El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) dio un adelanto del informe que plantea las previsiones de la economía para América Latina y el Caribe. En materia de crecimiento, el análisis para esta región no es del todo alentador.
Para el BID esta sí registrará un crecimiento, calculado en un 2,6% en su Producto Interno Bruto (PIB), no obstante, muestra un retraso si se compara con otras como Asia y Europa emergente (conformado por países como Polonia, Ucrania y República Checa, entre otros), que proyectan un crecimiento del 6,5% y 3,7%, para el mismo periodo de tiempo.
Para el BID las principales razones por las cuales América Latina y el Caribe no logrará un crecimiento tan destacado son los reducidos niveles de inversión y la mala calidad de las inversiones.
Pero las previsiones de la entidad no se detienen aquí, alerta que incluso ese crecimiento del 2,6% podría debilitarse producto de una inflación inesperada, dejando este indicador disminuido en un 0,7% anual.
“Tales riesgos no se encuentran uniformemente distribuidos. Se espera que el Cono Sur (excluyendo a Brasil) presente un índice de crecimiento de 2,9% en 2018 al 2020 y podría perder 0,8% de crecimiento anual”, precisó el BID.
Esta entidad además espera que México, durante el tiempo 2018 - 2020 registre un crecimiento del 2,7%, perdiendo un 1% del PIB cada año en dicho periodo, mientras que Brasil crecería un 2% por año en los próximo tres años, registrando una pérdida del 0,5% anual.
“Un escenario alternativo vaticina un crecimiento de Estados Unidos mayor a lo esperado, índices de interés algo más elevados y más movimiento en las políticas comerciales. Esta combinación podría resultar neutra para la economía de Estados Unidos, que sigue creciendo sólidamente, pero el reporte afirma que sería negativo para América Latina y el Caribe”, suma a su reporte el BID.
Para José Juan Ruiz, Economista jefe del BID, no todo son malas noticias, puesto que la mayoría de la región ha vuelto a crecer, no obstante, señala que los mayores desafíos estarán concentrados en incrementar los niveles y eficiencias de las inversiones, para así aumentar la producción de la región y lograr un crecimiento más rápido y estable.
“El informe halló que la región no solamente invierte menos que sus pares más exitosos, sino que también lo hace con menos eficiencia”, es otras de las conclusiones que anuncia este reporte que será publicado en su totalidad el próximo 25 de marzo.