DINO GRANDONI Y PAULINA FIROZI
Con los números ahora sabemos cuán gravemente fueron golpeados los principales perforadores de petróleo del país por la recesión alimentada por el coronavirus.
Tres de los cuatro mayores productores de petróleo y gas de EE.UU. Registraron pérdidas multimillonarias a miles de millones de dólares en sus últimos informes de ganancias, una señal de cuán perjudicial ha sido la caída de la demanda de energía debido a la pandemia del covid-19 para el negocio petrolero nacional.
ConocoPhillips, el tercer mayor perforador de petróleo de EE.UU. Por capitalización de mercado, anunció a fines de la semana pasada que perdió 1.700 millones de dólares durante los primeros tres meses del año. Phillips 66, el cuarto más grande, reportó una pérdida en el primer trimestre de $ 2.5 mil millones.
Y ExxonMobil, durante mucho tiempo la principal compañía energética del país, perdió $ 610 millones durante los primeros tres meses de 2020, cuando el petróleo perdió globalmente dos tercios de su valor. Es la primera vez que la compañía registra una pérdida trimestral en las últimas tres décadas .
“Ciertamente hemos capeado los altibajos de muchos ciclos de precios,” su CEO Darren Woods, dijo durante un ingresos llaman viernes. "Sin embargo, debo decir que nunca hemos visto algo como lo que el mundo está experimentando hoy".
Las compañías tratarán de mantener sus resultados finales recortando la producción en la cuenca del Pérmico. La histórica región rica en petróleo se extiende por el oeste de Texas y el sureste de Nuevo México, y experimentó un aumento en la producción con el advenimiento de la tecnología de fracturación hidráulica.
Pero ahora, con la caída del precio del petróleo que hace que el crudo Pérmico sea demasiado caro para salir del suelo, ese auge se está convirtiendo rápidamente en una quiebra.
Exxon dijo que espera reducir las plataformas Permian en un 75 por ciento y terminar el año con solo unas 15 plataformas. En total, la compañía está reduciendo su gasto de capital para 2020 en un 30 por ciento.
Chevron, la compañía petrolera número 2 del país, dijo que espera recortar 125,000 barriles por día de su objetivo de producción original para el Pérmico para fines de año. Comenzó el año con 17 plataformas en el Pérmico, pero ahora solo tiene cinco.
La compañía estaba sola entre los cuatro principales para obtener ganancias en el primer trimestre, ganando $ 3.6 mil millones en parte de la fortaleza de su división de refinación. "Nuestro primer trimestre fue un trimestre sólido, y creo que los resultados reflejan eso", dijo el CEO de Chevron, Mike Wirth , en Bloomberg TV.
Pero advirtió: "El segundo trimestre es un poco más difícil".
Y ConocoPhillips dijo que espera reducir la producción no solo en el Pérmico, sino en toda América del Norte en aproximadamente 460,000 barriles por día para junio.
En general, la producción de las principales petroleras estadounidenses y europeas disminuirá en casi un 11 por ciento el próximo trimestre, según un análisis de Reuters . Las grandes empresas europeas BP y la holandesa Royal Shell vieron ganancias disminuidas para comenzar 2020 también, y Shell redujo sus dividendos a los accionistas por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial.
Un puñado de compañías petroleras más pequeñas, incluidas Whiting Petroleum y Diamond Offshore , ya se han declarado en bancarrota.
Sin embargo, más empresas de nivel medio, muy endeudadas para expandir la producción de esquisto cuando los precios del petróleo eran altos, corren el riesgo de necesitar protección del Capítulo 11 si el precio del petróleo sigue siendo bajo.
La Reserva Federal se está preparando para lanzar un salvavidas a las empresas en dificultades en el sector energético y en otros lugares. Pero el Instituto Americano del Petróleo, que representa a las principales compañías petroleras en Washington, ha enfatizado que no quiere ayuda especial para la industria petrolera.
Algunos analistas de la industria dicen que las compañías petroleras más grandes apuntan en última instancia a engullir los activos de las empresas más pequeñas que se desploman.
"En última instancia, lo que va a suceder", dijo Boris Schlossberg, director gerente de BK Asset Management, el mes pasado , "va a tener una consolidación masiva; van a poder comprar activos increíblemente baratos".
