El Banco de Desarrollo del Perú (Cofide) ha valorizado en US$175 millones su cartera que califica como proyectos para financiamiento verde, afirmó el gerente general de la entidad estatal, Alex Zimmermann.
“Como banco de desarrollo, desempeñamos un papel importante y decisivo, para impulsar y generar el cambio en la industria y mitigar los costos asociados a los proyectos de mejora energética, a través de programas de financiamiento verde”, señaló.
Actualmente, Cofide está trabajando para emitir su primer bono verde, que orientará a financiar proyectos de ese tipo en Perú. Para ello, viene gestionando la certificación de bono verde gracias al soporte del BID.
“Con la asistencia técnica del BID Invest, estamos preparando una pronta emisión de bonos verdes, a fin de romper esa brecha en Perú donde solo el 3% de emisiones del mercado local son bonos verdes”, anunció Alex Zimmermann.
“El paso siguiente es salir al mercado en función al stock de proyectos. Cofide tiene identificados más de 175 millones de dólares en proyectos que califican como Green y otros US$200 millones adicionales que califican como Light Green”, agregó.
De acuerdo a la metodología de certificación del bono verde, este se califica en cuatro categorías: Green (categoría 1), Light Green (categoría 2), Potential Green (categoría 3) y los No elegibles (categoría 4, que requieren otros indicadores para saltar a una categoría superior).
Brecha de infraestructura. Cofide viene impulsado el cierre de la brecha de infraestructura en Perú. Entre los años 2012 y 2018, el Banco de Desarrollo del Perú ha financiado US$993 millones, apalancando proyectos por un valor de US$3.044 millones, es decir, una participación de 3 a 1 con el sector privado.
“Hay muchísimo que califica como cartera verde, dentro del stock de los últimos seis años. Catalizamos la inversión privada e internacional. Por cada dólar que ponía Cofide, hubo 2 dólares de los operadores privados”, indicó Zimmermann.
Por último, Cofide cuenta con la identificación de indicadores de impacto social para un porcentaje de su cartera de proyectos que se divide en seis sectores: Agricultura; Transporte público y urbano; Infraestructura vial; Energía (hidroeléctricas, termoeléctricas, renovables); Aguas Servidas; conversión de automóviles a gas (Cofigas).