La iniciativa de continuidad operacional tendrá una inversión de 100 millones de dólares
Su objetivo es cumplir con las metas originales del “Proyecto Hipógeno”, mediante un aumento del 4% en el ritmo de extracción y procesamiento del mineral. Desarrollo no implica un aumento de la superficie del rajo, la que se mantiene según lo aprobado.
Tampoco considera aumentar los insumos actuales de la operación, tales como abastecimiento de agua, combustible y consumo eléctrico. Obras empezarían en 2021. 67 mil toneladas de cobre generó Carmen de Andacollo (CDA) en 2018. Producción que da cuenta de la importancia para la Región de Coquimbo y por no decirlo, para Chile, del yacimiento minero propiedad de Teck.
Sin embargo, su “Proyecto Hipógeno”, el que fue aprobado en 2007 por la Comisión Regional del Medio Ambiente y que inició su operación en 2010, no ha podido lograr la tasa de procesamiento visada debido a la dureza del mineral. Motivo por el que desarrolló su iniciativa de “Continuidad Operacional Teck CDA”, la que tiene por objetivo ejecutar ajustes y modificaciones al plan minero de la faena para cumplir con las metas originales.
De acuerdo a su Declaración de Impacto Ambiental (DIA), la que se encuentra “En Calificación” en el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA), Carmen de Andacollo programa revertir la tasa de procesamiento a través de un 4 por ciento de aumento en el ritmo o tasa de extracción y también en el procesamiento de mineral. Por lo tanto, durante los 10 últimos años del proyecto la tasa se llevaría de 55,6 ktpd a 58 ktpd como promedio anual.
Conjuntamente, incorporará un botadero de estéril de 27 millones de metros cúbicos de capacidad, el que será erigido sobre terrenos intervenidos por la operación y adosado al muro de depósito de relaves. Además, su DIA informa que desarrollará un depósito de mineral dentro del rajo, que optimizará la combinación de minerales que se envían a proceso y con ello generar concentrados con calidad estándar. Se destaca que la iniciativa considera ajustes en el manejo de aguas lluvia y en los equipos necesarios para la operación.
Cabe señalar que estos ajustes y modificaciones se harán principalmente al interior de la faena minera de Teck CDA, en áreas intervenidas por proyectos ya autorizados en el SEIA. Se ha originado un déficit histórico de procesamiento de mineral
En su Declaración de Impacto Ambiental, Teck revela que “no se contemplaba que el mineral tendría una dureza tal que, los equipos proyectados no serían suficientes para poder procesar a la capacidad requerida y autorizada de 55.600 t/día (55,6ktpd). Debido a ello, durante estos 9 años de operación se ha debido instalar equipos complementarios de chancado a fin de sortear esta mayor dureza del mineral y con ello aumentar la tasa de procesamiento. No obstante, aún no se logra llegar a la capacidad de diseño”.
En cuanto al comienzo de su ejecución, si los tiempos se dan dentro de lo planeado, esta iniciaría en enero del 2021. Por último, su inversión estimada asciende a los 100 millones de dólares.
Teck: desarrollo no implica un aumento de la superficie del rajo ni aumentar los insumos actuales de la operación
Consultados al respecto, desde la compañía minera le indicaron al Día que “el objetivo del Proyecto Continuidad Operacional de Teck Carmen de Andacollo es realizar ajustes y modificaciones al Plan Minero de la operación de Teck Carmen de Andacollo, para cumplir con las metas originales del ‘Proyecto Hipógeno’. Mantiene la vida útil aprobada (231) en la RCA (Resolución de Calificación Ambiental) 104 vigente del ‘Proyecto Hipógeno’ del año 2007”.
Asimismo, aclararon que su desarrollo no implica un aumento de la superficie del rajo, la que se mantiene según lo aprobado. Tampoco considera aumentar los insumos actuales de la operación, tales como abastecimiento de agua, combustible y consumo eléctrico. Por último, Teck sostuvo que “el diseño de obras operacionales se considera en terrenos al interior de faena y sobre áreas ya intervenidas por el proyecto”.