A pedido de Donald Trump, el reino se prepara para "enfrentar en el futuro cualquier fluctuación del mercado" produciendo hasta dos millones de barriles al día extras para mantener el precio. Estados Unidos pide a todos los países que comercian con Teherán que cesen sus operaciones a partir de noviembre.
Arabia Saudita, primer exportador mundial de petróleo, confirmó que está dispuesta a utilizar su capacidad de producción disponible para la extracción de crudo como había solicitado Estados Unidos, para así compensar una posible reducción de la oferta luego del bloqueo a Irán por el restablecimiento de las sanciones.
"Arabia Saudita está dispuesta a utilizar, si hay necesidad, su capacidad de producción para enfrentar en el futuro cualquier fluctuación del mercado", indicó en un comunicado el Consejo de ministros, tras una reunión ordinaria presidida por el rey Salman.
Este anuncio confirma lo informado en este sentido por el presidente estadounidense Donald Trump y la Casa Blanca.
El mandatario estadounidense había afirmado en un tuit que Arabia Saudita podría aumentar su producción para "compensar" caídas en Irán y también Venezuela.
"Acabo de hablar con el rey Salman de Arabia Saudita y le expliqué que, por los desequilibrios y disfuncionalidades en Irán y Venezuela, le estoy pidiendo a su país que aumento la producción de petróleo, quizás hasta dos millones de barriles, para compensar la diferencia. ¡Los precios están muy altos! ¡Él está de acuerdo!", expresó Trump.
La Casa Blanca y el reino sunita se han esforzado en moderar su mensaje, afirmando que estos dos millones de barriles son los recursos que serían utilizados, "si fuera necesario, para asegurar el equilibrio y la estabilidad del mercado".
"El presidente (Trump) impulsa a Arabia Saudita a compensar las bajas de la oferta que habrá en el mercado cuando sean aplicadas las sanciones estadounidenses contra Irán, a partir del 4 de noviembre próximo" explicaron analistas del RaboBank.
Washington instó a todos los países, incluso China e India, grandes clientes de Teherán, a cesar sus importaciones de petróleo iraní de aquí al 4 de noviembre, bajo la amenaza de exponerse a las sanciones estadounidenses restablecidas en mayo por Washington al salir del acuerdo internacional sobre el programa nuclear iraní en 2015.
FP/Jc