Ni siquiera el oro es inmune al aluvión de ventas que afecta hoy a los mercados mundiales.El metal precioso subió por encima de los 1.700 dólares la onza cuando se abrieron los mercados en Asia, pero no pudo mantener el nuevo máximo ya que los inversores arrojaron activos de riesgo en una ronda de ventas de pánico.

Si bien el oro es visto como un refugio clásico y popular en tiempos de agitación, ha sido un movimiento irregular en el último mes. Los analistas especulan que la volatilidad está siendo causada por inversores que necesitan mitigar las pérdidas en otros lugares y, por lo tanto, están reservando ganancias recientes en lingotes.

"El oro está bajando ya que algunos inversores aparentemente se vieron obligados a venderlo para cubrir pérdidas en otros lugares", dijo Daniel Briesemann, analista de Commerzbank AG.

El oro subió hasta un 1,8% en la mañana de Asia, pero abandonó la mayor parte de la recuperación más tarde en el día. Los lingotes al contado subieron un 0.3% a $ 1,678.69 la onza a las 11:25 am en Londres. Los precios han subido un 11% este año a un máximo de siete años.

A otros metales preciosos les fue peor que al oro.

+La plata cayó 2% a $ 16.97 la onza.

+El platino perdió 3.4% y el paladio se hundió 5.5%

El consenso es que el oro seguirá subiendo. Los precios podrían subir a $ 1,800 en semanas, según la unidad de gestión de patrimonio de UBS Group AG.

Con los golpes consecutivos de la desaceleración provocada por el virus y el crudo tanque, todos los ojos están puestos en lo que el Banco Central Europeo y la Reserva Federal harán para defender las expectativas de inflación, dijo Wayne Gordon, director ejecutivo de materias primas y divisas en el banco. .

El oro puede alcanzar los $ 1,800 en semanas, dice el gerente superior mientras los tanques de petróleo

La señal más clara de que los inversores siguen siendo optimistas: los fondos negociados en bolsa respaldados por oro continúan absorbiendo efectivo. Los fondos de lingotes aumentaron la semana pasada más que nunca desde septiembre, según datos compilados por Bloomberg.

A los mercados les preocupa que "podríamos ver una situación más fea antes de que las cosas mejoren, lo que por supuesto es una buena noticia para el oro", dijo Michael McCarthy, estratega jefe de mercado de CMC Markets en Sydney.