Sin embargo, es probable que la pandemia de coronavirus y la caída de los precios del petróleo —aunque negativa para todos los vendedores de gas en todo el mundo— afecten más a los exportadores de GNL de lo que perjudicaría a Gazprom, argumenta el analista de energía ruso Alexander Sobko en un artículo en la agencia de noticias estatal rusa RIA Novosti .

El "colapso del precio del petróleo no arrastrará el gas ruso hacia abajo", argumenta Sobko, diciendo que la mayoría de los contratos de GNL a largo plazo, especialmente los más antiguos, están indexados a los precios del petróleo, en comparación con el 32 por ciento de los contratos a largo plazo de Gazprom que están vinculados a los precios del petróleo.  

La caída de los precios del petróleo reducirá los ingresos y las ganancias de los exportadores de GNL cuyos contratos están indexados al precio del petróleo. Es probable que el exceso de GNL en medio de una demanda deprimida y una desaceleración económica (y una recesión absoluta en muchos mercados maduros) mantenga los precios spot del GNL más bajos por más tiempo, reduciendo las ganancias de los productores de GNL y potencialmente obligándolos a diferir las decisiones finales de inversión en la nueva licuefacción y exportación de GNL proyectosAl mismo tiempo, los bajos precios del gas natural en Europa también están perjudicando los ingresos por ventas de Gazprom, y el dolor podría empeorar en los próximos meses, ya que la demanda europea probablemente caerá por un precipicio con las principales economías bajo bloqueo y la actividad industrial significativamente más baja. 

La guerra del gas entre Estados Unidos y Rusia en Europa

Estados Unidos alentó firmemente "las moléculas de libertad de Estados Unidos a ser exportadas al mundo", con los exportadores de GNL de Estados Unidos vendiendo volúmenes crecientes de combustible súper refrigerado a un número creciente de compradores en Europa que están dispuestos a reducir su dependencia del gasoducto ruso.

Rusia fue el mayor proveedor de gas natural a la Unión Europea (UE), tanto en 2018 como en el primer semestre de 2019, por delante de Noruega, según muestran los datos de la UE .

Pero la proporción de proveedores que no sean Rusia, Noruega, Argelia, Qatar y Nigeria aumentó del 4,8 por ciento en 2018 al 8,8 por ciento en el primer semestre de 2019, a expensas de las cuotas de mercado de Noruega y Rusia, según las estimaciones de Eurostat.

Elena Burmistrova, directora general de Gazprom Export, dijo en el día de los inversores de Gazprom el mes pasado que la participación de la compañía en el consumo de gas de Europa y Turquía fue del 35,6 por ciento en 2019.

En la Conferencia Europea del Gas en Viena en enero, Burmistrova admitió que los volúmenes de exportación de Gazprom a Europa cayeron en 2019 en comparación con 2018, pero minimizó la "disminución de menos del 1.5 por ciento de los volúmenes récord de 2018". Argumentó que el GNL tenía un inconveniente principal, y era su incapacidad para satisfacer rápidamente la demanda en los períodos pico de consumo. El gasoducto de Gazprom garantiza la estabilidad y la fiabilidad de los suministros a Europa, argumenta el gigante ruso.

Sin embargo, algunos clientes europeos buscan liberarse de la estabilidad y la fiabilidad rusas, que a menudo conllevan un precio político.

Este es el argumento de venta clave de las ventas de GNL de Estados Unidos a Europa: el "gas de la libertad" puede ayudar a los países europeos a diversificar sus importaciones de gas.

Y luego el cisne negro confundió el mercado

Una tormenta perfecta de clima templado invernal y el nuevo suministro de GNL de los EE. UU. Y Australia llevaron a un exceso de GNL global y a la caída de los precios spot del GNL a fines del año pasado. En marzo de 2020, el almacenamiento de gas europeo está más lleno de lo normal para esta época del año, y es probable que Europa no pueda absorber los volúmenes de GNL que Asia no recogerá ya que su crecimiento de la demanda se está desacelerando.

Como si esta situación no fuera lo suficientemente mala para los vendedores de GNL y los proyectos de GNL programados para su aprobación, la pandemia de coronavirus propagó otro contagio en los mercados de gas: la demanda en China se desaceleró significativamente y la demanda en Europa también se está viendo afectada.

Italia, el país más afectado por la pandemia, aparte de China, ha visto caer su demanda de energía después de que se cerró la semana pasada, dijo el jueves Peter Osbaldstone, Director de Investigación, Europe Power and Renewables en Wood Mackenzie. La generación de energía cayó un 8,8 por ciento en la primera semana de la cuarentena en todo el país en comparación con la semana anterior, con la producción a gas, que representa más del 40 por ciento del suministro total en el mercado, un 5 por ciento, según WoodMac.

“Se esperan nuevas reducciones de la demanda en toda Europa a medida que los bloqueos se generalicen. La demanda industrial y comercial será particularmente débil a medida que la actividad económica se desacelere ”, dijo Osbaldstone.

Ganadores y perdedores

Las importaciones de GNL a Europa pueden verse muy afectadas, pero Gazprom puede no estar tan aislado de la situación actual en los mercados de petróleo y gas como Rusia quiere implicar.

Los ingresos de Gazprom por las exportaciones de gas en enero de 2020 se derrumbaron en un 41,1 por ciento en comparación con enero de 2019 debido al clima más cálido y los altos inventarios que los países habían acumulado en caso de que Rusia y Ucrania no hubieran logrado un acuerdo de tránsito a fines de 2019, informó el último diario de negocios ruso Vedomosti. semana, citando datos del Servicio Federal de Aduanas de Rusia. En enero y febrero, se espera que las exportaciones de Gazprom hayan caído entre un 20 y un 25 por ciento, dijo a Vedomosti Sergei Kapitonov, analista de gas natural en el Centro de Energía Skolkovo en Moscú.

Con los precios del gas en Europa ahora por debajo de $ 3 por millón de unidades térmicas británicas (MMBtu) antes del final del invierno, la pregunta es quién parpadeará primero, escribió Mike Fulwood en un comentario del Instituto de Estudios de Energía de Oxford este mes. Con precios tan bajos, algo tiene que ceder: podría ser que los precios caigan aún más a los bajos $ 2 por MMBtu, o que Noruega reduzca la producción en el verano, o que Rusia frene las exportaciones, especialmente si el netback de Gazprom por MMBtu es menor que el de su Las ventas nacionales, o la capacidad de GNL, podrían cerrarse en cantidades significativas, dice Fulwood.    

No habrá un claro ganador en esta guerra por la cuota de mercado del gas en Europa: las importaciones de GNL a Europa disminuirán, pero las exportaciones e ingresos de Gazprom también lo harán, y también lo harán los ingresos para el estado ruso.