La petrolera pidió permiso para trabajar tres pozos en el área Chihuido de la Salina Sur mediante la técnica de fractura hidráulica.
La petrolera YPF solicitó autorización para perforar y operar tres pozos mediante estimulación hidráulica en Vaca Muerta, puntualmente en el área Chihuido de la Salina Sur. Ahora la empresa deberá esperar que se apruebe la evaluación de impacto ambiental gestionada por la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Provincia. En caso de obtener resultados positivos, la firma podrá comenzar a explorar la roca generadora.
A través de la Resolución N° 470, publicada en el Boletín Oficial de Mendoza, el Gobierno Provincial designó a la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Cuyo (UNCuyo) la realización de un “relevamiento de campo” y la posterior elaboración de un dictamen técnico sobre el impacto ambiental de los potenciales pozos exploratorios. A su vez, se solicitó al Departamento General de Irrigación que realice un “dictamen sectorial de incumbencia” y que se expida sobre el uso de agua del Río Grande para el proceso de fractura
La normativa solicita además a la Municipalidad de Malargüe que trabaje en un “Dictamen Sectorial” de su incumbencia, con el fin de determinar la factibilidad de la operación.
Para la realización de los estudios, el Gobierno pagará un monto de $ 160.500 en concepto de honorarios, que se canalizarán a través de la Asociación Cooperadora de la Facultad de Ingeniería (Acofi).
Previo al permiso por los tres pozos en Chihuido de la Salina Sur, YPF había solicitado hacer fracking en las áreas de Paso de las Bardas Norte y Cañadón Amarillo. Fuentes cercanas a la petrolera indicaron que los estudios de impacto ambiental están en proceso, pero aun no han podido avanzar en el proyecto. Es decir que hoy la empresa no está haciendo fracking en ningún pozo dentro de la parte mendocina de Vaca Muerta.
De todas formas, desde la compañía hay optimismo para comenzar con la extracción no convencional. De hecho, el propio presidente de YPF, Miguel Gutiérrez, había confirmado a Los Andes (en junio pasado) que intentarían hacer el primer pozo exploratorio en la parte mendocina de Vaca Muerta antes de que termine el 2019.
Si eso se concreta o no dependerá de los permisos del Gobierno. Miriam Skalany, Directora de Protección Ambiental de Mendoza, explicó que los estudios asignados por la Resolución N° 470, tardarán entre 45 y 60 días en resolverse. “YPF presentó previamente estudios hidrogeológicos de todo el área, proyectando un plan de trabajo más amplio en el futuro. Eso agiliza muchos los plazos”, explicó la funcionaria.
Sin embargo, Skalany aclaró que lo que se otorgará dentro de dos meses es el “permiso de perforación”. Luego, una vez que la empresa perfore, se hará el correspondiente estudio de integridad del pozo, que estará a cargo de la Facultad de Ingeniería en Petróleo de la UNCuyo. “Ese estudio demora solo una semana. Lo que puede tardar es la realización del pozo en sí”, comentó.
YPF conoce muy bien el área Chihuido de la Salina Sur y la solicitud de fracking revela las expectativas que tiene la empresa respecto a lo que puede ofrecer la roca generadora.
Según estadísticas publicadas por el Ministerio de Energía de la Nación, entre enero y agosto de 2019 la petrolera produjo 6.134 m3 de crudo y 154,2 millones de m3 de gas en ese yacimiento. En ambos casos el volumen obtenido se redujo en relación a igual período del año pasado (-39% en crudo y -17% en gas), pero la tendencia podría cambiar a partir de la exploración de Vaca Muerta.