El presidente de la República del Perú, Martín Vizcarra, afirmó que en el país el desarrollo minero debe ir de la mano con el desarrollo social, por lo que se necesita una mayor articulación con la empresa privada para atender a las necesidades de la población.
Durante la clausura del XIII Simposium Internacional del Oro y la Plata, organizado por la Sociedad Nacional de Minería Petróleo y Energía, el mandatario recalcó que se deben sumar todos los esfuerzos para llegar a las comunidades y conocer sus carencias, reseñò Andina.
“Hay convicción desde el Estado de acompañar a las empresas a hacer realidad sus proyectos con una presencia fuerte y decidida para generar la riqueza que necesitamos, que salga del subsuelo a la superficie; de esta manera vamos a lograr un desarrollo minero ejemplar, lo que queremos es un desarrollo social que vaya de la mano”, dijo.
El mandatario subrayó la necesidad de tener también una presencia “completa e integral” como Estado, en el territorio nacional, para atender las necesidades reales de la población y sacar a más personas del flagelo de la pobreza.
“Queremos que finalmente se llegue a un equilibrio con todos los sectores, que no haya actores contrapuestos, estamos convencidos del gran potencial minero que debe ponerse en valor y generar progreso para todos los peruanos”, sostuvo el presidente Vizcarra.
Indicó que no se puede permitir que la población cercana a los proyectos mineros registren altas cifras de pobreza, teniendo en el subsuelo una gran riqueza que debe dar beneficio a todos los peruanos.
“En algunas regiones, que tienen tradición minera, tienen indicadores sociales muy bajos, tenemos regiones con porcentajes de 50% de pobreza de la población donde hay una presencia fuerte de la minería, entonces tenemos que cambiar esta situación y lo vamos a hacer”, recalcó el mandatario durante la clausura del simposium.
El presidente recalcó además que la brecha de infraestructura en el país es enorme, pero esta se cerrará impulsando la inversión privada, que generará mayores ingresos al país.
Antes del discurso de Vizcarra, Luis Marchese, presidente de la SNMPE, destacó que las empresas tienen un enfoque de gestión social más sistemático.
Para ello exhibió una encuesta sobre el número de empresas mineras que disponían de instrumentos orientados a dicho enfoque. Por ejemplo, el 92% respondió que disponían de estándares y políticas de desempeño social corporativo; el 96% cuenta con una estrategia documentada para orientar sus inversiones de gestión social, precisó Semana Económìca
“La valoración propia de las empresas mineras es bastante alta. Hay que contrastar esa mirada desde la empresa con un estudio que deberíamos hacer sobre las comunidades en el entorno de la minería”, advirtió.
Para el presidente existe una brecha entre la percepción de las empresas mineras sobre sí mismas y lo que perciben las comunidades. “En la medida que acortemos esa brecha de percepción con la población, lograremos que se involucre en este proceso que da tantos beneficios al país. No hemos logrado la percepción en la población sobre los riesgos ambientales y los riesgos de contraposición con las actividad económicas que existen en esas jurisdicciones, previas al desarrollo minero”, comentó y puso como ejemplo la agricultura.
Finalmente, Marchese, de la SNMPE, informó que en los últimos 17 años las empresas mineras distribuyeron S/41,000 millones en canon y regalías a las regiones. “¿Estamos satisfechos los peruanos con el uso de esos recursos? ¿Hay oportunidades de mejora?”, se preguntó.
Anunció que en las próximas semanas presentarán un estudio sobre el uso de esos fondos en los gobiernos subnacionales.
Cotización del oro llegaría a US$ 1,400
Especialistas de Metals Focus, Scotiabank, Credit Suisse y Grupo CRU del Reino Unido adelantan sus expectativas del metal precioso a futuro.
La cotización del oro alcanzaría los US$1,400 por onza hacia el cuarto trimestre del año, proyectó Philip Newman, director de Metals Focus del Reino Unido, reseñó Gestión.
Durante su presentación en el 13 Simposium del Oro y la Plata, de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE), precisó que el incremento del precio del metal precioso sería el resultado del comportamiento de la economía de Estados Unidos.
En ese sentido, estimó que el precio podría inclusive llegar a US$1,500 en el 2019 o 2020.
“En cuanto a la plata, creemos que su desempeño ha sido bastante superior y podría llegar alrededor de US$ 20 por onza y seguir subiendo quizás hasta US$ 21”, anotó.
Esta perspectiva alcista la compartió el economista de Scotiabank, Rory Johnston, quien prevé una cotización de US$1,300 para el metal dorado, en el corto plazo.
“Alcanzaría US$1,400 sobre todo si existe una rotación del oro que va a ingresar en la comunidad industrial”, refirió.
Aunque mencionó que cuando se normalicen las tasas de interés en Estados Unidos y en Europa, combinado con el proceso de crecimiento en un plazo más largo,el precio del oro podría comenzar a bajar.
Para Rafael Wyss, asesor principal de divisas y moneda de Credit Suisse de Suiza, el valor de la onza de oro podría estar en US$1,250.
Advirtió que inclusive podrían presentarse volatilidades que lleven las cifras a la baja. “En tres o cuatro años US$1,200 podría ser un precio razonable” indicó.
En tanto, Kirill Kirilenko, analista de Metales Preciosos del Grupo CRU de Reino Unido, dijo que su visión gira en torno a US$1,250 y US$1,350 en 2019.
Consideró que en dos o tres años podría tener un momento de alza que luego comenzará a normalizarse. “Siempre habrá demanda para el oro, como una póliza, un refugio seguro”, dijo.
Los expertos comentaron que los Bitcoin son inversiones aún muy frágiles y que no son vistas como un instrumento financiero seguro.
Johnston comentó que se espera que el crecimiento de la economía global sea fuerte en los próximos años y que hay un surgimiento de la demanda.
Al respecto, Wyss opinó que mientras las tasas de inflación estén en el orden de 2% o 3%, la volatilidad no afectaría el oro, pero si la inflación se dispara, sí puede haber un impacto.
A su turno, Kirilenko afirmó que se deben considerar también las tasas de interés que son un costo de oportunidad para el oro.
“Lo interesante es que cuando las tasas suben, el precio de este metal no siempre sufre. Por ejemplo en los 80 hubo una inflación rampante en EE.UU., 10% o más, sin embargo, el oro subió al mismo tiempo y la Reserva Federal (FED) empezó a subir los niveles de interés, lo que dio oportunidad a las personas de comprar y este fue uno de los picos de la historia de este metal”, puntualizó.
El CEO de la canadiense Pan American Silver, Michael Steinmann, instó a las compañías que participan en el 13° Simposio del Oro y de la Plata a “tomarse el tiempo” para identificar las reservas que necesitarán para extender la vida útil de las minas que operan. El ejecutivo señaló que en los últimos 14 años su compañía ha reemplazado todas sus reservas probadas y probables a un costo promedio de US$0.45 por onza. “Necesitamos contar con grandes reservas, hacer una buena inversión”, aseguró.
Semana Económica comentó que sus declaraciones contrastan con el escenario peruano, en el que hay riesgos de largo plazo: las leyes de las minas argentíferas están en caída y no hay proyectos nuevos, a excepción de Corani de Bear Creek.
Además, el precio de este metal primario sólo ha crecido 4% desde que tocó fondo en el 2015 y se prevé que no crecerá en el 2018: no es lo suficientemente atractivo como para que las mineras inviertan más en exploración.
El empresario sostuvo que Pan American Silver, que tiene sus principales operaciones en México y Argentina, ha invertido alrededor de US$300 millones en México para contar con las “grandes reservas” que necesitan. “Son decisiones grandes que tenemos que tomar para identificar reservas de gran alcance”, anotó. De acuerdo a datos de la compañía, sólo el año pasado la mina polimetálica La Colorada, en la que se extrae principalmente plata, elevó sus reservas en casi 8%.
El presidente de Fortuna Silver Mines, Jorge Ganoza, señaló que la compañía está orientada a buscar reservas para elevar la vida útil no sólo de las minas sino del negocio. “Lo que nos mueve es la calidad del activo más que la geografía. Estamos explorando en Europa, en Serbia”, manifestó. Asimismo, destacó que el proyecto Lindero en Argentina tiene una vida de reserva de 13 años. En este lugar existen reservas probadas de oro y cobre.
Steinmann además reiteró que tener bajos costos es un factor fundamental para las compañías mineras, ya que como también anotó el presidente de Fortuna Silver Mines, es algo que las firmas pueden controlar. “Tenemos que saber que hay que controlar los costos, los precios de los metales suben y bajan y no hay nada que podamos hacer al respecto”, refirió.
Sobre los costos en el Perú, el CEO indicó que “han subido”, pero que responden también a la innovación, como la que se observa en la minera San Ignacio de Morococha (Junín). Agregó que los costos totales por onza de plata vendida se ubicaron en US$6.98 en el primer trimestre del año.
Víctor Gobitz, gerente general de Buenaventura, refirió que su compañía tiene un “programa agresivo de reducción de costos en todas las operaciones mineras”. Agregó que Buenaventura también tiene un plan de negocio de largo plazo que incluye un plan de exploraciones para ampliar la vida útil de sus minas.
La minera peruana de metales preciosos Buenaventura dijo que Southern Copper Corp está evaluando su propuesta para desarrollar conjuntamente el proyecto cuprífero Michiquillay de Southern, con un valor de 2.000 millones de dólares, dijo a Reuters el presidente ejecutivo de Buenaventura.
“Fueron receptivos … pero les corresponde a ellos evaluar la propuesta preliminar”, dijo Victor Gobitz en una entrevista en el Simposio Internacional de Oro y Plata en Lima, Perú.
Las dos compañías poseen conjuntamente la compañía minera Coimolache en Perú, y ambas son socios menores en grandes minas en Perú controladas por compañías con sede en Estados Unidos.
Buenaventura cree que está bien posicionada para ayudar a desarrollar el proyecto de cobre porque ya opera una gran mina de oro a cielo abierto en la misma región del norte de los Andes donde Southern desarrollará Michiquillay.
Southern, controlada por Grupo México, opera minas en el sur de Perú y México.
“Nuestra lógica es que habría sinergias”, dijo Gobitz. “Creas más valor”.
Southern no estuvo inmediatamente disponible para hacer comentarios, pero cuando el acuerdo se hizo público por primera vez el mes pasado dijo que estaba evaluando la propuesta de Buenaventura.
Buenaventura, la mayor productora de oro y plata de Perú, prevé este año ser más "rigurosa" en sus inversiones de nuevos proyectos y aplicará un ambicioso plan de reducción de costos para disminuir su deuda, en medio de un alza de los precios de insumos en el sector, dijo este miércoles su presidente ejecutivo.
Victor Gobitz aseguró a Reuters además que la compañía espera elevar este año su producción de oro y plata -incluyendo firmas afiliadas- en un 8%, comparado con el año pasado.
Buenaventura es socia minoritaria de la mina de oro Yanacocha que controla la estadounidense Newmont y tiene una participación en la mina de cobre Cerro Verde de Freeport McMoRan.
"Este año queremos ser más rigurosos y más críticos en el momento de emprender una inversión con un control disciplinado del 'Capex' y un plan ambicioso de reducción de costos", dijo Gobitz en una entrevista con Reuters, luego de participar del Simposio de Oro y Plata en Lima.
Según Gobitz, la compañía tomará en cuenta para definir un proyecto de inversión que ofrezca una tasa interna de retorno mayor al 15%, que opere con bajos costos en cualquier escenario de precios y que genere un EBITDA mayor a US$100 millones anuales.
La compañía estima para este año que el EBITDA -ganancias antes de impuestos, intereses, amortización y depreciación- de sus operaciones directas crezca a entre US$430 millones a US$510 millones comparado con los US$372 millones que registró el año pasado.
El ejecutivo dijo que el crecimiento del EBITDA se daría por la "mejora de costos en todas sus minas subterráneas, un mayor volumen de producción de su mina de oro Tambomayo y una mejora de precios de cobre, plomo, zinc, que reciben de su mina El Brocal e indirectamente de Cerro Verde.
El Gobierno del presidente Martín Vizcarra no puede postergar más el desarrollo de grandes proyectos mineros como Tía María de Southern Copper y Conga de la estadounidense Newmont, que aportarían US$7.000 millones en la economía local, dijo el gerente general del Banco Central.
Renzo Rossini afirmó en el Simposio Internacional de Oro y Plata que es necesario que el Gobierno genere las condiciones para reactivar estos proyectos y se reduzcan las restricciones en los trámites, en momentos en que el país busca elevar sus ingresos con mayor inversión pública y privada.
"Es dramático, tres casos cuyas inversiones se han postergado y se pararon por distintas razones, pero que de alguna forma u otra, generó que US$7.000 millones no se dieran", afirmó Rossini en el simposio.
Rossini se refirió a los proyectos de Conga, Tía María y Rio Blanco, éste último de la minera Zijin Mining Group detenido en el 2005. Conga es un yacimiento de oro de Newmont y de la peruana Buenaventura que se detuvo en el 2011 tras protestas sociales y una decisión de la empresa por rentabilidad.
Tía María, de US$1.400 millones y parado desde el 2015 tras protestas de las comunidades, está a la espera de un permiso del Gobierno y una "licencia social" para su desarrollo.
Según Rossini, con la paralización de estos proyectos, Perú dejó de exportar US$2.727 millones por año y el Gobierno dejó de recaudar 1.500 millones de soles (US$456 millones) anuales, postergando obras públicas, de infraestructura y programas sociales.
"Esto nos debe de dar este sentido de urgencia con el que hay que trabajar, más que la complacencia de (decir) bueno, esto se arreglará solo, hay que esperar. No podemos de dejar para adelante cosas que podemos hacer hoy día", afirmó Rossini.
Rossini destacó las condiciones internacionales de buenos precios de los metales y el crecimiento de la economía de China -un gran consumidor de minerales- como una "oportunidad" que Perú no podía darse el lujo de perder.
Perú, el segundo productor mundial de cobre, plata y zinc y el sexto de oro, tiene en cartera 49 proyectos mineros, de los cuales se prevé que solo ocho arranquen en corto plazo, señaló.
"Nos gustaría que hayan más proyectos Greenfields para que se asegure el desarrollo del sector, y que las condiciones de los trabajos de exploración tengan menos restricciones en el campo de los trámites", afirmó
JC
