El mítico yacimiento cuprífero detuvo su profundización que hoy tiene 1.100 metros, por su aproximación a las obras del proyecto subterráneo.
El domingo 9 de septiembre de 2018 quedará marcado en la historia de todos los que, de una u otra forma, han sido parte de los 103 años de existencia de Chuquicamata. Esto porque en el fondo del rajo mina se vivió la última tronadura, un nuevo hito en la transformación que vive la división de Codelco y que le permitirá seguir aportando recursos al Estado, explicaron desde la minera.
“Este hito implica que desde ahora en adelante las tronaduras se realizarán solamente en la Fase 49, que corresponde a la última fase del rajo”, explicó el superintendente (i) de Perforación y Tronadura, Sergio Segovia, quien agregó que dada la profundidad del fondo mina, que ya se acerca a las labores subterráneas y de acuerdo a lo planificado, “ya no se harán otras detonaciones en ese sector deteniendo así la profundización”, informó El Mercurio de Calama.
Antes de la cuenta regresiva para el tiro se dieron a conocer algunos hitos relevantes del rajo, como por ejemplo, que el polvorazo más grande realizado fue en octubre del año 1985, donde se removieron dos millones y medio de toneladas de material desde la mina.
Parte del cambio
En 103 años de historia Chuquicamata vive un proceso de transformación que no sólo involucra el cambio en el método extractivo, de rajo a subterránea, sino que también un vuelco en la forma de ver el futuro y en cómo se hacen las cosas, contextualizaron en la estatal.
Todo bajo el entendido que, si la empresa no se transforma, pone en riesgo su supervivencia. Esto de acuerdo a sus resultados actuales y las complejas proyecciones del negocio hechas por Codelco.
En este contexto, desde la división informaron que el rajo mantendrá su movimiento, pero sólo se trabajará la fase 49, donde paulatinamente irá disminuyendo la cantidad de tronaduras hasta mediados del 2020 cuando está proyectado que detone el último tiro en el rajo, que ya tiene una profundidad aproximada de 1.100 metros. “La cantidad de tronaduras se irán reduciendo. Actualmente, se realizan 20 días al mes, lo que se mantendrá hasta el primer semestre del año 2019 y desde allí, probablemente se reduzca tal vez a unos 10 o 15 días al mes”, explicó Sergio Segovia.