La decisión de Mina Invierno de comenzar a paralizar su faena después que se mantuviera una medida precautoria respecto de la utilización de explosivos, generó una ola de reacciones en la industria. Mientras en el plano local los gremios encienden las luces de alerta de lo que está pasando -porque además de la minería hay otras decisiones que podrían afectar a las salmoneras, área que aporta cerca del 20% del PIB local-, a nivel el gobierno central señaló que seguirán dando una pelea judicial para defender su autorización a las tronaduras.
La decisión de paralizar las faenas fue interpretada como un camino sin retorno al cierre de la operación, algo que según quienes se oponen a la iniciativa es una medida de presión al Tribunal Ambiental.
Mientras, se comienza a dar forma a mesas de diálogo locales donde la intendencia pretende consensuar una visión común, donde la minería, el turismo, la salmonicultura, ganadería, entre otros, logren desarrollarse. Alejandro Fernández, gemines: "La región tiene un problema serio de perspectivas de desarrollo"
El economista Alejandro Fernández, de la consultora Gemines, tiene una estrecha relación con la región y plantea algunas claves de lo que está pasando.
- ¿Cómo se ha visto la evolución de la economía de la región de Magallanes, en especial con la entrada en funcionamiento de Mina Invierno en 2013
- El impacto de Mina Invierno sobre la economía magallánica ha sido considerable. Si se evalúa su efecto desde que se iniciaron las faenas previas al inicio de la producción efectiva de carbón, estimamos que representó del orden de 1% del PIB regional por año entre 2010 y 2015. El impacto posterior (2016-19) no lo conocemos, pero no hay razones para pensar que haya sido significativamente inferior al de los años anteriores. La evidencia disponible, en definitiva, indica que su impacto ha sido muy relevante, no obstante tratarse de una empresa en un sector relativamente pequeño de la economía regional. La paralización completa del yacimiento tendrá un efecto negativo, por una vez, significativo.
- ¿Qué efecto ha tenido en el empleo y cuál podría ser el impacto?
- Para el período 2010-15, nuestra estimación es que el efecto directo e indirecto sobre el empleo regional ha sido de 1,4% del total, con un impacto mayor aún sobre la masa de salarios pagados, toda vez que la remuneración bruta promedio, en pesos de 2019, era de más de $2 millones por trabajador.
Es muy difícil que los trabajadores de la mina puedan reubicarse dentro de la región con remuneraciones similares. Algunos podrán hacerlo en la construcción, pero con sueldos menores.Es probable que muchos deban emigrar
-A nivel general, ¿cómo se ve la región?
- La región tiene un problema serio de perspectivas de desarrollo hacia delante. Con el carbón fuera del cuadro y la salmonicultura con fuertes restricciones para crecer, la región se queda sin sectores que lideren y empujen el carro de la economía regional. Los hidrocarburos están en una situación de estancamiento o declinación en una perspectiva de futuro; el metanol ha reducido su importancia; la ganadería tocó techo hace muchos años.
Por último, el turismo, el sector que se ha desarrollado más en los últimos 20 o 30 años, también enfrenta desafíos importantes que hacen inciertas sus perspectivas de crecimiento en ausencia de una política clara para potenciarlo. En definitiva, la región ha tendido a perder importancia respecto del país tanto en población como en participación en el PIB. Estas tendencias probablemente se acentúen en el futuro y la dependencia que hoy día tiene del gasto público aumentará, lo que no permite ser muy optimistas respecto del futuro regional.
Preocupación muestra el intendente de Magallanes, Jorge Fernández, respecto a lo que está ocurriendo en la región.
- ¿Cómo ve la paralización de Mina Invierno?
Para nosotros como gobierno esto es preocupante porque nos va a dejar un número de cesantes importantes en la región, los que además son calificados y la reubicación va a ser difícil. Eso es lo que estamos trabajando. Las Seremis de Minería y de Trabajo están viendo la certificación de competencias para un grupo que aceptó esto, pero vamos a tener que integrar a otros grupos.
- ¿Cuál es el estado de la región?
La región está en un buen estado económico, pero por la crisis argentina se ha notado una baja en el comercio. Si a eso le sumamos 1.000 personas que van a quedar sin empleo por la paralización, va a tener un impacto.
-Fuera de la minería, también se han visto problemas con los salmoneros...
El tema de los salmones también es preocupante. Lo que más preocupa es un proyecto de ley en el Senado que prohíbe actividad económica dentro de áreas protegidas y se puede causar a un problema.
- ¿Hay mucha oposición a la salmonicultura?
Hay una parte que es más mediática del conflicto, pero en otras zonas se está favor por el empleo. La gente del turismo está más en contra por el impacto, pero hay que aprender a compatibilizar. Junto a la Seremi de Economía estamos viendo cómo conformar mesas de trabajo para abordar el tema.
Alejandro Kusanovic, CPC de Magallanes: "Se está sacrificando el futuro energético de la región" Un sombrío análisis realizó el presidente de la Confederación de la Producción y Comercio de Magallanes,
"Como magallánico me parece lamentable esta situación. Más allá del problema que genera la pérdida de puestos de trabajo, se está sacrificando el futuro energético de la región... Hoy Magallanes no tiene certeza de energía, a futuro cualquier empresa que se quiera instalar no se le puede asegurar el suministro de energía a bajo costo para poder operar", dijo.
El líder empresarial lanzó sus dardos contra el mundo político y la "profunda desconexión que tienen con la realidad local". "Hay un mala percepción de populismo que creen que siendo ecologista la gente va a votar por ellos. Y la gente lo que quiere es trabajo y desarrollo, usar la última tecnología posible para contaminar menos, pero no quiere que no se haga nada", enfatizó.
Sobre un eventual acercamiento con la autoridad para analizar la situación de la región, dice que ya han informado de los efectos para el empleo y el desarrollo de la zona a la autoridad central, de hecho la semana pasada se reunieron con el subsecretario de Economía, Ignacio Guerrero.
"Ya hemos hablado con el intendente y con el gobierno, pero tienen que atreverse a tomar decisiones, de repente acá estamos jugando al ´123 momia es´ y nadie quiere tomar una decisión porque todos tienen miedo de hacerlo y eso me parece catastrófico", dijo.
Matías Asún, director de Greenpeace, quien explica su visión del conflicto y las oportunidades que -a su juicio- abre a la región un modelo de desarrollo diferente.
- ¿Cómo ven la situación que se ha generado en torno a la paralización de Mina Invierno?
- Primero, el rumor de que la mina puede paralizarse lleva dos años. Creemos que esto es una modificación sustancial al proyecto original, con otros niveles de impacto. Nosotros vemos que esta es una de las operaciones más oscuras para evaluar un proyecto sin transparentar todos los efectos. Con tronaduras, el proyecto original no se habría aprobado en 2011.
- ¿Se argumentó que hubo un cambio en el mercado que lo justifica?
Las condiciones del mercado cambiaron hace más de diez años. Cuando el proyecto estaba en estudio, el precio del carbón ya había bajado y eso nos llevó a señalar que se iban a requerir explosivos.
- También se cuestiona a las salmoneras, ¿cómo crece una región sin estas industrias?
- ¿Quién quiere ir a ver playas repletas de plástico y escuchar tronaduras en un parque nacional? Eso atenta contra industrias sustentables. Hay que impulsar planes integrados en una economía sostenible, que favorezca una acuicultura local, se fomente el turismo local. . Esto no es ciencia ficción, se puede hacer.
Como una demostración del error al que pueden llevar consignas calificó ayer el presidente de la Sofofa, Bernardo Larraín Matte, la paralización de la Mina Invierno.
A su juicio, es "profundamente equivocado" plantear que no es posible aprobar una operación minera de carbón en un país que organizará la cumbre COP25. Si bien Chile inició un camino de descarbonización, acotó que en los próximos 20 años habrá una transición y se seguirá requiriendo generación térmica a carbón.
Otro punto, planteó el dirigente, es la institucionalidad ambiental. "Cómo es posible que un proyecto que tenía un permiso ambiental refrendado por todos los servicios técnicos (...) frente a una legítima reclamación de un vecino, pone una precautoria que paraliza la operación. ¿No debiera ser al revés?".