El ministro de Hacienda de Brasil, Eduardo Guardia, dijo que la venta de las distribuidoras deficitarias es el primer paso para el saneamiento de la estatal de energía y "fundamental para el suministro de energía eléctrica en seis regiones del país".
El ministro de Hacienda de Brasil, Eduardo Guardia, dijo que la privatización de seis distribuidoras de la empresa estatal Eletrobras "es fundamental" y que espera que el proyecto de ley para permitir la operación sea aprobado por la Cámara de Diputados la próxima semana.
En un acto realizado en la Asociación Brasileña de Entidades de Mercados Financiero y de Capitales (Anbima) en Sao Paulo, Guardia subrayó que la venta de las distribuidoras deficitarias es el primer paso para el saneamiento de la estatal de energía, informó diario Xinhua.
"Es fundamental, no sólo para el suministro de energía eléctrica en seis regiones del país, sino también para avanzar en la solución de la mejora de Eletrobras", declaró.
El proceso de privatización de las distribuidoras de Eletrobras incluye la Compañía de Electricidad de Acre (Electroacre), Centrales Eléctricas de Rondônia (Ceron), Boa Vista Energía, Amazonas Distribuidora de Energía (Amazonas Energía), Compañía Energética de Piauí (Cepisa) y Compañía Energética de Alagoas (Ceal).
Para hacer viable la venta a corto plazo, el gobierno brasileño necesita que el Congreso apruebe una solicitud de urgencia para la tramitación del Proyecto de Ley 10332/2018, presentado por el Ejecutivo.
Este proyecto sustituye un decreto anterior que alteraba las leyes del sector eléctrico y preveía la privatización de las distribuidoras, pero perdió validez el 31 de mayo pasado.
Eletrobras representa el 32% de la capacidad instalada de generación de energía brasileña.
Actúa en la distribución en seis estados de las regiones norte y noreste, además de ser responsable del 47% de las líneas de transmisión de energía del país sudamericano.
La estatal tiene plantas de varios tipos de energía como eólica, nuclear, solar y termonuclear, pero las que se destacan son las hidroeléctricas.
El gobierno posee el 63% del capital total de la empresa y su privatización también contempla la venta de las seis distribuidoras, así como de subsidiarias de transmisión y energía eólica.
El gobierno brasileño impulsa la capitalización de Eletrobras, empresa de capital abierto que cotiza en la Bolsa de Valores de Sao Paulo y de Nueva York, con la dilución de la participación estatal en la compañía.
El proceso de privatización se detuvo el mes pasado, después de que la justicia brasileña estableciera un plazo de 90 días para que los gestores presenten un estudio sobre su impacto.
El Ministerio de Hacienda estima que con la privatización de Eletrobras ingresarán a las arcas públicas cerca de 12.000 millones de reales (US$3.200 millones).
FP/JC