El cobre y otros metales lograban algunos avances tras datos fabriles chinos algo mejores de lo esperado y por expectativas de los inversores de una rebaja en las tasas de interés en Estados Unidos más tarde en el día.
El mercado del plomo avanzó un 14% durante tres semanas previamente en el mes, antes de tocar un pico de cuatro meses el 25 de julio por cierres de fundiciones que preocuparon al mercado y por inventarios en almacenes registrados en la Bolsa de Metales de Londres (LME) que bajaron mínimos de décadas.
No obstante, la situación se revirtió en los últimos días, en medio de señales de un suministro saludable que hizo caer los precios.
A las 10:30 GMT, el plomo referencial en la LME perdía un 0,4%, a US$1.990,50 la tonelada, tras tocar US$1.981,50, su cota más reducida desde el 17 de julio.
Un portavoz de Korea Zinc indicó que la firma garantizó inventarios antes del mantenimiento de la refinería que se está realizando hasta fines de agosto, por lo que no habrá disrupciones en los suministros.
En otros metales básicos, el cobre a tres meses en la LME sumaba un 0,3%, a US$5.962,50 la tonelada; el aluminio mejoraba un 0,3%, a US$1.808; el níquel ganaba un 0,2%, a US$14.385; el zinc cedía un 1,3%, a US$2.427.50; y el estaño restaba un 0,5%, a US$17.355.
El pronóstico de los analistas
Los analistas han reducido las previsiones de este año para los precios del cobre en la medida que China lucha por reactivar su economía, mostró el martes un sondeo de Reuters.
El índice de seis metales básicos de la Bolsa de Metales de Londres muestra un retroceso de 7% desde sus máximos de fines de febrero, presionado por la desaceleración en China, por la tensión comercial entre Pekín y Washington y por la preocupación por la economía global.
El precio del cobre al contado en la LME promediaría 6.291 dólares la tonelada en el cuarto trimestre de este año, según la mediana de los pronósticos de 26 analistas.
La cifra representa un ajuste a la baja de 5,4% respecto a la estimación de consenso de una consulta de mayo, pero es un 4,9% más alta frente al cierre del lunes.
“Anticipamos una estabilización de la economía china más que una aceleración, lo que sugiere que la demanda por metales debería ser lo bastante sólida para apuntalar los precios pero no lo suficiente para que suban”, afirmó Carsten Menke , analista de Julius Baer.
Los expertos además recortaron sus expectativas de un déficit en el mercado del cobre en 2019 a 178.000 toneladas desde la previsión anterior de un saldo negativo de 205.500 toneladas.