Desde la década del '80 se conoce que en la Faja del Indio, en Iglesia, hay un potencial minero interesante. Tras años de evaluación, finalmente en 2005, uno de esos proyectos comenzó la etapa de producción de oro y plata.
Se trata de Veladero, que marcó un hito en la economía sanjuanina. Hoy es la mina más grande del país y con un efecto multiplicador notorio en la comunidad.
Actualmente representa el 75% de las exportaciones de la provincia, desde que empezó a operar. Junto a las otras minas en producción, Casposo y Gualcamayo, empujaron un crecimiento del PBI de San Juan de 153% desde 2005 a la fecha. Para comparar, en ese mismo plazo el PBI de la Argentina creció el 46%.
El año pasado Veladero vendió 717 millones de dólares con la producción de 500 mil onzas de oro. De esos 717 millones de dólares, 400 millones de dólares fueron compras realizadas en la provincia de San Juan, 114 millones de dólares fueron a impuestos y 83 millones de dólares fueron a salarios directos. Es decir que un total de 650 millones de dólares quedaron en San Juan y en Argentina.
En cuanto a la mano de obra ocupada, Veladero tiene 3600 empleados. El 99% son argentinos, el 90% de ellos, son sanjuaninos. Al día de hoy, en un trabajo compartido entre el Ministerio de Minería y las cámaras empresariales, Veladero está contratando 986 empresas sanjuaninas y 1046 empresas argentinas.
Este impacto en el crecimiento económico empezó mucho antes, con la construcción de la mina. Albañiles, metalúrgicos, camioneros y una amplia red de proveedores de bienes y servicios se vieron beneficiados por ese trabajo.
Hoy la empresa a cargo está evaluando cómo mejorar la producción y extender la vida útil de la mina y de la zona en la que tienen la concesión.