LILIANA ALFARO
Recientemente fue el Día de la Minería, Aoma hizo una fuerte defensa de la actividad en el país en esta época de crisis. ¿Cuál fue el planteo?
-Aoma siempre se destacó por defender la actividad. Que quede claro que no lo hacemos defendiendo al sector empleador ni mucho menos sino defender nuestra actividad que es la que sabemos hacer. Somos trabajadores, hacemos todo a conciencia para defender la actividad que es la que nos da el trabajo todos los días, así que desde ese punto de vista hemos ido a todos lados a dar charlas, incluso en provincias que han estado o hasta el día de hoy está prohibida la actividad.
El ambientalismo está en contra de la actividad, en contra de todos pero nunca ha hecho opinión contraria con los trabajadores y ellos reconocen que cuando ha habido inconvenientes fueron los propios trabajadores los que lo han denunciado. Justamente hacer mal las cosas no lastima por ahí un proyecto sino toda la actividad. Tratamos de hacer las cosas de la mejor manera, por supuesto que siempre cuidando del medio ambiente porque también somos defensores del ambiente, no cabe ninguna duda.
¿Respecto a la minería en el país, cuál es la situación actual ya que algunas han empezado a reactivar la actividad con protocolos?
-A nosotros por supuesto que nos ha caído la generalidad a partir del 20 de marzo cuando se determinó la cuarentena, este Decreto de Necesidad y Urgencia del Ejecutivo automáticamente paró toda la actividad, y después fue decretada por una resolución administrativa, la 450 del 2 de abril, nuevamente la puesta en marcha por ser considerada esencial la actividad minera. Y a partir de los protocolos hay actividad en alrededor del 30% al 40% de lo que estábamos antes de este aislamiento. Estamos en un 40% en la actividad metalífera, y en la no metalífera bastante por debajo, en el orden del 10 al 15%.
Cuando hablo de metalífera estamos hablando de cales, piedra partida, roca de aplicación, las moliendas industriales, el cemento que están ligadas íntimamente a la industria de la construcción, y lamentablemente hoy la construcción pública como privada está parada.
¿En este parate en la economía, las empresas han estado sosteniendo el salario de los trabajadores?
-Sí, hasta abril inclusive, ahora es justo que le reconozcan que a partir de mayo, hemos establecido un acuerdo con la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (Caem) que aquellos que están trabajando, el 30 a 40%, cobra su salario en forma normal y habitual. Y aquellos que están en su casa van a cobrar el 70% del bruto de su salario, más o menos van a andar perdiendo un 12%. Pero repito, no existe una baja en el salario sino sencillamente es para quienes no van momentáneamente a los proyectos.
Acá tiene mucho que ver el tema de los protocolos por un lado y por otro, y es justo que reconozca en Jujuy que han sido y son bastante duros con los lineamientos que se ha planteado el Gobierno provincial, que hay muchos que no pueden transitar. Particularmente es por interprovinciales, las comunas, distritos que no se permite el tránsito de personas, entonces hay muchas personas que no pueden llegar. Trazo un paralelismo, tenemos más o menos 1.100 trabajadores jujeños que hoy están laburando en Santa Cruz, y la verdad que se les hace difícil llegar a la lejana provincia por la falta de movilidad y por otro lado las condiciones de seguridad.
¿Entonces la imposibilidad de transitar de los trabajadores también impacta en el funcionamiento de la actividad?
-No tenga ninguna duda, impacta, tenemos serios inconvenientes. Lo hemos tenido en alguna empresa de explotación de casi un siglo de vida como Mina Aguilar donde no podíamos llevar personas, profesionales en particular que venían de Salta o Tucumán porque pasar a Jujuy implicaba de manera automática estar 14 días en cuarentena. Entonces esto obligó a que la gente entrara a Jujuy y que estuviera 14 días controlado y en cuarentena, y recién poder subir al proyecto, y esto también motivó tener que estar bastante tiempo, más del aconsejable parado.
¿Más allá de todo este contexto, usted cree que en la minería está una de las claves para impulsar la economía del país?
-Primero tiene que quedar claro que uno es respetuoso de las medidas sanitarias que se toman porque entendemos que lo primero que se está pretendiendo es cuidar hasta la propia vida de la gente. Estamos muy a favor y hemos sido partícipes de los protocolos que se han hecho para la actividad. Y entendemos que la actividad minera puede ser uno de los factores de desarrollo, particularmente para el interior de nuestra Argentina.
Bienvenido sea esto para las comunidades, para los pueblos que están aledaños a los proyectos, y ojalá que les den mejor calidad de vida. Creemos que justamente a partir de las exportaciones también nos van a dar un respiro, si vale la expresión con dólares frescos para asumir los compromisos que tiene el país, así que defendemos indudablemente nuestra actividad.
¿Cómo ve lo que está pasando en este sentido para el sector?
-Ustedes lo viven en Jujuy. Lo que está pasando por ejemplo en el litio me parece que es sumamente importante.
Sin duda van a hacer divisas no sólo para la Argentina sino para la provincia, y siempre haciendo las cosas bien.
ADN Sur
(Fragmento del webinar de CAEM por el Día de la Minería) En la actualidad informó que para mantener las seguridades sanitarias tuvimos que disminuir el ritmo de la actividad. Y en el caso de las no metalíferas estamos en la misma situación, con el agravante de que vienen desacelerándose desde 2018. Tenemos sistemas de trabajo 7 por 7 que hemos transformado en 14 por 14 para cumplir con los tiempos de cuarentena. Esto nos permite cuidarnos y saber que los que bajan y suben del yacimiento estén a salvo”, y comentó que, entre otras medidas, los trabajadores no pueden compartir los cuartos, por lo que en un yacimiento con capacidad para 1.000 pueden trabajar actualmente 500 personas.
Por último en varias oportunidades pidió “por favor ayudar a la pequeña y mediana minería, que no dan más”, y agregó que la “actividad de la construcción está totalmente parada y es urgente incentivar la obra pública y privada”, para ver “de qué manera podemos sostener nuestro empleo y sostener a las empresas que, en muchos casos, tienen más de un siglo de vida y se tratan de pymes en muchos casos pymes familiares”.
Pensando en el futuro del sector, aseguró: “Todos vamos a tener que poner un granito de arena, todos nos vamos a tener que dar una mano”.