De cara a la realización de la COP25 el Consejo Minero actualizó sus principios sobre cambio climático.
En el año 2016 el Consejo Minero hizo público sus “Principios sobre cambio climático”, que reflejan nuestros compromiso por la mitigación de las emisiones que contribuyen al cambio climático y por la adopción de medidas de adaptación ante sus efectos.
En este año 2019, y teniendo a la vista la COP 25 que se desarrollará en el país y la revisión del compromiso que asumió el país en la COP 21 de París, hemos decidido actualizar esos principios. Desde la industria sabemos que de poco sirve quedarnos en una publicación de principios, si ellos no se traducen en algo concreto.
En este documento damos a conocer cuáles son nuestros principios actualizados sobre cambio climático y entregamos ejemplos de acciones que estamos desarrollando en conjunto con nuestras empresas socias, principalmente a través del trabajo de nuestra Comisión de Energía y Cambio Climático.
Principio 1: Reconocer que el cambio climático es un desafío global cuya comprensión y abordaje compromete a todos los actores de la sociedad, entre ellos a la minería, haciéndose necesario transitar hacia un desarrollo bajo en carbono.
En el año 2015 este primer principio era relevante, porque todavía estaba la discusión si el cambio climático era provocado por el hombre o por condiciones naturales. Por eso decidimos aclarar nuestra postura, asumiendo la responsabilidad que le cabe a la minería en la búsqueda soluciones.
En la actualización de este primer principio incluimos la necesidad de transitar hacia un desarrollo bajo en carbono, para dar mayor énfasis a que llegó el momento de adoptar acciones concretas y más ambiciosas.
Principio 2: Apoyar la adopción y el cumplimiento de compromisos globales de mitigación que eviten aumentos de temperatura del planeta por sobre los niveles recomendados por el consenso científico, como el del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC). En nuestra primera versión de este principio nos referíamos a la ratificación del Acuerdo de París.
En esta actualización tomamos una mirada de más largo plazo, haciendo mención a compromisos que lleven al objetivo final de evitar aumentos de temperatura del planeta por sobre los niveles aceptables. De acuerdo a este principio, estamos trabajando en todas las instancias público privadas en la que se analiza el nuevo compromiso sobre cambio climático que debe adoptar el país (NDC) ante la comunidad internacional, con un horizonte al año 2030 y además apuntando a la carbono neutralidad.
Principio 3: Apoyar la implementación en Chile de medidas costo-efectivas para reducir emisiones de gases de efecto invernadero, que no discriminen a priori entre sectores o entre segmentos dentro de un mismo sector. Esto es clave para la minería. No queremos ver medidas de mitigación que se impongan por meras consideraciones políticas o en función de la capacidad de presión de distintos sectores.
Por eso apoyamos con datos concretos las estimaciones de escenarios de emisiones que principalmente elabora el Ministerio de Energía, donde se estudian los efectos de distintas medidas de mitigación, tanto en su aporte a la reducción de emisiones, como sus costos y beneficios sectoriales y a nivel agregado del país.
Principio 4: En particular, apoyar el uso de instrumentos basados en el mercado para reducir emisiones de gases de efecto invernadero y aquellos que propicien la innovación. Este principio deriva de nuestro convencimiento sobre las ventajas de los instrumentos de mercado –bien diseñados–, por sobre el uso de instrumentos de comando y control.
Por eso estamos hemos participado en una mesa de trabajo liderada por los Ministerio de Energía y Medio Ambiente sobre instrumentos de precio al carbono. También hemos sido parte del debate público sobre el proyecto de ley de modernización tributaria, en lo referido al impuesto a las emisiones de CO2.
Principio 5: Promover el uso de recursos renovables y otras tecnologías de baja emisión para la generación eléctrica, sin descuidar los objetivos de suministro económico, seguro y continuo. Las empresas de la gran minería han sido actores claves en la promoción de energías renovables a través de la contratación de suministro eléctrico con ese atributo.
Creemos que podemos avanzar más decididamente en esta materia, a través de la creación de un sistema confiable de certificación para el origen renovable de la energía. Por eso hemos participado en una tercera mesa convocada por el Ministerio de Energía que busca la creación de ese sistema de certificación. Otra mesa de la que fuimos parte es la de retiro de centrales a carbón, que aportó antecedentes para el calendario que finalmente se acordó entre el Ministerio y las empresas..
Principio 6: Profundizar el uso eficiente de la energía y de fuentes energéticas de bajas emisiones en los procesos mineros, compartiendo los avances e innovaciones implementadas.
Nuestro interés por la Eficiencia Energética se manifiesta, por ejemplo, en la suscripción en el año 2014 de un convenio entre el Consejo Minero y el Ministerio de Energía, bajo el cual nuestras empresas socias implementan y/o fortalecen Sistemas de Gestión de la Energía con estándares internacionales, incorporan la eficiencia energética en la evaluación y diseño de sus proyectos, y reportan las iniciativas implementadas y proyectadas en la materia.
Principio 7: Relevar el aporte que hace la minería a la transición hacia una economía baja en carbono, mediante la producción de metales que permiten que la electricidad se genere, transmita, almacene y use más eficientemente. Este principio ha tenido su dinámica propia y hoy ya es común hablar del rol de los minerales en el almacenamiento de la electricidad, en su conducción eficiente y en la producción de paneles solares y turbinas eólicas, por dar algunos ejemplos.
Principio 8: Incorporar la necesidad de adaptación al cambio climático en el diseño y operación de faenas mineras. Uno de los efectos más evidentes del cambio climático son los períodos prolongados de sequía. Por lo tanto, las faenas mineras deben adaptarse a una menor disponibilidad de agua, para lo cual ya han venido aplicando medidas de eficiencia hídrica, junto con el reemplazo creciente de agua continental por agua de mar.
Principio 9: Apoyar medidas de adaptación al cambio climático en las comunidades aledañas a las operaciones mineras, en el marco de los procesos de relacionamiento y creación de valor compartido. Como se dijo antes, uno de los efectos del cambio climático son las sequías.
Otro efecto son los episodios de lluvias esporádicas, pero intensas. Ante esto último la minería debe tomar especiales resguardos en sus tranques de relaves, sobre todo para proteger a poblaciones cercanas.
Con esto en mente surgió el Programa Tranque, proveniente de la Hoja de Ruta Tecnológica de la Minería 2015 – 2035 de Corporación Alta Ley, y cuya ejecución es liderada por Fundación Chile.
Este programa tiene como propósito fortalecer la gestión operacional preventiva de los tranques de relave y mejorar la comunicación y la respuesta ante situaciones de eventuales emergencias. Por otra parte, en mayo de este año el Consejo Minero creó la nueva Comisión de Relaves, compuesta por profesionales de diversos perfiles de nuestras empresas socias.
En esta Comisión se monitorean los avances tecnológicos, se comparten buenas prácticas y se analizan situaciones de crisis, en caso de que existan. Junto con lo anterior, es relevante informar que el Consejo Minero ha puesto a disposición pública, desde hace más de dos años, su Plataforma de Relaves.
Sitio donde las personas pueden acceder a información sobre la ubicación de los depósitos, su estado operativo y permisos, entre otros datos de interés. Principio 10: Participar activamente en las distintas iniciativas públicas y privadas que propicien la búsqueda de medidas para la mitigación, adaptación y fortalecimiento de capacidades en materias de cambio climático, consistentes con los principios anteriormente enunciados.
El cumplimiento de este principio queda explicado por nuestra participación en las diversas iniciativas señaladas a raíz de los principios anteriores. Si bien consideramos que nuestros principios sobre cambio climático nos han dado buenos lineamientos para abordar el tema y de hecho, creemos estar haciendo un buen trabajo, en ningún caso consideramos que sea suficiente.
Aún tenemos que esforzarnos más, por ejemplo en la búsqueda de tecnologías que permitan reemplazar el diésel de los camiones de extracción minera por alternativas más limpias, sabiendo que ahí está la fuente principal de nuestras emisiones directas. Hay iniciativas en curso, individuales y colectivas, relacionadas con el reemplazo de diésel por GNL, hidrógeno o baterías, que esperamos rindan frutos en un mediano plazo.
