Aunque dejó atrás las pérdidas, el temor sobre su posible cierre no se disipa tras el rechazo al uso de tronaduras en el proceso de extracción.
Su mejor desempeño desde que inició operaciones consiguió en 2017 Mina Invierno, la faena de carbón ubicada en la Región de Magallanes y que es propiedad en partes iguales de Copec (grupo Angelini) y Ultramar (familia Von Appen).
Según consta en los estados financieros de Empresas Copec, el año pasado, la única operación de carbón a gran escala del país registró utilidades por US$ 13,2 millones, lo que se compara con una pérdida de US$ 8,8 millones de 2016.
El resultado es todavía más relevante si se consideran los números de 2015, cuando, dado el complejo momento de las materias primas, la empresa se vio obligada a hacer una pérdida contable, lo que provocó un resultado negativo de US$ 212 millones.
La mina inició sus operaciones en 2013, y desde ahí solo registró pérdidas, excepto en 2014, cuando sus ganancias se empinaron apenas por sobre los US$ 50 mil.
El mejor desempeño financiero de la faena en 2017 se explica principalmente por la mejora en el precio del carbón, el que ha sufrido fuertes variaciones desde que inició sus operaciones Mina Invierno.
El carbón bituminoso puesto en el puerto de Rotterdam, en Holanda -la medición más reconocida en esta industria- promedió en 2012 los US$ 120 la tonelada, sin embargo, fue cayendo, hasta llegar a mínimos de US$ 40 la tonelada a comienzos del 2016.
Pero a finales de ese año, los precios internacionales se recuperaron con fuerza y se mantuvieron entre los US$ 80 la tonelada y US$ 90 la tonelada el 2017, siendo el primer ejercicio completo con estabilidad en los valores desde que comenzó a operar la mina.
A esto se suman las medidas de contención de costos aplicadas por la compañía con fuerza desde 2015, que incluyeron una disminución de la producción.
Aunque estos positivos resultados no alejarían el “fantasma” del cierre de la faena, luego de que la autoridad ambiental rechazara el uso de tronaduras para la extracción del carbón. Este método buscaba disminuir los costos y, de este manera, asegurar la viabilidad operacional de la mina.
“Se compromete la continuidad operacional de Mina Invierno, ya que sin la incorporación de tronaduras, hay poco espacio para seguir produciendo”, dijo en enero de este año el gerente regional de Mina Invierno, Guillermo Hernández.