La crisis de 2008 arrastró a la industria petrolera y en la zona hubo 3000 petroleros en procedimiento de crisis.
VICTORIA TERZAGHI
El titular de Petroleros Privados aseguró que la actual crisis “va a ser más fuerte que la de 2008” cuando hubo 3000 trabajadores con salarios suspendidos. Contó que ya evalúan la situación con las empresas y advirtió que “esto no se resuelve con paros o cortes de rutas sino entre todos”.
Los efectos de la pandemia del coronavirus Covid-19 no sólo se ven en la salud, sino también en la economía. Y la industria petrolera es una de las que primero fue golpeada. Es por esto que el secretario general del sindicato de Petroleros Privados, Guillermo Pereyra, advirtió que ya están en diálogo con las cámaras empresarias y señaló que una alternativa que analiza es que las empresas apliquen procedimientos de crisis y dejen sin salario pero sin despedir a miles de trabajadores.
La petrolera comenzó a retirar al personal de los yacimientos.
La medida no es inédita. En 2008 la crisis internacional desatada por el colpaso hipotecario de Estados Unidos arrastró a la industria petrolera y en la zona hubo 3000 petroleros en procedimiento de crisis.
“Tenían los sueldos suspendidos pero se acordó que recibieron sumas no remunerativas desde el gremio y se mantuvo la obra social y, algunos arreglaron y se fueron, pero la mayoría después volvió a su trabajo con su sueldo”, recordó Pereyra.
Un esquema similar es lo que avizora el dirigente en el corto plazo. Pero con una advertencia a sus afiliados: la actual crisis “es mucho más fuerte”.
Pereyra explicó que la gran preocupación en este momento son los trabajadores de las pequeñas y medianas empresas. “Están paradas y van a poder pagar los sueldos de este mes pero va a estar muy difícil para los sueldos del mes que viene”, indicó y alertó que “son el 60% de los afiliados”, es decir unas 15.000 personas sólo en Río Negro, Neuquén y La Pampa.
Actualmente la industria petrolera muestra una imagen impactante: no se están perforando nuevos pozos, los equipos –salvo de mantenimiento de pozos- están parados y el consumo de combustibles cayó más del 70% por el efecto de la cuarentena.
Tal como publicó Energía On hoy, en el país sobran por día más de 200.000 barriles de petróleo. Una situación por la que Pereyra advirtió que “YPF dejó de comprarle la producción a productoras como Chevron o Vista porque ellos mismos tienen excedentes”.
La opción ante estos sobrantes es exportarlo, pero los precios internacionales están por debajo del costo de producción.
Con un negro y prolongado panorama por delante, Pereyra advirtió que “las cámaras (empresarias) ya están llamando”. Y destacó que “las productoras van a tener que intervenir y apoyar a las pequeñas empresas porque sino la situación se va a complicar”.
En ese sentido, explicó que le solicitó a la federación que agrupa a las cámaras que “paguen los salarios del mes como puedan, y luego veamos cómo sostener todos el ingreso de los trabajadores para atravesar la tormenta”.
Pereyra aseguró que “la situación está terrible y todavía falta” y remarcó que “comienza un nuevo mundo y cómo nos vamos a adaptar acá no es cuestión de hacer paros y cortar rutas, sino apoyándonos entre todos”.