El índice llegó al pico más alto en la era de Alberto, los 2228 puntos básicos
JAVIER BLANCO
La presión extra que sumó a la ya castigada valuación de los bonos argentinos el "efecto coronavirus" volvió a quedar a la vista ayer al superar el riesgo país por largas horas los 2200 puntos básicos (llegó a 2228), lo que representa su mayor nivel desde que asumió la administración Fernández, aunque se mantiene distante aún del récord de 2600 puntos de septiembre pasado.
El salto en este sensible indicador terminó siendo de 78 puntos en la jornada (3,7%) lo que lo dejó en 2184 y elevó al 6,2% su incremento desde comienzos de la semana, es decir, cuando el temor a los efectos económicos que provocaría este virus impactó a pleno sobre los mercados globales.
Fue causado por otra baja del 2% promedio en las cotizaciones de los bonos argentinos en moneda extranjera más operados en el exterior, que son los que toma la banca JP Morgan para esta medición.
"Los bonos en dólares volvieron a operar muy ofrecidos desde el comienzo de la rueda, en parte afectados por el mal humor global, pero también por nuevos trascendidos sobre la reestructuración que viene. Así, cerraron con bajas en torno de US$1,5 a lo largo de toda la curva", explicó en su informe de reseña de la jornada el Grupo SBS.
"Los bonos ya venían tan golpeados que no mostraron un castigo diferencial al activarse el vuelo a la calidad global", describió por su parte Nicolás Chiesa, director de Portfolio Personal Inversiones (PPI).
Para el analista, este efecto hasta aquí "sumó" a lo que pareció ser una estrategia oficial para que los bonos lleguen algo más baratos al momento de la oferta. "Pero el gobierno deberá cuidar en tal caso que no vulneren un piso de rendimiento que pueda incentivar un cambio de manos, frontera que ubico debajo del 30 de paridad, porque esos traspasos entorpecerían más el proceso de canje", advirtió.
La plaza accionaria local, que venía de derrumbarse casi 6% anteayer, cedió otro 2,8% promedio en la víspera ante el nuevo y generalizado ajuste de hasta 6% que sufrieron las acciones argentinas que se operan en la bolsa de Nueva York. De este modo, el S&P Merval ya acumula una baja del 11,8% en el mes, que amplía la pérdida al 15,1% en lo que va de 2020.
Clarín
ANABELLA QUIROGA
El indicador de JP Morgan llegó a 2187 puntos básicos, empujado por las noticias negativas en torno al coronavirus y la deuda .
A nivel local, los inversores reaccionaron de forma negativa ante dos anuncios que se conocieron el miércoles. Por un lado se supo que el déficit fiscal primario de enero alcanzó $ 3.766 millones, frente a un superávit de $ 16.658 millones de igual mes de 2019. A la vez el déficit financiero -que computa el pago de los interes de la deuda- llegó a los $ 90.818 millones. Estos datos dan cuenta de las dificultades que tiene el Gobierno para ordenar las cuentas públicas en medio de una economía que sigue en recesión.
A esto se sumó que el miércoles se realizó una nueva colocación de Letras del Tesoro en pesos por $ 2.358 millones y además se canjeó el bono AF20 por un monto total de $ 6.864 millones. De este modo, entre esta operación y la de hace 20 días, lograron canjear el 18% de este bono dual que llevaba $ 96.000 millones de capital vencido y cuyo pago se postergó para septiembre. Para el mercado, ese resultado tuvo gusto a poco frente a los fuertes vencimientos de deuda que se vienen y la falta de avances concretos en cuanto a la reestructuración.
De este modo, los bonos en dólares cayeron 2% en promedio y el Merval bajó 2,8% en otro día negro para las acciones locales. Casi todo el panel general quedó en rojo, con la excepción de Gas Natural que subió 6,3%. El papel que más bajó fue el de Endesa, que se derrumbó 6,7%. Entre los títulos públicos en dólares el Bonar 24 fue el que más cayó con una baja de 2,3%. Entre las ADR, los papeles argentinos que cotizan en Nueva York, también hubo múltiples pérdidas, con la excepción de Telecom e Irsa, que subieron 1,7%.
"En vez de ajustarse bruscamente como ya nos tienen acostumbrado, al estar operando en paridades tan bajas y abriéndose una puerta para los fondos especulativos, los bonos se encuentran ajustando sus precios constantemente pero de manera más lenta", opinó Joaquín Candia, analista de Rava Bursátil. "A esto se le suma la incertidumbre reinante en el ambiente local e internacional y la falta de confianza en la moneda local y de la posibilidad de pago de los títulos", sostuvo.
El dólar se mantuvo casi sin cambios con el minorista en $ 64,03 en el promedio del Central, el contado con liqui en $ 80,56 y el dólar bolsa en $ 79,56. El mayorista se ubica en $ 62,14, un alza de diez centavos. El blue quedó estable en $ 79. Para Candia, "el dólar mayorista volvió a subir y podría interpretarse como una señal de buena voluntad del gobierno. Si bien está en carpeta un aumento de las retenciones, el gobierno estaría interviniendo para que el tipo de cambio que usan los exportadores para liquidar no se atrase".
A nivel global, las principales bolsas europeas retrocedieron en torno al 3% debido a la expansión del coronavirus en ese continente.
En Londres, el índice perdió 3,5%, en Francfort la bolsa cayó 3,19%, en París -3,3% y Madrid, -3,5%. En Nueva York, el Dow Jones cayó 2,6% y la bolsa de San Pablo, que el miércoles se derrumbó 7% al conocerse que el coronavirus llegó a ese país, bajó 1,2%.
