Ante algunas versiones que surgieron en medios periodísticos nacionales, desde UTE Represas Patagonia rápidamente salieron a aclarar que “no existió ningún error en las tareas de construcción de la represa Cóndor Cliff”.
Sin embargo, comunicaron que “producto de las condicionesgeológicasdel terreno, con el avance de las excavaciones, se detectó la existencia de una zona conformada por un material de baja resistencia, con potencial riesgo de deslizamiento, por el bajo ángulo de fricción interna y cohesión nula, que impone la necesidad de revisión del diseño, para reubicar las estructuras de hormigón para el desvío del río, y el vertedero de Cóndor Cliff”.
En este contexto, vale la pena mencionar que mediante comunicado informaron que “la UTE Represas Patagonia ha presentado una propuesta técnica de ajuste al diseño que fue evaluada por el Panel de Expertos Internacionales Independientes y por el Comitente”, y detallaron: “Contempla la reubicación de obras evitando la zona con potencial riesgo de deslizamiento. La propuesta está en etapa de definición para avanzar al diseño ejecutivo y diseño de detalle de las mismas”.
ACLARACIÓN SOBRE LA CONSTRUCCIÓN DE LAS REPRESAS DEL RIO SANTA CRUZ
El contrato recibido por esta Administración en diciembre 2015 para la construcción de las represas Cóndor Cliff y La Barrancosa presentaba las siguientes falencias:
· no contaba con proyecto ejecutivo desarrollado,
· tenía once turbogrupos, de los cuales tres en exceso (430 MW) para generar la misma energía anual (5200 GWh)
· no disponía de la línea de salida de alta tensión de180 km en 500 KV
· el 77% del monto correspondiente a trabajos locales estaba dolarizado
· la obra estaba en cabeza de la Provincia de Santa Cruz incumpliendo la ley 15.336
· no cumplía con la legislación nacional ambiental.
Entre 2016 y 2017 se corrigió el contrato, se elaboró el proyecto ejecutivo y se dio cumplimiento a lo solicitado por la Corte Suprema de Justicia de la Nación en materia ambiental (se puede descargar el estudio de impacto ambiental completo en WWW.IEASA.com.ar).
Finalmente se realizó un plan que fue aprobado por las autoridades nacionales y provinciales, previa audiencia pública en el Congreso de la Nación.
El contrato así redefinido significó una reducción del monto de aproximadamente 2.000 millones de dólares para el Estado Nacional y el cumplimiento de toda la legislación vigente.
Una vez resueltas estas falencias y aprobado el plan, en febrero 2018 pudieron iniciarse las obras principales que a la fecha, luego de 20 meses de trabajo tienen un avance global del 16%.
Ahora bien, desde octubre de 2018 y en el entorno de las obras que se realizan para la construcción de la represa Cóndor Cliff se detectaron deslizamientos de suelo en las márgenes del río Santa Cruz (el más relevante en febrero de 2019). Se solicitó a la UTE contratista la solución de ingeniería correspondiente en consulta con un panel de expertos internacionales.
Hasta el momento y para mitigar el impacto ambiental de los deslizamientos, garantizar la seguridad general de las obras en marcha, de las personas y el funcionamiento futuro de la central, IEASA (el Comitente) ha autorizado tareas menores de relleno (construcción de refuerzos, contrafuertes y puntales) que representan aproximadamente un monto de 5 millones de dólares y que no implica necesariamente un traslado directo al costo final de la obra.
No se han autorizado nuevos movimientos de suelo ni otras obras adicionales, a la espera que la empresa contratista presente una nueva ingeniería que contemple las particularidades geológicas del terreno. Esta propuesta deberá ser objeto de aprobación a través de una adenda contractual que incluirá la asignación de responsabilidades según corresponda entre comitente y contratista.
Es importante señalar que en la obra de La Barrancosa no se han verificado inconvenientes geológicos y los trabajos continúan de acuerdo al proyecto ejecutivo.
Sobre el panel de expertos
El contrato preve la contratación por parte de la UTE de expertos internacionales de renombre en obras similares en materias de geología y seguridad de presas, que son convocados cuando se considera necesario.
Está compuesto por profesionales que provienen de Suiza, Brasil, Argentina, España, Francia, Colombia, Alemania y Suecia.
Con motivo de los deslizamientos ocurridos este panel ha sido consultado desde febrero de 2019.
Mariela Arias
Desde hace un año se detectan deslizamientos de suelos en las márgenes del río Santa Cruz en el sitio donde se va a construir la represa Cóndor Cliff (ex Néstor Kirchner) y ahora se espera un rediseño mientras se hacen obras de mantenimiento. Así lo informó ayer la empresa estatal Integración Energética Argentina ( Ieasa), heredera de la ex-Enarsa. Las obras principales, iniciadas en febrero de 2018, tienen un avance global del 16%.
En el Gobierno confirmaron que se solicitó a la UTE Represas Patagonia la solución de ingeniería correspondiente con el asesoramiento de un panel de expertos internacionales, en tanto que para mitigar el impacto ambiental de los deslizamientos y garantizar la seguridad de las obras en marcha, de las personas y del funcionamiento futuro de la central, Ieasa "ha autorizado tareas menores de relleno (construcción de refuerzos, contrafuertes y puntales), que representan aproximadamente un monto de US$5 millones, que no implica necesariamente un traslado directo al costo final de la obra".
El portal de noticias especializadas Econojournal informó ayer que un error en la construcción de Cóndor Cliff sería la causa de una "enorme grieta en uno de los taludes de contención del vertedero que se montaron sobre el río Santa Cruz, lo que obligará a un rediseño integral del proyecto". El mismo artículo afirmaba que el problema demandó una erogación adicional de US$250 millones, cifra equivalente al 5% del presupuesto inicial.
Sin embargo, aunque el gobierno nacional y la UTE a cargo del proyecto reconocieron problemas, negaron que hayan iniciado obras nuevas. Represas Patagonia asegura que el rediseño se hará dentro del presupuesto pautado inicialmente para la obra, en tanto que la empresa estatal asegura que no se han autorizado nuevos movimientos de suelos ni obras adicionales, a la espera de que la contratista presente una nueva ingeniería para la obra que contemple las particularidades geológicas del terreno.
La publicación levantó un revuelo entre las partes involucradas en la obra y también en las organizaciones ambientalistas, que desde hace varios años vienen litigando para intentar frenar la obra.
El Gobierno explicó que la propuesta que eleve la UTE deberá ser aprobada a través de una adenda contractual "que incluirá la asignación de responsabilidades según corresponda entre comitente y contratista", y aclaró que la situación se registra solo en la obra de Cóndor Cliff, en tanto que en la obra de La Barrancosa (ex Jorge Cepernic) no se han verificado inconvenientes geológicos y los trabajos continúan de acuerdo al proyecto ejecutivo.
Por su parte, la UTE, integrada por la empresa china Gezhouba, la cordobesa Electroingeniería y la mendocina Hidrocuyo, se explayó sobre aspectos técnicos de lo ocurrido y explicó que con el avance de las excavaciones se detectó la existencia de "una zona conformada por un material de baja resistencia con potencial riesgo de deslizamiento, por el bajo ángulo de fricción interna y cohesión nula, que impone la necesidad de revisión del diseño, para reubicar las estructuras de hormigón para el desvío del río y el vertedero de Cóndor Cliff".
La propuesta de ajuste presentada por la UTE contempla "la reubicación de obras evitando la zona con potencial riesgo de deslizamiento".
Sobre los costos aclaran que "los cambios a implementar se realizarán dentro del mismo monto de la financiación de los bancos chinos aprobado a la fecha", y explican que el financiamiento estipulado "es suficiente para la ejecución de la obra con las modificaciones resultantes de las condiciones geológicas encontradas". En el comunicado dado a conocer ayer a la tarde destacaron que no existieron errores de construcción, ni derrumbes, ni grandes deslizamientos. Explican que la metodología de excavación aplicada "permitió conocer con precisión las características de los materiales",
La coalición de distintas ONG Río Santa Cruz Sin Represas, conformada por Aves Argentinas, Banco de Bosques, FARN y Vida Silvestre, entre otras, presentará hoy un pedido de acceso a la información pública ante la Secretaría de Energía para esclarecer los hechos denunciados en relación a errores en la construcción de la represa.
"Bajo ninguna circunstancia puede utilizarse el 'Plan de Gestión Ambiental Adaptativo' como coartada para preparar nuevos estudios mientras avanza la obra. Esto lo vimos claramente en las duras impugnaciones de la Secretaría de Energía y la UTE al peritaje biológico. Este argumento es ilegal y arbitrario, porque la ley general del ambiente claramente establece que el análisis de riesgos se tiene que dar en forma 'previa'. La propia Corte Suprema ha dicho que los estudios de impacto ambiental no pueden aprobarse de manera condicionada, supeditando el análisis de riesgos a futuros estudios", detalló a LA NACION el abogado Cristian Fernández, representante de la coalición de entidades.