“FXEmpire” ha analizado recientemente algunas de las causas que han incidido en la bajada continuada del precio del oro en los últimos dos meses, coincidiendo con la llegada del verano, hasta llegar a un precio de 1.207 dólares por onza según el Fixing de Londres.
El pasado 14 junio el oro cotizaba a 1.305 dólares la onza en el Fixing de Londres. Desde entonces no ha parado de bajar. Así hasta los 1.207dólares la onza (el ratio más bajo del año) que se produjo el 3 de agosto, fecha a partir de la cual el rey de los metales inició el, por ahora, ligero y continuado ascenso hasta los 1.215 dólares de hoy 9 de agosto.
Según la publicación digital “FXEmpire”, editada en Israel, “un dólar más débil está ayudando a apuntalar el mercado del oro desde el martes 7 de agosto”. Una disminución de las tensiones sobre la disputa comercial entre Estados Unidos y China puede estar llevando a una mayor demanda de activos de mayor riesgo. Esto podría estar animando a los inversores, que compraron el dólar la semana pasada, a protegerse y reducir sus posiciones de refugio seguro en la moneda estadounidense.
La actual disputa comercial entre Estados Unidos y China también ha estado ejerciendo presión sobre los precios del oro. A medida que aumentan las tensiones, los inversores han estado moviendo dinero hacia la “seguridad” del dólar, lo que ha provocado una demanda extranjera de oro denominado en dólares más débil.
Si las tensiones sobre la disputa comercial continúan disminuyendo, entonces el oro podría encontrar compras, ya que es probable que pese en el dólar, precisó
Según los informes del gobierno, el interés abierto en el lado largo del mercado del oro ha alcanzado un mínimo de 2 años y medio, mientras que los fondos de cobertura aumentaron las apuestas sobre un dólar alcista por primera vez en un año. Todo se reduce a problemas de liquidez en el mercado del oro.
Simplemente no hay liquidez o dinero que fluya al oro porque los fondos de cobertura creen que un aumento en el dólar es una apuesta más segura, dado que es probable que la Fed suba los tipos de interés al menos 2 veces más este año y posiblemente 3 veces más el próximo año.
Las expectativas de aumento de tipos de interés están comenzando a hacer que las acciones sean una inversión menos atractiva. Por lo tanto, el proceso de asignación de mover dinero de las acciones a los bonos del Tesoro y al oro está apenas comenzando y es probable que continúe hasta que los inversores hayan realizado los ajustes en sus carteras que los lleven a un nivel de comodidad.
Parece ser que en los ámbitos del metal dorado se presagian mejores momentos; sobre todo desde que hoy, jueves 9 de agosto, el precio Fixing y el Spot coinciden en el inicio de una remontada. Eso quiere decir que, si miramos hacia atrás, nos llegará el aliento que emana de los morros de los toros que han vuelto a salir de chiqueros y vienen empujando.
El flujo de noticias positivas es muy sólido, y también lo es el precio del oro que, tras unas semanas de incertidumbre, desde el 15 de junio, comienza a remontar.
Algunos analistas internacionales coinciden en que este aciago verano de gravísimos incendios en Europa (Grecia, Portugal, España) y Estados Unidos (California); además del aumento en el Mediterráneo del flujo de pateras, barcos, cayucos, etc., cargados de personas que buscan el “paraíso” fuera de sus países de origen; mantenimiento de los conflictos bélicos en Oriente Medio; y un largo etcétera, no ha sido causante del desajuste en el precio del oro.
Por ahora, no existe riesgo en el sistema de vida occidental, pese a que va de mal en peor. Tampoco hay temblores ante el aumento de la inflación global, o en el fortalecimiento comercial de Rusia, China e India. Por el momento, Estados Unidos no tiembla, o al menos mantiene el tipo.
Es decir, puede haber más incertidumbre en los países “capitalistas” (¿es que China lo es ya con más multimillonarios que Estados Unidos?), que en los cada vez más poderosos países emergentes.
Crece continuamente la demanda de oro en Asia. En China, esa demanda es espectacular, tanto en lingotes, monedas y joyas. En la India aumenta las peticiones de más metal dorado, bien por las vías oficiales o por las del contrabando.
Por tanto, las embestidas de los osos de este tiempo atrás han sido por otras causas diferentes. Si bien los aranceles estadounidenses son una preocupación a corto plazo, a largo plazo es absolutamente imposible que una población norteamericana, de alrededor de 350 millones de habitantes, compita con 3 mil millones de indios y chinos.
“La era del toro de oro es real y está comenzando ahora”, dice entre otros el analista James Hyerczyk. Para añadir que “Es muy importante que la nueva generación de inversores de oro esté bien diversificada en todos los sectores de la clase de activos de metales preciosos”.
GD