Minas Argentinas, filial de la colombiana Mineros, confía en la expansión del yacimiento jachalero
El ministro de Minería de San Juan, Carlos Astudillo, recibió a representantes de Minas Argentinas, quienes brindaron los detalles de exploración durante el 2019 en el proyecto Gualcamayo con el objetivo de poder extender los trabajos de explotación en la zona. Además informaron sobre el plan de trabajos para el corriente año.
El equipo de profesionales de la compañía realizó diversas perforaciones de hasta cien metros de profundidad y también análisis sobre la superficie. Estas tareas arrojaron resultados altamente positivos, ya que se encontró una importante reserva de oro en diversos sectores.
Además, otro de los puntos a destacar de los trabajos realizados el año pasado es que un área cercana a la mina donde se constituía una reserva pasó a tener la categoría de recurso, es decir que puede ser explotado. Cabe destacar que en caso de continuar estos resultados en la exploración y si las condiciones macro son propicias se podría llegar a extender la vida útil del proyecto, mientras se continúan con las labores de exploración.
En este sentido el ministro destacó que “las concesiones mineras son para trabajarlas, siempre les insistimos a las empresas que no paralicen los trabajos, que continúen y hagan foco en la exploración porque es lo que permite que la actividad minera tenga desarrollo constante. Existe un proceso virtuoso entre exploración, explotación y cierre de mina; y si bien existe un momento para cada una de ellas, también es necesario que convivan. Estos resultados muestran que así debe ser, porque luego de un año de trabajo exploratorios tenemos posibilidades ciertas de potenciar y extender Gualcamayo”.
Por otro lado el superintendente de exploraciones de la empresa explicó sobre una metodología innovadora que están aplicando en las tareas de geofísica, “Estamos realizando magnetometría aerotransportada en drone. Esto nos ha permitido una cobertura de 650 kilómetros lineales para detectar anomalías geofísicas. Una vez detectada esa anomalía vamos y hacemos la exploración en el terreno ya sea sobre superficie o subterránea”, indicó el geólogo Ignacio Cuadra.
Por ultimo desde la empresa le informaron al titular de la cartera minera que retomaran la exploración en marzo cuando finalice la temporada de lluvia y que actualmente esto demanda el trabajo de 12 geólogos y 18 técnicos. En este sentido Astudillo les informó que como autoridad de aplicación constatarán que estas tareas se realicen para luego conocer los resultados.
El primer paso en el proceso consiste en el desprendimiento del mineral de la montaña, tarea que se realiza por medio de voladuras controladas.
El mineral desprendido se carga por medio de palas mecánicas en camiones que lo trasportan hasta el buzón de transferencia (orepass) por medio del cual el mineral baja hasta la caverna que contiene la trituradora primaria. Allí, el mineral proveniente de las operaciones de superficie se reúne con el que se origina en la mina subterránea. El mineral triturado es transportado hacia la pila de mineral intermedia por una cinta de alimentación de 1647m de longitud dentro de un túnel.
Une vez en el exterior del túnel, el mineral es recibido por otra unidad de trituración, secundaria y terciaria, donde se termina de reducir la roca hasta el tamaño deseado para la siguiente etapa del proceso. Un conjunto de cintas transportadoras conduce luego el mineral triturado hasta la pila de lixiviación El sistema que utiliza Gualcamayo es de lixiviación con solución cianurada en un circuito cerrado.
Las pilas de lixiviación están impermeabilizadas con una geomembrana PEAD (Polietilieno de Alta Densidad) y una capa de suelo de baja permeabilidad compuesta mayormente por arcilla compactada de 30 cm de espesor (permeabilidad de la arcilla de 10 -6 cm/s máximo). Adicionalmente por arriba de la geomembrana va un sistema de cañerías colectoras para ayudar a conducir la solución de percolación hacia el exterior de la pila de Lixiviación para las etapas siguientes de producción.
La solución rica (conteniendo el oro lixiviado) es transferida por gravedad por una cañería de 18” de diámetro dentro de un canal impermeabilizado hasta el área de almacenamiento en tanques o piletas. En las pilas de lixiviación se apila el mineral en unidades productivas de 10 m de alto por 86m de ancho y 60m de longitud, aproximadamente, por medio de un apilador radial que recibe el mineral desde trituración por medio de cintas transportadoras móviles.
Un sistema de bombas y cañerías envía la solución lixiviante, denominada “solución pobre”, hasta los goteros esparcidos sobre la unidad productiva, también llamada “celda”. La solución lixiviante percola por el mineral y en su movimiento descendente arrastra el oro y demás metales. Al llegar a la parte inferior encontrará la geomembrana impermeabilizante por la que se desplazará hasta las cañerías colectoras que conducirán, por gravedad, la“solución rica” (con oro) hasta la Planta.
Allí se recupera el oro de la solución solución cianurada y se retorna a esta última a la pila de lixiviación para un nuevo ciclo. La solución lixiviante con cianuro trabaja en circuito cerrado entre el Valle de Lixiviación y los tanques de almacenamiento y Planta de Recuperación de Oro, por lo que en ningún momento hay descarga de líquidos hacia el medio ambiente.
El oro lixiviado es extraído de la solución rica en el circuito de Adsorción con carbón activado. El carbón activado retiene el oro dentro de su estructura porosa. Luego, el oro es extraído del carbón activado con una solución de cianuro a 145°C y 450kPa de presión, método denominado de Zadra presurizado. La solución de eluición pasará por las celdas de electrodeposición donde el oro en solución se transforma en oro metálico sobre los cátodos.
El lodo obtenido se filtra y seca para poderlo cargar en el horno de fusión junto con fundentes. El lodo contiene cantidades importantes de oro, un poco de plata y también otros metales en menor medida, la mayoría de ellos sin valor comercial. La carga se funde luego en un horno de gas y el oro y la plata son separados de los otros metales contenidos en la escoria. Cuando la carga fundida se vierte desde el horno, el oro y la plata se recogen en moldes de lingotes y la escoria se vierte en recipientes para escoria.
El bullión contiene principalmente oro en un 78%, 20% de plata y 2% de impurezas o metales sin valor comercial. Normalmente se obtendrán de 3 a 4 lingotes por colada.
Mina subterránea
La mina subterránea de Gualcamayo, llamada Quebrada del Diablo Bajo Oeste (QDD Lower West) produce actualmente mediante el sistema Sub Level Caving (SLC).
En el método sub level caving se desarrollan galerías paralelas separadas generalmente de 9 a 15 metros en la horizontal, conocidas como galerías de producción. Los subniveles se ubican a través del cuerpo mineralizado en intervalos verticales que varían, en la mayoría de los casos, de 8 a 13 metros. La explotación queda de este modo diseñada según una configuración geométrica simétrica.
La operación consiste básicamente en la perforación ascendente de taladros o perforaciones en abanico desde los subniveles, perforando así el macizo rocoso del subnivel correspondiente y atravesando el pilar del subnivel superior, ejecución del carguío de explosivos, la detonación de la voladura y carguío del mineral fragmentado generada por la misma. Al comienzo de la explotación por extracción de la roca quebrada se produce la cavidad entre el material quebrado y la roca in situ, esto se consigue generando un área de radio hidráulico superior al que resiste la roca por medio de la extracción de un porcentaje calculado de la roca quebrada por las voladuras. Para conseguir un radio hidráulico adecuado se puede construir el subnivel superior similar al método de cámaras y pilares y posteriormente extraer los pilares.
SLC es un método de minado basado en la utilización del flujo gravitacional del mineral volado. Este método se compone de diferentes etapas de trabajo, cada una independiente de la otra, haciendo un método muy eficiente. A grandes rasgos, tenemos primero la construcción de galerías, perforación y colocación de explosivos en las perforaciones de abanicos realizadas en las galerías, detonación y correspondiente fragmentación de la roca considerada en el diseño del abanico y la carga y transporte del mineral quebrado hacia la planta de trituración.
El método por hundimiento se basa en la fuerza de gravedad, la presión y el peso que crea la roca inmediatamente encima del cuerpo mineralizado y la fracturación de la roca por medio de explosivos controlados.
