DANIEL SANTORO
El ex directivo de PDVSA, Gonzalo Brusa Dovat, denunció que la sucursal argentina de la petrolera venezolana fue “usada para triangular y lavar divisas” con la complicidad de funcionarios K y una conexión uruguaya.
En una entrevista exclusiva con Clarín, Brusa Dovat -que fue director de logística de PDVSA Argentina entre el 2010 y el 2014- explicó supuestas maniobras de triangulación de compras con ENARSA, otras para robarse combustible a ser comercializado en la Argentina y venta de nafta a precios menores del mercado a estaciones de servicios que están a nombre de testaferros. Brusa Dovat afirmó que renuncia a la empresa “bajo amenazas”, luego de que Maduro mandara sus propios gerentes para reemplazar a los que había nombrado Chávez.
Dio los nombres de sus interlocutores argentinos que respondían “al ministerio de Planificación” que manejaba Julio De Vido, entre otros.
-¿Usted conoce irregularidades en los negocios de PDVSA en la Argentina?
-Luego del escándalo de la valija de Antonini Wilson con 800 mil dólares, echan a Diego Uzcátegui de la PDVSA Argentina y se empieza un proceso para instalar la marca en la Argentina en asociación con ENARSA. PDVSA Argentina tenía el 47,5 por ciento de las acciones de petrolera del Cono Sur S.A. Y la empresa estatal uruguaya Ancap tenía un 45 y el resto de las acciones de vendía en la bolsa. Se hizo un acuerdo con 117 estaciones de servicio de Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba. Pero en el 2010 ANCAP le vende a PDVSA Argentina su acciones por 1 dólar. Entre el 2006 y el 2009 se le compraba el combustible a YPF-Repsol. Pero en el 2010, se empieza a importar gas oil y a comprarle la nafta a Axtion y así abastecer a las estaciones de servicio. Yo como gerente de Logística y Compras. La casa central de PDVSA decidía a qué empresa comprarle los buques con gas oil, que en su mayoría era de la suiza... Un importante estudio jurídico argentino sería representante de esa empresa suiza en la Argentina.
-¿Pero cómo eran las maniobras?
-Necesito darle otra introducción. En la descarga de combustibles siempre hay una merma, una pérdida por lo que queda, por ejemplo, pegado en los caños que usan los barcos. El promedio de la merma aceptada comúnmente es del 5 por ciento, pero a mi me exigían que fuera del 3 por ciento. En promedio, quedaban unos 200 metros cúbicos por buque que no eran cargados en los camiones oficiales, sino en otros que los desvían donde los capos de PDVSA querían para sus negocios particulares. Así ganaban unos 200 mil dólares por barco y como recibíamos, en promedio, unos 24 por año, se llevaban 4.800.000 dólares al año. Por otra parte, muchos de estos barcos no los compraba PDVSA Argentina directamente sino que lo hacía ENARSA y luego nosotros le compramos a ENARSA. El ex presidente de ENARSA Exequiel Espinosa y su gerenta Marcela Tagle saben de estas compras.
-¿Y las otras supuestas maniobras cómo eran?
-Los capos de PDVSA Argentina y de un importante estudio jurídico que, por ahora, no puedo nombrar, tenían, a través de testaferros, estaciones de servicio propias. A estas les mandaban los combustibles con precios en un 40 por ciento más barato. Y la tercera maniobra que conozco es que la casa central de PDVSA envió entre el 2010 y el 2012 todos los meses subsidios a PDVSA Argentina para comprar buques de gas oil cuando, en realidad, con las ganancias los combustibles de los primeros buques se podrían haber pagado los siguientes porque funcionaba como una rueda financiera. Así se quedaban con entre 25 y 50 millones de dólares por año, depende del año. Todas estas “ganancias” salían del país ilegalmente a destinos que no conozco pero se pueden investigar a través de las cuentas personales de estos personajes.
¿Sabe con qué bancos, financieras o cuevas financieras operaba PDVSA Argentina?
Las cuentas oficiales las manejaba el Banco Nación, donde estaba el fideicomiso, y los bancos Galicia, Francés, Macro y Credicoop. Pero no sé con qué cuevas financieras manejaban la plata negra.
¿Qué destino le dieron a esa plata negra?
Era una millonaria “caja” que creo usaban para la política y sus bolsillos personales.
¿Los venezolanos que manejaban PDVSA Argentina con qué funcionarios argentinos tenían trato?
Con los del ministerio de Planificación, la secretaría de Energía y, también, con Walter Fagías de ENARSA..
¿Quiénes eran esos capos venezolanos que manejan los negocios?
Eran fundamentalmente Angel Morales, que ahora vive en Tenerife, y Nelson Martínez quien falleció recientemente en EE.UU. Angel Morales fue enviado después del escándalo de la valija del 2007 y su reemplazante en 2011 fue Martínez. A Morales, me contaron, lo echaron después de que se quejó por un porcentaje de una coima. Martínez era un ingeniero químico que ayudó a Chávez en el golpe del 2002 con el look out contra PDVSA y luego fue premiado con la presidencia de la sucursal argentina. Luego de que Nicolás Maduro reemplazó a Chávez en el 2013, se cambió de política. Antes el presidente, el vicepresidente y gerencias claves eran venezolanos. Con Maduro se mandaron funcionarios para menores niveles y ahí me echaron a mi y a otros 7 compañeros. Cuando se va Martínez en el 2014 para dirigir CITGO en Estados Unidos, Morales es nombrado asesor externo del entonces presidente Miguel Tarazona y nos empieza a perseguir. Recibí distintos aprietes. Desde amenazas telefónicas a mi hija menor a seguimientos y dejaron un auto estacionado frente a casa durante días.
¿Usted cree que fue amenazado por el SEVIN, el servicio secreto chavista?
No lo sé con pruebas, pero tanto la embajada en Buenos Aires como la sucursal de PDVSA tienen influencia del SEVIN.
Explíqueme cómo fue que Ancap de Uruguay le vendió sus acciones en Petrolera Cono Sur a PDVSA por un dólar.
Eso fue en la presidencia de Pepe Mujica. Cuando Raúl Sendic era presidente de Ancap se hizo esa operación. Sendic, luego vicepresidente de Tabaré Vázquez, luego renunció por otro escándalo. Lo cierto es que Angel Morales, luego de ser removido de su cargo en la Argentina, se instaló en Uruguay y creó una empresa para vender granos y otros productos a Venezuela. Sus socios en esa empresa era un tal Mollo y Carlos Veríssimo era su socio en otros negocios. Veríssimo es la mano derecha del intendente de Maldonado, Enrique Antia. El año pasado, Angel Morales, ya sin apoyos, se fue a vivir a Mayorca desde donde me mandó amenazas como una que decía “vas a aparecer muerto en Tucumán”.
¿Tiene documentación que respalde sus dichos?
Tengo documentación y mails guardados bajo siete llaves y los nombres de los testaferros de la venezolanos que los daré si me llama a declarar la Justicia.