan que la inversión de su organización en la Transición Energética aumente en los próximos cinco años, con el aumento.
Río Negro
MATÍAS DEL POZZI
Al igual que en el resto de la actividad económica, no hay sector de la industria energética que no se haya visto afectada por el impacto de coronavirus. Paralelo a la crisis que atraviesa el sector petrolero, las energías renovables también sintieron el efecto del Aislamiento Obligatorio.
La Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) confirmó que, durante los próximos 6 meses, comenzará operar potencia de proyectos renovables de lo que estimó en abril.
A principios del mes pasado, Cammesa publicó el informe de Programación Estacional Provisoria en el que calculó que, entre el período de mayo y octubre, y según los contratos vigentes, iban a comenzar a operar 2124 MW exclusivamente de proyectos renovables. En ese momento, la entidad aclaró que no se había tenido en cuenta el impacto de la pandemia.
En este contexto, es que ahora la compañía publicó el informe de Programación Estacional Definitiva en el que aseguró que, si no hay nuevos contratiempos, el techo de potencia que debería comenzar a operar en ese período será de 1795 MW, unos 330 MW menos que en la estimación provisoria.
El informe de 62 páginas indica que de los 1795 MW, unos 234 MW pertenecen al Mercado a Término de Energías Renovables (MATER), es decir proyectos para abastecer clientes industriales. De esa potencia total, 1090 MW serán de proyectos eólicos, 611 MW de parques fotovoltaicos, 90 MW de plantas procesadoras de biocombustibles y los 4 MW restantes de desarrollos hidráulicos.
Uno de los proyectos que aportará a la media nacional está en Neuquén. Para este mes está proyectado que comience a operar el parque eólico Vientos Neuquinos I, ubicado a 49 kilómetros de Picún Leufú y a 38 kilómetros de Piedra del Águila. El parque aportará 100 MW cuando esté terminado, pero se estima que antes de que termine mayo sus molinos empiecen a generar aproxidamente 17,3 MW.
Además del aporte que harán las energías renovables en el período de 6 meses, Cammesa también calculó que se sumarán unos 844 MW de desarrollos termoeléctricos.
La cuenta total da 2638,5 MW los que deberían comenzar a operar en algún momento hasta octubre, pero no termina ahí. Si se cumplen los contratos y ninguna empresa solicita una prórroga, antes de que termine el año, el ingreso de nuevos proyectos podría elevar la cuenta hasta casi 3000 MW nuevos en el año.
Vale señalar, que las proyecciones realizadas por Cammesa se elaboran con la información que aportan los agentes del mercado mayorista y por terceros, por lo que la compañía asume que los datos suministrados son exactos, veraces y correctos.