CRISTIAN NAVAZO

YPF lleva adelante los trabajos de acondicionamiento del muelle en Bahía Blanca en el que amarrará la barcaza Tango FLNG, que permitirá a la Argentina exportar gas natural licuado (GNL) por primera vez en su historia y colocar la producción de Vaca Muerta en un mercado global de 40 países importadores. El objetivo de la compañía controlada por el Estado es que el negocio comience a operar a mediados de abril.

La barcaza, que arribó al país el 3 de febrero, es una unidad flotante de la empresa belga Exmar con una capacidad de almacenamiento de 16.100 metros cúbicos de GNL y de licuefacción de 2,5 millones de metros cúbicos diarios (MMm3/d).

Además de la preparación técnica del muelle alquilado a Compañía Mega, de la que es parte la petrolera controlada por el gobierno desde que se reestatizó la mayoría accionaria, los trabajos incluyen el montaje de una planta deshidratadora que acondicionará el gas para inyectarlo en la barcaza y un puente de medición.

Se trata del primer proyecto flotante de exportación de GNL en América Latina, que permitirá exportar el fluido en los meses de menor demanda en Argentina y aprovechar la estacionalidad para abastecer a mercados del hemisferio norte.

YPF estima que conseguirá por esta vía unos 200 millones de dólares al año. Las ventas fuertes al exterior se activarían recién en el verano, puesto que en los meses más fríos la producción de gas nacional se reserva para el mercado interno.

La infraestructura permitirá exportar gas por u$s 200 millones anuales

Según fuentes del mercado, se evalúa la posibilidad de que durante el invierno la barcaza se utilice para inyectar gas en la Terminal de GNL de Escobar, en la provincia de Buenos Aires, para suplir parte de las importaciones.

YPF y la empresa estatal Integración Energética Argentina (IEASA) ya terminaron los trabajos que permitirán elevar de 17 millones de metros cúbicos diarios (Mm3/d) a 22 MMm3/d la inyección de gas desde Escobar en el invierno. Se instaló equipamiento que permite hacer más eficiente la operación y tener un importante ahorro en el GNL que se consume para llevar a cabo el proceso de regasificación.

Las tareas se realizaron contra reloj para subsanar el error de dejar marchar al barco Excelsior, de la compañía norteamericana Excelerate Energy, que estaba amarrado en Bahía Blanca en el mismo muelle que hoy ocupa la barcaza Tango FLNG. La despedida del buque estadounidense, mediante un acto encabezado por el presidente Mauricio Macri para marcar un contraste con el gobierno kirchnerista, fue apresurada.

Según consta en un informe reservado del Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas), en los meses fríos de 2019 la producción local de gas, junto con importación de gas de Bolivia y de GNL en Escobar, no será suficiente para abastecer la demanda doméstica. De hecho, se pensó en elevar la capacidad de la terminal de Escobar a 30 MMm3/d, pero por los tiempos que demandarán los trabajos no se podrá lograr hasta 2020. Para inyectar ese volumen será necesario montar un nuevo brazo de descarga en el barco anclado en el muelle de la localidad bonaerense, además de realizar obras en el gasoducto de TGN en Cardales.

Aún no se definió si el Excelsior volverá a prestar servicio en Bahía Blanca. Si regresa, YPF deberá dejarle el espacio en el muelle para que pueda operar.