Los precios del petróleo vuelven a las caídas. El oro negro se deja más de un 3% de media después de que Arabia Saudí acompañe su órdago con una amenaza muy clara: ha pedido a Saudi Aramco, la petrolera estatal, que eleve su producción de barriles de esquisto. Así, el país calienta aún más la guerra abierta de precios con Rusia y la OPEP de por medio.
El barril del crudo Brent empezó la jornada con tendencia a la baja y cotizaba esta mañana con una caída del 2,4 % hasta situarse en 36,82 dólares, días después del desplome de los precios por la guerra de precios iniciada por Arabia Saudí.
El crudo del mar del Norte, de referencia en Europa, había cerrado el martes en el International Exchange Futures de Londres a 37,73 dólares, un repunte frente al desplome del lunes, cuando llegó a retroceder un 30 %, con fuerte impacto en los mercados globales.
Según apunta la CNBC citando palabras del CEO de Aramco, el propio Ministro de Energía del país ha reclamado a la petrolera que aumente su capacidad hasta los 13 millones de barriles diarios desde los 12 millones actuales.
Los saudíes vienen de producir una media de 9,7 millones de barriles diarios en los últimos meses pero dispone de una mayor capacidad para almacenar aún más barriles si fuera necesario. Los precios del crudo rebotaron el martes tras su desplome del 25% vivido el pasado lunes.
Más allá de la guerra de precios entre dos de las mayores productoras de esquisto del mundo, el coronavirus sigue siendo un quebradero de cabeza para los mercados, incluido el de materias primas. Al fin y al cabo, el brote hace más real que nunca la posibilidad de una desaceleración económica global, algo especialmente temible para el petróleo.
"El coronavirus seguirá con su expansión entre las mayores economías del mundo como EEUU y seguirá afectando a su demanda de crudo," auguran los expertos de IHS Markit. "No nos sorprendería ver al Brent cotizando en los niveles de los 30 dólares por barril, e incluso aún más bajo", apostillan
Oil Price
TSVETANA PARASKOVA
Las reservas de petróleo han sufrido mucho en la última media década.
Primero fue la caída del precio del petróleo en 2014. Justo cuando la industria petrolera surgió del colapso, los temas de transición energética y demanda máxima de petróleo comenzaron a pesar sobre las acciones de Big Oil y otras compañías de energía. Luego vinieron las crecientes llamadas de inversionistas y accionistas de que la industria petrolera se responsabiliza de las emisiones de gases de efecto invernadero, deprimiendo aún más las reservas de petróleo y haciendo que el sector sea tan impopular como lo fue Big Tobacco.
Luego vino el colapso del precio del petróleo de 2020 , cuando Arabia Saudita y Rusia terminaron abruptamente el viernes su asociación de tres años para tratar de fijar los precios del petróleo, o como dijeron, 'traer de vuelta la estabilidad al mercado'.
Una guerra total de precios del petróleo está de nuevo en marcha, y las reservas de petróleo están listas para un peor dolor en el futuro.
Primero, las acciones de las empresas petroleras suelen seguir los movimientos del precio del petróleo. Incluso antes de que Rusia y los sauditas rompieran su bromance del petróleo, los precios del petróleo y las existencias de petróleo se vieron afectados por una demanda deprimida en medio del brote de coronavirus y los temores de una desaceleración significativa de las economías. El sector energético ha sido el sector de peor desempeño del índice S&P 500 este año.
Y si el final de la coalición de la OPEP + el viernes es una indicación de lo que está por venir para las reservas de petróleo, se enfrentarán a algunas semanas y meses muy feos.
A medida que los precios del petróleo colapsaron un 10 por ciento el viernes, el fondo cotizado en bolsa (ETF) SPDR S&P Exploration Oil & Gas Exploration también cayó un 10 por ciento a un mínimo histórico . El fondo Energy Select Sector SPDR XLE cayó un 5,6 por ciento el viernes y ha bajado un 29 por ciento masivo desde el comienzo del año.
En el índice S&P 500 del viernes, los 15 peores resultados incluyeron 14 acciones de energía , incluidas Occidental, Apache Corp, Pioneer Natural Resources, EOG Resources, Devon Energy y Halliburton, según los datos del mercado compilados por MarketWatch. En el Dow 30, ExxonMobil bajó un 4,8 por ciento y fue el segundo peor desempeño.
A medida que Arabia Saudita comenzó la guerra de los precios del petróleo, los precios del petróleo colapsaron en un 30 por ciento el lunes temprano, con el WTI Crude cayendo a tan solo $ 28 por barril, lo que indica dolor para las reservas de petróleo y para muchos productores de petróleo de EE. UU. deuda elevada, flujos de caja negativos y sin acceso a capital.
Hace casi un mes, cuando la principal preocupación en el mercado petrolero era el brote de coronavirus, Moody's advirtió que las empresas norteamericanas de exploración y producción enfrentarán altos vencimientos de deuda y un mayor acceso al capital en los próximos años, con una deuda acumulada de US $ 86 mil millones vencida entre 2020 y 2024. Dado que la mayor parte de la deuda está en manos de compañías de grado especulativo, esto implica "un nivel elevado de riesgo de incumplimiento para la industria", dijo Moody's el 19 de febrero.
El 9 de marzo, los precios del crudo WTI se habían desplomado a menos de $ 30 por barril. Los productores estadounidenses tendrán un valor mucho menor de sus recursos de petróleo y gas contra los cuales podrían pedir prestado más dinero.
“Un episodio sostenido de bajos precios del petróleo reducirá aún más el flujo de caja y la inversión en el parche petrolero de los EE. UU., Lo que causará más golpes para reducir el crecimiento de la producción a fines de este año. Las reducciones en el gasto de al menos seis a nueve meses conducen a una menor producción de petróleo en los 48 Estados Unidos más bajos ", dijo el viernes Ann-Louise Hittle, vicepresidenta de Macro Oils, en Wood Mackenzie .
"En ese momento, su acceso al capital puede ser limitado y su flujo de caja libre puede verse gravemente afectado", dijo Hittle.
Las mayores empresas petroleras tampoco se librarán. Exxon acaba de decir que mantendría las inversiones en hasta US $ 35 mil millones por año, a pesar de los precios del petróleo que ya caen debido al brote de coronavirus y sus implicaciones económicas.
Exxon está evaluando el ritmo de actividad en su área de crecimiento clave, el Pérmico, en respuesta a las condiciones del mercado, dijo el jueves. Después del viernes, tiene que reevaluar la evaluación en vista del colapso del precio del 30%. Si incluso la actividad Pérmica de Exxon sufrirá en los próximos meses, imagine la carnicería entre los 'chicos más pequeños' en el parche de esquisto de EE. UU.
Las empresas petroleras y las reservas de petróleo están sufriendo un severo dolor en esta última caída del precio del petróleo, mientras que Big Oil lucha por convencer a los inversores y a la sociedad de que aún podría ser parte de la solución, no del problema, en la transición energética.
La Tercera
MAXIMILIANO VILLENA
Tras el desplome de ayer, los mercados parecen recuperarse, y el petróleo se acoplaba a la tendencia, con el WTI trepando 10,4%. Sin embargo, la guerra de precios entre la OPEP y Rusia mantiene al mundo en alerta.
En este escenario, Mark Lacey, Head of Commodities de Schroders, señaló en un reciente informe que la rebaja en los precios, de entre US$7-US$8 por barril en Europa y EEUU, y entre US$4-US$6 en Asia, representa la mayor rebaja en precios desde por lo menos el año 2004.
Pero, además, el incremento en hasta 800.000 barriles por día por parte de Arabia Saudita podría inundar el mercado, lo que “podría costarle al país un estimado de US$120 billones, debido a que el precio actual no es rentable”.
En esa línea, el analista sostiene que “los valores actuales de petróleo se ubican significativamente por abajo de los break-evens para todos los productores de la OPEP”.
“Si es que los valores del petróleo promediaran US$35 por barril por el resto del 2020, el flujo de caja de todo el año para las empresas de petróleo integradas se vería reducido entre un 50 y un 60%. Los dividendos para estas empresas integradas no se alcanzan a cubrir si es que el barril está a un valor de US$35. A pesar que no se presagia que los dividendos serán recortados en el corto plazo, sí hay certeza que estos recortes acontecerán si es que el precio del crudo no se recupera. Ninguna parte de la industria del petróleo funciona con un valor de US$30 el barril”, apunta Lacey.
Sin embargo, el experto de Schroders apunta que para los próximos años, se podría estar generando un nuevo escenario con menor capacidad de producción de parte de otros competidores.
A su juicio, las compañías de petróleo que cotizan en bolsa y que operan en este ambiente se encuentran ante la mayor fragilidad de los últimos 20 años. “Si miramos el período 2021-2025 podremos decir que el mercado del petróleo se encontrará con un bajo abastecimiento y necesitamos que la OPEC incremente la producción más allá de su capacidad actual disponible”, sostiene.
Esto, porque “mientras mayor es el tiempo en que los precios actuales del petróleo se mantengan, un mayor suministro será removido de la industria. Lo anterior prepara al mercado para un período de contracción significante y de un aumento en los precios, cuando finalmente se entre en un período de demanda estable y de reabastecimiento. Para esta estabilidad, requerimos que el Coronavirus (COVID-19) se disipe, se retome la actividad industrial y que las industrias se desabastezcan. En el muy corto plazo es muy complejo percibir que esto ocurra, pero si vamos más allá, el riesgo en el alza de los precios del petróleo es muy significativo”.
La Tercera
La agencia de calificación S&P Global recortó este martes su estimación promedio para el precio del crudo Brent en el año a US$40 por barril y advirtió que algunas compañías de gas y petróleo con evaluación en terreno especulativo podrían enfrentar recortes de varios escalones a sus notas crediticias.
S&P esperaba previamente que el Brent promediara US$60 este año. También redujo su estimación para el próximo año a US$50 desde US$55 y su proyección para el precio del gas Henry Hub para este año a US$2 por millón de unidades térmicas británicas (BTU) desde US$2,25.
"Es posible que los cambios de calificación (para las compañías productoras de gas y petróleo) en la categoría de grado de inversión sean más severas que durante el ciclo anterior", dijo S&P, agregando que revisaría todas las notas de las firmas de exploración, producción y servicios de campos petroleros en las próximas semanas.
“En el segmento de alto rendimiento, en especial, los emisores sin coberturas, aquellos que enfrentan vencimientos próximos y están algo presionados por líneas de crédito renovables con base en préstamos probablemente enfrentarán múltiples rebajas de calificación”, agregó.
Más temprano Barclays también rebajó sus estimaciones para los precios del crudo en 2020, citando el fracaso de la OPEP a la hora de convencer a sus aliados, incluida Rusia, de reducir más la producción, lo que llevó a Arabia Saudita a decir que aumentaría su bombeo en abril a pesar de la débil demanda global.
El banco recortó su pronóstico para los precios del Brent en 2020 a US$43 por barril y para los del West Texas Intermediate (WTI) a US$40 dólares. El banco había bajado previamente sus estimaciones para los precios del Brent a US$59 por barril este año y para los del WTI a US$54.
"Los mercados del petróleo enfrentan el momento de la verdad, debido a que el desacuerdo entre miembros clave de la OPEP+ significa que los suministros probablemente abrumarán el equilibrio del mercado en el corto plazo en medio de una enorme destrucción de la demanda por las medidas para contener al virus", escribieron analistas de Barclays en una nota.
Los precios del crudo sufrieron su mayor caída diaria desde 1991 luego de que Arabia Saudita y Rusia iniciaron su guerra de precios, a pesar de que la rápida propagación del coronavirus frenará el crecimiento de la demanda global.
Los precios subieron este martes, pero los inversionistas ven pocas probabilidades de una rápida recuperación debido a que el virus ha golpeado la demanda.
Después de que el acuerdo de la OPEP se desmoronó, varios bancos también redujeron sus pronósticos de precios para este año porque estiman que la oferta abrumará a los mercados petroleros globales.
La rebaja en la previsión de Barclays se suma a la de Goldman Sachs que ayer pronosticó que la guerra de precios entre la OPEP y Rusia podría arrastrar el crudo Brent hasta los US$20 el barril, poniendo a prueba los niveles a los que algunos productores pueden operar.