Acciones en Wall Street caen hasta 18% y el riesgo país supera los 2770 puntos
Las acciones argentinas que cotizan en Nueva York se plegaron a las caídas de los mercados de todo el mundo, en la medida en que los inversores se deshicieron de posturas en renta variable para pasar a activos de refugio, como los bonos del Tesoro de los EEUU. Como el desplome global se inició con la caída del petróleo, en medio de desacuerdos entre países productores, la acción de YPF se destacó entre sus pares por el tamaño de sus pérdidas, que tocaron una caída de 28%, a USD 5,26, todo en un contexto de extrema volatilidad y cambios bruscos de las cotizaciones de los papeles.
La petrolera de mayoría estatal se vio afectada particularmente por el colapso de los mercados, que tras semanas de malos números por el avance del coronavirus Covid-19 ahora se ven golpeados por la guerra de precios que se desató en el seno de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), cuando un desacuerdo entre Rusia y Arabia Saudita llevó a esta última a anunciar que no reduciría su producción e, incluso, que podría aumentarla.
El precio del West Texas Intermediate, la variedad de crudo en los EEUU, restó 24,6%, a USD 31,13 el barril para los contratos con entrega en abril, su valor más bajo desde 2016, y el Brent (variedad del Mar del Norte) sufrió una caída de 24,1%, lo que pone en duda la factibilidad de explotar los yacimientos de Vaca Muerta. La extracción de petróleo no convencional requiere de costos más altos, con lo cual solo es rentable cuando el crudo está en niveles altos.
En pesos, el papel de YPF perdíió 24% en Buenos Aires, pero no estuvo sola. Todos los papeles de empresas argentinas estuvieron en rojo. Las acciones de Grupo Financiero Galicia y de Banco Macro restaron 16 por ciento.
“Ante la aversión al riesgo global, los activos domésticos no tienen posibilidad de desacoplarse y así es que también sufren importantes castigos, ya que deben sumar la elevada incertidumbre que despierta la reestructuración, potenciada en un escenario donde los inversores externos están focalizados en minimizar riesgos”, comentó Gustavo Ber, economista de Estudio Ber.
En cuanto a los bonos soberanos, la referencia de los principales títulos en dólares marcó un descenso promedio del 7%, acorde con la escalada del índice de Riesgo País, próximo a los 2.800 puntos básicos.
En medio de tanta adversidad externa, el Gobierno del presidente Alberto Fernández busca avanzar en una millonaria reestructuración de deuda soberana por más de 100.000 millones de dólares.
Bank of America, uno de los agentes colocadores para el proceso de reestructuración de deuda que el país, aspira a concluir a fin de marzo bajó la previsión del precio de la acción de YPF de USD 14 a 1 dólar. Sucedió en medio de la caída de los mercados internacionales por la caída del precio del petróleo y los temores por la diseminación del coronavirus que llevó a los inversores a refugiarse en bonos del Tesoro de Estados Unidos y en otros instrumentos como el oro.
En ese contexto, las acciones de la petrolera estatal YPF acusaron una notoria baja de 28% en dólares y 24% en pesos, para tocar nuevas marcas mínimas desde que salió a cotizar en 1993. El ADR de YPF cerró en 5,26 dólares, lo que posiciona a la valuación bursátil de la compañía en apenas USD 2.069 millones, la tercera parte de lo que el Gobierno argentino se comprometió en 2014 a pagarle a la española Repsol por el 51% de las acciones.
Hay que tener en cuenta el duro traspié acusaron las valuaciones bursátiles este lunes, mientras se extendieron los alcances del coronavirus, a lo que se añadió el desplome de 24% en los precios del petróleo fue el mayor en casi tres décadas, desde la Guerra del Golfo en 1991.
“Con una perspectiva del precio del petróleo más desafiada y los posibles efectos económicos del coronavirus, esperamos más presión sobre las ganancias y hemos reducido las estimaciones / PO para Petrobras, Ecopetrol, Tenaris e YPF”, señaló el área de research de la entidad norteamericana (un departamento diferente al de investment banking desde donde se lleva el tema de la deuda local).
En ese sentido, remarcó que no hay respuestas “fáciles” para el corto plazo por lo que se espera que el rendimiento de las acciones a corto plazo para las petroleras esté altamente correlacionado con las tendencias del precio del comoditie, las tendencias económicas y las noticias sobre el coronavirus.
“A pesar de la fuerte caída de las existencias en los últimos meses, no vemos catalizadores a corto plazo y mantendríamos una posición prudente”, destacó el BofA.
Asimismo, sostuvo que los precios más bajos del petróleo son especialmente negativos para YPF dado que el desarrollo de recursos no convencionales, que es una parte importante del valor a largo plazo de las acciones, podría verse mucho más desafiado si los precios del petróleo permanecen en niveles más bajos. Y añadió que el potencial de recursos depende en gran medida de una recuperación en los precios mundiales del petróleo y mejores condiciones económicas y políticas nacionales.
El analista financiero Luis Palma Cané consideró que la dinámica de los activos financieros globales “van a tener su impacto en Argentina. La caída en el precio del petróleo pega en Vaca Muerta. La gente de YPF ha declarado que el petróleo por debajo de los 50 dólares Vaca Muerta es improductiva”.
En tanto, Bank of América bajó también la previsión del precio de las acciones de Tenaris con el objetivo de "reflejar un entorno de ganancias más cauteloso”. En ese sentido, consideró que la fuerte caída en los precios del petróleo debería contribuir a niveles más bajos de actividad de perforación, lo que debería afectar la demanda y la fijación de precios.
La petrolera YPF presentó en 2019 una pérdida operativa superior a los $33.000 millones a pesar de haber cerrado el año con un aumento en los ingresos del 55,7% y un EBITDA (el beneficio bruto de explotación calculado antes de la deducibilidad de los gastos financieros) ajustado con un crecimiento del 39,7% en pesos respecto del 2018, según los resultados del tercer trimestre que comunicó al mercado.
La compañía explicó que la pérdida operativa neta de impuestos fue de $33.379 millones “producto del impacto extraordinario del cargo por deterioro del valor de sus activos (impairment) en el tercer trimestre, la situación macroeconómica en general y las políticas particulares para el sector durante el 2019”.
Un ex secretario de Energía consultado por Infobae atribuyó las pérdidas de YPF a la intervención en los precios de los combustibles. “Si ves los balances de 2018 ya había una pérdida de $15.000 millones. Las causas son evidentes. Los ingresos que tienen las petroleras es lo que pagamos los consumidores en las estaciones de servicio, lo que paga el campo para el gasoil. Todo es consumo local. No se exporta nada”, remarcó. Y agregó que por ese motivo “se han parado inversiones, se han cerrado pozos y queda un saldo negativo para las compañías petroleras en general”.
Según la fuente, "de seguir así las petroleras van a tener que parar o ir a la quiebra. No se puede trabajar con precios ficticios”. No obstante, reconoció que lo que es prioritario es el problema de la deuda. “Hay que tener cuidado con que el Gobierno no se engolosine. Si se arregla la deuda va a ser muy tentador seguir con el congelamiento de los precios”, consideró. En ese sentido, destacó que lo que más le hace falta a la economía argentina son divisas. “Pero sin inversiones, eso no sucede”, concluyó.