Brent subió 1.5%, a $ 31.42 y El WTI 1.1%, a $ 24.83.
El petróleo subió el miércoles por encima de los 31 dólares por barril, ya que las esperanzas de una recuperación de la demanda, a medida que algunos países alivian los bloqueos por coronavirus, compensaron un informe que muestra un aumento mayor de lo esperado en los inventarios de Estados Unidos.
El crudo Brent casi se ha duplicado desde que alcanzó el mínimo de 21 años alcanzado el 22 de abril, respaldado por las expectativas de recuperación de la demanda y por un corte récord en el suministro liderado por la OPEP del cártel petrolero.
Brent subió 45 centavos de dólar estadounidense, o 1.5%, a $ 31.42 por barril a las 8.30 a.m. GMT, habiendo subido en las últimas seis sesiones. El crudo West Texas Intermediate (WTI) agregó 27c, o 1.1%, a $ 24.83.
"Claramente, el optimismo de la reapertura de la economía global ha apoyado la recuperación del petróleo", dijo el analista de Avatrade, Naeem Aslam.
Pero en un recordatorio de que persiste un exceso de oferta, el American Petroleum Institute (API) dijo el martes que los inventarios de crudo de Estados Unidos aumentaron en 8.4 millones de barriles la semana pasada, más de lo que esperaban los analistas.
"Estamos hablando de la normalización de la oferta y la demanda, pero tenemos un largo camino por recorrer", dijo Lachlan Shaw, jefe de estrategia de materias primas del Banco Nacional de Australia.
Italia, España, Nigeria e India, así como algunos estados de EE. UU., Comenzaron a permitir que algunas personas volvieran a trabajar y abrieron sitios de construcción, parques y bibliotecas.
El gobierno federal de Alemania y 16 estados han acordado formas de aliviar el bloqueo.
La reducción de los bloqueos debería conducir a una recuperación de la demanda mundial de petróleo, que en abril se colapsaría en al menos un 20%, una caída sin precedentes, ya que los gobiernos le dijeron a la gente que se quedara en casa.
Para abordar el exceso resultante, la OPEP y sus aliados acordaron un recorte récord en la producción de petróleo de 9.7 millones de barriles por día, aproximadamente el 10% de la demanda previa al coronavirus. Esa reducción comenzó el 1 de mayo.
Por ahora, sin embargo, los inventarios en alza son un recordatorio del exceso de oferta persistente en el mercado.
Los operadores buscarán la confirmación del informe de inventario de la API cuando las cifras oficiales del gobierno de EE. UU. Salgan más tarde el miércoles.
Finanzas
Las caídas históricas del precio del petróleo dejan una víctima clara: el sector energético. Estas compañías han sido las más perjudicadas por el hundimiento de la demanda y exceso de oferta derivado del Covid-19 en los últimos meses. Y así lo reflejan las cifras.
Aunque esta crisis parece que ya ve la luz al final del túnel, las estimaciones de Morgan Stanley auguran caídas cercanas al 60% en la mayoría de las petroleras mundiales.
La más perjudicada por este desplome es la industria del esquisto americano. Las empresas de fracking están en el punto de mira por la pérdida que sufren con un barril del petróleo que se sitúe por debajo de la franja de 50 y 70 dólares.
El alto endeudamiento que poseen estas compañías ha generado fuertes descensos en sus cotizaciones, llegando a desplomarse más del 50%, como es el caso de Chevron o Whiting Petroleum, que se declaró en bancarrota por el alto endeudamiento.
Ante esta situación, la administración Trump creó un fondo para apoyar al sector petrolero y del gas de Estados Unidos. "Este movimiento se ha generado debido al fuerte grupo de presión que tiene la industria del esquisto detrás”, apuntan los analistas de IG en un encuentro informativo online sobre la situación actual del crudo.
“El año pasado los beneficios de Whiting fueron de aproximadamente 1,6 millones de dólares, pero su deuda neta doblaba esta cantidad. Por tanto, con unos precios tan bajos y una caída de la demanda se ha visto obligada a declararse en bancarrota para hacer un proceso de reestructuración”, señala Diego Morín, analista del bróker.
Entre las más afectadas ante la crisis del petróleo también destacan empresas estadounidenses como Chevron, cuyo descenso desde finales de febrero es del 49%, y Exxon, que se ha desplomado también entre un 40% y un 50%.
En Europa, Gazprom lidera las pérdidas con caídas del 59%, le sigue British Petrolum, tras descender en torno a un 53% y, completando el pódium, la española Repsol, que bajó aproximadamente el 52%.
La empresa que dirige Josu Jon Imaz perdió 487 millones de euros en el primer trimestre del año, frente a los 608 millones que ganó en el mismo periodo del ejercicio anterior. Esta petrolera sufrió la depreciación de sus inventarios en 790 millones por el descenso de los precios del crudo.
No obstante, los expertos aseguran que no hay que tener en cuenta esta presentación de resultados. “La entrada en pérdidas es normal, tenemos que fijarnos en el segundo o incluso en el tercer trimestre para ver sus cuentas en base al funcionamiento de la economía”, indicó Morín.
A pesar de esta situación, la empresa española quiso premiar a los accionistas con su condición de mantener el dividendo pese a la obligación de recortar proyectos. Sin embargo, las estimaciones de los bancos de inversión sobre la petrolera española no son nada alentadores, insisten los expertos de IG, con unos recortes de entre el 30 y 40% de media.
En otros países destaca Pemex, una empresa estatal mexicana con un alto endeudamiento. La semana pasada esta compañía declaró que su deuda ascendía hasta los 24.000 millones de dólares. “Estados Unidos llevará a cabo ciertos procedimientos de rescate en esta empresa dentro de su plan de reflotar la industria del esquisto”, apunta Morín.
Por último, la canadiense Suncor Energy también sufrió descensos en torno al 67%.
Estas empresas viven ahora un repunte. La volatilidad en el mercado del petróleo sigue siendo alta, pero los operadores se muestran más optimistas.
En primer lugar, porque “grandes inversores como Arabia Saudí o fondos americanos inyectaron buenas compras y paquetes conforme se iban apoyando en la zona de los 10 dólares, lo que dio un poco de aire a este tipo de compañía”, explica Morín.
Por otro lado, esta semana se reúne la OPEP y grandes bancos de inversión como Goldman Sachs o JP Morgan especulan con una nueva reducción en la producción de barriles diarios en torno a 15-20 millones.
Para los expertos este recorte es necesario. Con el almacenamiento terrestre lleno, las petroleras han visto las plataformas marítimas como una solución para guardar el crudo. “Esto conlleva mas endeudamiento de las empresas, tenerlo en tierra conlleva un coste, pero tenerlo en alta mar multiplica este coste por tres”, advierte Morín.
Por otra parte, sectores como el turístico y aéreo seguirán sufriendo a lo largo del 2020 ya que la apertura y consumo total no será como antes de la llegada del coronavirus.
“IAG ha pagado los platos rotos de la llegada del virus y sus acciones se han desplomado más de un 50%, solicitando un préstamo para obtener liquidez a corto plazo”, aseveran los expertos de IG Markets. “Por tanto, tendremos que esperar al tercer trimestre para ver el comportamiento que pueda tener este holding”, añaden.
Finalmente, los precios continuarán teniendo una fuerte fluctuación y el posicionamiento en el sector comenzaría a producirse después del segundo semestre. “Ahora mismo tomar posiciones es algo precipitado”, recalcan.
En España, las energías renovables son las más beneficiadas en esta crisis, a excepción de las farmacéuticas, cuyo auge es pasajero, según Morín. “Hay un gran movimiento inversor especulativo en ese sector”, afirma.
Desde finales de febrero, Solaria ha crecido un 3% aproximadamente y los expertos señalan como posible objetivo los 10,20 euros por acción. Además de la firma que dirige Enrique Díaz-Tejeiro, los analistas también apuntan a Iberdrola, Solarpack y Audax como las más favorecidas y de las que el mercado espera mejores resultados.